Junto al Astra, el Insignia es el único Opel que todavía no ha sucumbido a las estructuras de su actual dueña, PSA. La segunda generación de la berlina germana aterrizó en los concesionarios en 2017, y hace unos pocos meses se sometió a un ligero restyling para empezar a fabricarse en la planta de Rüsselheim. La gama quedaba compuesta por un amplio abanico de motores y de transmisión, pero ahora se han añadido un par más.
Disponibles tanto en las carrocerías berlina (Grand Sport) como familiar (Sports Tourer), Opel ha introducido dos propulsores de cuatro cilindros y 2 litros turboalimentados, uno de gasolina y el otro de gasóleo. El primero de ellos ofrece 170 CV y 350 Nm desde tan solo 1.500 RPM, con un consumo medio homologado bajo ciclo NEDC de entre 6 y 6,4 l/100 km y unas emisiones que oscilan entre los 145 y 150 g/km de CO2 en el sedán. Con esta configuración, hace el 0 a 100 km/h en 8,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 228 km/h.
Por otro lado, la unidad diésel genera 174 CV y 380 Nm, con un consumo de combustible –en el Grand Sport– en ciclo NEDC de 5,1 l/100 km y unas emisiones de 135g/km de CO2. La velocidad máxima es de 223 km/h, mientras que la carrera hasta los 100 km/h necesita 8,9 segundos. En este caso, la única transmisión disponible es una automática de ocho relaciones y tracción total. Por supuesto, para aquellos que quieran estas dos características, pero con algo más de chicha, pueden optar por la vertiente GSi de gasolina de 230 CV y 350 Nm.
Cuando el actual Opel Insignia termine con su ciclo de vida, abandonará la plataforma de General Motors en virtud de la EMP2 de PSA, que ya da vida a modelos como el Peugeot 508 o el DS 9
“El nuevo Insignia ha estado en producción en nuestra planta de Rüsselsheim desde septiembre”, dice Andreas Marx, director de Opel Alemania. “Estamos especialmente orgullosos de nuestro buque insignia y su dinámico y elegante diseño. Con las dos nuevas incorporaciones a nuestra oferta mecánica, cada cliente puede elegir el Insignia ideal para sus propias necesidades”. Un paso necesario para hacer frente a un segmento ya no tan competido por las marcas generalistas destacando el Volkswagen Passat, el Peugeot 508 y el Ford Mondeo.
El nuevo Opel Insignia 2.0 Turbo ya está disponible en versión GS Line desde 29.310 euros (con descuentos aplicados). El 2.0D hace lo propio desde 33.450 euros en el acabado Business Elegance. La oferta mecánica se completa con un bloque de gasóleo de 1,5 litros que pone el escalón de entrada con 122 CV y un 2 litros de gasolina con 200 CV.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS