El enorme Audi Q8 recibe una nueva versión -dos, en realidad- que le permite lucir en España la etiqueta CERO de la Dirección General de Tráfico, TFSIe. Es un monstruo que supera ampliamente las 2 toneladas de peso, pero tiene 47 kilómetros de autonomía eléctrica y con eso es suficiente -más de 40 km- para contar con tal distinción en España. Una suerte para quien pueda pagar los 86.000 euros que cuesta la versión más barata de esta versión.

Se trata del Audi Q8 TFSIe que llegará al mercado en versión 55 TFSIe de 381 CV y en versión 60 TFSIe de 467 CV, cuyo precio se dispara hasta los 96.700 euros. Variantes que ya están disponibles bajo pedido y que representa la séptima opción híbrida en la gama de Audi, que ha tomado la hibridación enchufable como punta de lanza en su camino hacia la reducción de emisiones en dura pugna con los eternos rivales: BMW y Mercedes.

La base de ambas versiones en la misma, el motor 3.0 V6 TFSI con 340 CV y 450 Nm de par, que además es capaz de superar la normativa Euro6 AP. Se combina con el cambio automático Tiptronic de ocho relaciones y la tracción total quattro típica de la marca, un sistema que envía el 60 % del par a las ruedas traseras de forma predeterminada, aunque si es necesario puede variar del 85 % al eje delantero o al 70 % al eje trasero.

El conjunto híbrido también es igual en las dos versiones, con un motor eléctrico de 136 CV colocado dentro de la caja de cambios. Las baterías se colocan en el maletero (se pierden 100 litros de capacidad, de 605 a 505 litros) y tienen una capacidad total de 17,8 kWh. Se han montado dos circuitos de refrigeración para el sistema eléctrico, uno para las baterías y otro para el motor eléctrico y la electrónica de potencia. Respecto a las cargas, acepta corriente alterna hasta los 7,4 kWh y el tiempo de carga es de 2 horas y media.

Como viene siendo costumbre en los nuevos modelos electrificados, existe una aplicación para el teléfono móvil que permite comprobar el estado de la carga, la autonomía disponible, programar la carga y ver las estadísticas de consumo. Al mismo tiempo, se puede programar la climatización y en función del equipamiento, se puede activar la calefacción del volante y de los asientos (también la ventilación de los mismos). La aplicación muestra igualmente los puntos de recarga disponibles y la propia marca ofrece el servicio “e-tron Charging” para los clientes que lo soliciten y que permite acceder a 150.000 puntos de recarga en Europa con una sola tarjeta.

Hay varios modos de funcionamiento, también típicos de este tipo de coches: Auto, Hold, Charge y EV. En el primer caso el sistema gestiona el funcionamiento general según las necesidades, incluso usando la información del navegador para conocer la ruta que se tiene previsto recorrer. El modo Hold sirve para reservar la carga de las baterías y el modo Charge emplea el motor de combustión para cargar las baterías. El EV es el modo eléctrico.

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