Se trata de una preparación elaborada sobre un Dodge Challenger SRT Hellcat Redeye Jailbreak moderno, con carrocería de fibra de carbono que representa las líneas del Charger de 1968
En este artículo repasamos la historia de este modelo, que no terminó de decantarse por ninguna de sus dos personalidades, y nos preguntamos si nos hemos portado bien con su recuerdo