¿Preocupado por el “baneo” de los motores de combustión? ¿Te encanta el Ford Mustang clásico, pero quieres circular con él por el centro de la ciudad? Charge Cars, un nuevo fabricante con sede en Londres, tiene la solución. Han tomado el exterior del Ford Mustang de 1960 y le han dotado de una mecánica completamente eléctrica. ¿Sacrilegio o genialidad?

Este nuevo fabricante inglés ha presentado su primer producto, el Charge Mustang, un Ford Mustang de 1960 por fuera -con licencia del fabricante original-, y un eléctrico de última generación por dentro. Según sus datos, tiene una batería de 64 kWh y una potencia máxima de 300 kW -402 CV- y 1.200 Nm de par, con lo que puede acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 3,09 segundos. Según sus cálculos, tendrá una autonomía de 200 km y se podrá recargar en postes de 50 kW DC -corriente continua-.

Puede pedirse como tracción trasera o total, y con carrocería fastback o descapotable, aunque ahora mismo solo admiten reservas con un depósito reembolsable de 5.000 libras. El precio total del coche partirá de las 200.000 libras, aunque variará en función de la configuración que elija cada cliente, fabricándose en total 499 unidades.

Los componentes eléctricos del Charge Mustang provienen de la furgoneta de Arrival

En cuanto al vehículo, vemos que reproduce fielmente el exterior del Ford Mustang del 60, aunque tenga algunos toques modernos, como las luces, las llantas o la parrilla. En el interior encontramos un cuadro de mandos completamente digital, acompañado de una pantalla en la consola central, desde donde se controlan todas las variables del vehículo.

¿De donde sale esta compañía? Según parece, sus ingenieros provienen de Williams F1, McLaren Automotive y Jaguar Land Rover, mientras que sus socios tecnológicos son la compañía de furgonetas eléctricas Arrival, que provee los componentes eléctricos del coche, los creadores de RoboRace y Michelín.

¿Os ha gustado? Pues podréis verlo en acción y conducirlo en Nueva York, Los Ángeles, San Francisco, Londres, Munich, París, Milán, Abu Dhabi, Tokio, Pekín y Shangai, entre marzo y septiembre de 2019. En ese mismo mes de septiembre del año que viene comenzarán las primeras entregas a sus propietarios.