La electrificación está dejando de ser el futuro para ser el presente, las últimas novedades tienen como protagonista la electricidad y las marcas lo están apostando casi todo por este camino, tanto en Europa como fuera de ella. Las diferentes normativas, con las que tiene que Unión Europa en el horno a la cabeza, están obligando a desarrollar a marchas forzadas toda la tecnología que moverá los coches que nos veremos obligados a comprar en no mucho tiempo.

Hay fabricantes que están mejor posicionados que otros, como siempre suele ocurrir, mientras que hay algunos cuyo futuro está fuertemente ligado a la electrificación. Uno de ellos es Lotus, la firma británica que fundara Colin Chapman y que actualmente está bajo control de la china Geely. Pero, aunque siendo un fabricante pequeño y muy especializado, no parece amedrentarse y tiene preparado, como ya vimos en su momento, un desembarco importante de nuevos modelos.

Uno de los más cercanos a ver la luz es el conocido como Lotus Type 135, un pequeño deportivo que llegará para ocupar el lugar del Lotus Elise, que contará con un motor eléctrico. El último modelo con motor de combustión es el Lotus Emira y después de su cese de producción no habrá más Lotus con emisiones. El primer eléctrico ya está listo, el Lotus Evija, y ahora toca seguir avanzando.

Nueva plataforma para vehículos eléctricos

Por el momento poco sabemos del Lotus Type 135, según la revista Autocar estará listo para el año 2026, mientras que los Elise, Exige y Evora verán el final de su vida comercial en 2021. También parece ser que mantendrá las exigencias de Lotus en cuanto a peso, con una estructura un 37% más ligera que la del Emira, algo absolutamente vital dado que las baterías pesan una barbaridad y en Lotus es algo inadmisible.

El Type 135 empleará la nueva plataforma modular, recientemente presentada, que será la base para muchos de los futuros modelos de la firma británica, incluido un SUV (todavía se está barajando esta posibilidad). Se trata de una estructura que mantendrá las características básicas de todos los coches de la marca, como la colocación central del conjunto propulsor, es decir, la batería y el motor eléctrico estarán situados tras los asientos y por delante del eje trasero. También está diseñada para poder montar un segundo motor eléctrico.

Será fabricada por Saringsons Industries y recibe el nombre de LEVA, Lightweight Electric Vehicle Architecture, que además, contará con una subestructura delantera intercambiable. Así, podrán lograr varias bases según el modelo a fabricar: una plataforma para modelos biplaza con 2.470 milímetros de batalla, motores de hasta 350 kW (470 CV) y una batería con 66,4 kWh de capacidad; otra con una batalla extendida hasta los 2.650 milímetros, que acogerá un motor más capaz con hasta 650 kW (870 CV) y una batería que alcanza los 99,6 kWh; la tercera opción es una estructura especial para coches tipo 2+2, para lo cual, la batería pasará a estar en el piso y no en posición trasera-central, adoptando también un segundo motor eléctrico.

Es evidente que el Lotus Type 135 tomará como base la primera opción de las tres, un biplaza de batalla corta, un solo motor y batería colocada en posición central-trasera. Poner la batería en esa zona no solo mejora el reparto de pesos, también permite que el conductor vaya sentado mucho más abajo que si estuviera la batería en el piso. Lo mejor de esta plataforma, además de ser un proyecto específico para coches eléctricos, es que su responsable es Richard Rackham, el mismo que diseñó la plataforma de aluminio extruido del Lotus Elise hace 25 años.

El proyecto LEVA es tan revolucionario ahora como lo fue la arquitectura del Elise en 1996. Siguiendo el espíritu de Lotus, se ha conseguido un importante ahorro de peso, centrándose en el rendimiento, la eficiencia y la seguridad de la estructura desde el principio, por ejemplo, utilizando la estructura del vehículo como carcasa de la batería, con una UDE integrada, eliminando los subchasis atornillados y optimizando la composición de la suspensión multibrazo” – Richard Rackham, responsable del proyecto LEVA de Lotus

Ligereza y agilidad, imprescindibles

Una de las cuestiones más importantes para el desarrollo de la plataforma LEVA y para la creación del Lotus Type 135, es la ligereza y la agilidad, características intrínsecas de un Lotus. Así lo ha confirmado Matt Windle, el director ejecutivo de Lotus, en unas declaraciones a la revista Autocar.

Es nuestro ADN: dinámica, ligereza, aerodinámica; eso es lo que hacemos en todos nuestros productos. Todavía queremos que estos sean productos Lotus. Tendrá un sistema de propulsión diferente, pero ese sistema también viene con beneficios: par instantáneo, enfriamiento más fácil y mejor empaque”.

Al mismo tiempo la aerodinámica será un factor clave, algo que ya se está viendo en otros coches eléctricos de la competencia. Cuanto mejor sea el flujo del aire alrededor del coche, mejor autonomía y más velocidad, es algo que se emplea desde hace muchos años, pero en el caso de los coches eléctricos cobra una importancia mucho mayor.

Sin embargo, el Lotus Type 135 será más caro que el Elise, aunque Windle ha comentado que se explotarán las sinergias del Grupo Geely, aprovechando tecnología de otras marcas del conglomerado como Volvo, Polestar o Lynk & Co. Aún así, el precio medio según Windle estará entre las 80.000 y las 100.000 libras, aproximadamente entre 94.400 y 118.000 euros, una subida importante cuando el Elise más caro superaba por poco los 105.000 euros. El Lotus Elise 250 Final Edition, la versión más potente de la edición de despedida, se anunció a un precio de 53.750 euros sin impuestos.