No nos gusta ser los portadores de malas noticias, pero desde donde nos sentamos, parece poco probable que veamos un Nissan GT-R de próxima generación a corto plazo, y la evidencia de eso está aumentando. Considera los hechos: en diciembre, será el decimotercer año del GT-R en producción, lo que es una eternidad en la era automotriz. Más allá de las actualizaciones anuales reglamentarias, lo cierto es que la escasez de información verídica sobre el futuro de Godzilla comienzan a ser preocupantes.

A principios de este año, Nissan publicó para el mercado estadounidense un avance llamado “From A to Z” que ofrecía una vista previa de los próximos modelos de la marca. En tráiler se percibían las siluetas del Ariya, Armada, Frontier, Kicks, Navara, Note, Pathfinder, Qashqai, X-Trail, Terra e incluso un modelo Z completamente nuevo. Pero la joya de la corona en la línea del fabricante nipón, el GT-R, no aparecía por ningún lado. Sí, en un clip destinado a mostrar la dirección de los próximos modelos de Nissan, su deportivo insignia estaba ausente.

El 370Z también necesita un reemplazo desde hace tiempo, y parece la prioridad para Nissan. El fabricante japonés acaba de mostrar su Z Proto, y no es que nos escuches quejarnos del nuevo Z. Ofrecerá casi todo lo que los entusiastas de los deportivos tradicionales anhelan: una potencia más que suficiente de un motor V6 biturbo, propulsión y manual. Ahora bien, no vendrá a tierras europeas y nos tendremos que joder aguantar con la gama SUV. ¿Qué ocurrirá con el próximo Nissan GT-R? Probablemente, lo mismo, per aún con esas, su legado ha de continuar.

Nissan GT-R50 (2020)

Y así será, aunque ni la propia marca sabe cuándo llegará un sustituto o de qué forma lo hará. Durante la presentación del Z Proto, el vicepresidente de planificación global de productos de Nissan, Iván Espinosa, dijo que la compañía todavía está abierta a muchas opciones para el GT-R de próxima generación. “En este momento, estamos muy abiertos, pues pueden pasar muchas cosas. Estamos explorando cosas diferentes y volveremos con ustedes cuando estemos listos para contarles lo que hemos elegido con el próximo GT-R”, dijo Espinosa a Cars Guide.

“El objetivo del próximo GT-R es volver a ser una máquina de rendimiento muy creíble, como lo es el GT-R actual, incluso después de algunos años en el mercado, sigue siendo un coche muy capaz, súper rápido y súper grande para conducir, y seremos fieles a eso”, manifestó el directivo al medio australiano. Durante años se ha especulado en una transformación hacia un híbrido, pero cuando se le preguntó a Espinosa directamente si este será el caso, este explicó que el tren motriz a emplear dependerá de la madurez de las tecnologías híbridas cuando se lance.

“Se trata de entender ‘¿qué se quiere entregar al cliente?’, Y luego la solución”, declaró Espinosa. “Hay muchas opciones, y la madurez de esa tecnología es la otra cosa [a considerar]. Necesitamos hacer frente al ritmo de madurez de la tecnología, las expectativas del cliente y la experiencia que queremos crear”. Porque al final no importa cuál sea la decisión final, el futuro Nissan GT-R tendrá que ser un formidable deportivo de alto rendimiento capaz de poner contra las cuerdas a otros coches firmados por grandes nombres como Porsche o Lamborghini.

Nissan GT-R 50 Aniversario (2019)

Actualmente, Nissan se encuentra en una situación difícil, por lo que las soluciones rápidas e inteligentes son imprescindibles, y el GT-R no es una prioridad inmediata

Con todo esto en mente, quizás Nissan no esté prolongando la vida útil del GT-R para mantenerlo a un precio relativamente asequible. En cambio, la compañía está retrasando la introducción de un nuevo modelo porque quiere hacerlo bien. Obviamente, al optar por la ruta de la hibridación se agregará un peso considerable a un vehículo que ya es bastante pesado (más de 1.800 kg). Y, si el Nissan Z Proto (y el futuro 400Z) es una indicación de lo que podemos esperar en un futuro, el próximo GT-R viajará sobre una versión modificada de la plataforma del modelo actual.

Entonces, eso plantea una gran pregunta: ¿cómo puede Nissan mejorar el GT-R actual, integrar la hibridación y mantener el peso bajo control? Parece que tendremos que esperar para verlo, pero puedes apostar que la compañía no se apresurará a producir nada sin estar seguro de que es correcto en todos los aspectos. El GT-R es un coche halo, una seña de identidad de la marca que lleva 50 años haciendo historia, y el modelo de próxima generación tendrá el listón muy alto para suceder al modelo actual. No desistamos, y tengamos paciencia, porque llegará.