Es posible que Lotus y Alpine hayan acabado amistosamente su asociación planificada para construir deportivos eléctricos, pero según parece, ambos tienen la intención de desarrollar tales vehículos de forma independiente el uno del otro. De acuerdo con Autocar, Lotus aun está trabajando en un sucesor eléctrico del Elise, y el proyecto, cuyo nombre en código es “Type 135”, llegaría a las calles a lo largo de 2026.

Según parece, trabajo de diseño e ingeniería todavía se está llevando a cabo en Hethel, en la sede del fabricante británico. La noticia llega después de que el CEO del Grupo Renault, Luca de Meo, dijese al mismo medio recientemente que está también trabajando en una nueva plataforma para el reemplazo eléctrico del A110, que podría respaldar a más de un modelo para la firma francesa. “Tuvimos una larga discusión y, finalmente, decidimos hacer nuestra propia plataforma”, explicó a Autocar el director ejecutivo.

Por su parte, Lotus no ha confirmado oficialmente el estado de su propio proyecto, pero el periódico entiende que el trabajo sigue en curso para preparar su lanzamiento en tres años. El Lotus Type 135 se diseñará y construirá en Hethel, Norfolk, lo que garantizará que pueda coger el linaje de los legendarios deportivos que se han producido allí, como el Lotus Elise o el Exige. Eso nos hace pensar también en agilidad y ligereza, aunque está por ver si la marca fundada por Colin Chapman puede asegurarlo en la era eléctrica.

Lotus Elise y Exige Final Edition (2021)

Alpine y Lotus habían anunciado en 2021 que compartirían el desarrollo de una plataforma para respaldar a los sucesores eléctricos de Elise y A110, pero en mayo decidieron cortar

La nueva plataforma E-Sports coronará la primera fase de la reinvención eléctrica de Lotus y representará la “esencia pura” de la compañía. Esta estructura otorgará una configuración de motor central, probablemente con el paquete de baterías apilado en el medio del coche, en lugar de en el suelo, como es habitual en los vehículos eléctricos. Eso permitirá que el próximo rival del Porsche 718 Boxster y el Alpine A110 se siente más bajo y garantice que la distribución del peso esté más de acuerdo con su competencia.

Este diseño no solo traerá consigo una posición de conducción extremadamente cerca del suelo y unas masas repartidas de manera equitativa entre ambos ejes, también desplaza el centro de gravedad hacia el centro del vehículo, lo que teóricamente hace que se comporte más como un coche de combustión interna con el motor en medio. Como extra, dentro de esta nueva plataforma hay celdas de batería cilíndricas, en lugar de las celdas rectangulares tradicionales, con el fin de conseguir una alta densidad energética.

Interior del Lotus Elise Sport 240 Final Edition

La base E-Sport sustentará a más modelos de la compañía, pues es compatible con modelos biplazas y 2+2 al poder variar las distancias entre ejes y contar con uno o dos motores

Si bien el Type 135 será un pequeño contribuyente al volumen de ventas de Lotus, será un modelo vital para la marca, tal y como manifestó a Autocar el jefe comercial de la empresa, Mike Johnstone: “El coche debe dar en la diana de la marca, que significa exactamente lo que representa Lotus en la era eléctrica. Pero eso no es de ninguna manera menospreciar al Eletre, [Type] 133 y [Type] 134”, continuó, refiriéndose al nuevo SUV eléctrico de la firma y a la próxima berlina y crossover, los cuales cuentan con entrañas Geely.

Aparentemente, la plataforma E-Sports se ha diseñado desde cero para compensar el peso adicional de un sistema de propulsión eléctrico y con miras a replicar los rasgos dinámicos típicos de los modelos anteriores de Lotus. El fabricante afirma que es un 37 % más ligera que la estructura equivalente utilizada por el Emira con motor de combustión, y acogerá a sistemas de propulsión cuya potencia de salida oscilará entre los 475 y 884 CV. De ser así, el reemplazo del Elise será el doble de potente que su iteración más enérgica.