Ferrari se prepara el adiós del Ferrari Portofino M, un modelo que lleva mucho tiempo en el mercado. En una entrevista con los compañeros de Road & Track, el fabricante de automóviles con sede en Módena anunció el jueves que en poco tiempo cesará la producción del superdeportivo básico para la llegada del nuevo Ferrari Roma Spider, que ocupará su lugar. El Roma Spider presentado el jueves, será el descapotable de acceso a la marca, y utiliza el mismo V8 biturbo de 620 CV y una distribución de asientos 2+2, pero evita el techo duro plegable, complicado y pesado, y opta por un techo plegable blando, más ligero y tradicional.

El Portofino M es una evolución del Portofino, presentado en 2017, y antes de eso, se denominaba California T, que fue el sustituto del California. El linaje se remonta a 2008, cuando el California original usaba un V8 de atmosférico de 4,3 litros que generaba 460 CV. El apodo “T” vino a hacer patente la instalación de dos turbos en 2014, aumentando la potencia a 560 CV, y, posteriormente, la potencia se elevó nuevamente a 600 CV cuando pasó a llamarse Portofino en 2017, para terminar la escalada en los 620 CV en 2020 con la introducción del Portofino M.

El California fue creado con una visión más internacional, pretendiendo abordar mayor número de mercados con un coche que fuese del agrado de todos, sin perder el espíritu Ferrari. Si bien el Portofino M y sus predecesores nunca pudieron estar a la altura de las experiencias de conducción puras de sus hermanos más deportivos, aun así es necesario para hacer sostenible el negocio de la familia Ferrari. Con él acaba el deportivo de techo duro, volviendo a una configuración más clásica, y traicionando, en parte, la definición de Gran Turismo con la que se identificó al Portofino M en su presentación. El descapotable con techo rígido retráctil, que combina lujo, rendimiento y versatilidad, ahora busca un menor peso que mover para su V8 de 3,9 litros.

El “pequeño deportivo italiano” ha sido un superventas, dentro de su cuota de mercado claro está

Con el Ferrari Portofino M llegó el Manettino con cinco modos de conducción, lo que permitía al conductor seleccionar diferentes modos para adaptar el coche a sus preferencias y condiciones de la carretera. Los modos disponibles son: Wet, Confort, Sport, Race y ESC Off. Este elemento lo heredó de sus hermanos mayores, alcanzando así la gama básica la tecnología heredada del mundo de la competición. Lejos quedan ya aquellos Ferrari 360 Spider que rondaban los 400 CV y los 1.400 kg, ahora “las tallas” son otras.

Hay que reconocer que Ferrari ha conseguido un coche equilibrado en todos los sentidos, utilizable a diario y, por supuesto, disfrutable si se quiere realizar conducción deportiva. Esperamos que el nuevo Roma Spider le siga dando alegrías a los del Cavallino Rampante, como este Portofino M hizo duplicando sus ventas en el último año con la ayuda del F8 Tributo y de los mercados emergentes. Por el momento nos despedimos del Portofino M con el video que hizo Ferrari hace un par de años.