Fiat Chrysler Automobiles pondrá fin a la producción de vehículos diésel para el año 2022, según un informe publicado el domingo por Financial Times. El plan sigue a una caída en la demanda de estas motorizaciones entre los consumidores europeos tras el escándalo de las emisiones de Volkswagen. El movimiento no solo implicaría el fin de los diésel en la marca Fiat, sino también en Alfa Romeo, Maserati y Jeep.

Sin embargo, los planes de la FCA destacan el continuo colapso de lo que ha sido una fuente de combustible clave en Europa. Forbes, por ejemplo, destacó que las ventas de diésel en Alemania cayeron en enero a un 33,3%, un descenso de un 11,8% respecto al mismo mes del pasado año. El diésel sigue siendo atractivo para algunos usos debido a sus beneficios de par y eficiencia de combustible, a pesar de que persisten las preocupaciones sobre sus impactos en la salud.

Esta revelación no significa que FCA, que actualmente no vende diésel en Estados Unidos o Canadá, elimine esta oferta de toda su línea. Se espera que el fabricante de automóviles italoestadounidense continúe ofreciendo opciones diésel en algunos vehículos

Mike Fiske, analista senior de IHS Markit, describió en un artículo de Free Press la semana pasada que el final para el diésel en Europa podría llegar en 2035, pero también dijo que “el diésel para Estados Unidos no va a desaparecer“. Financial Times, citando fuentes anónimas conocedoras del tema, dijo que la presentación oficial del anuncio de la empresa sobre el diésel se incluiría como parte de un plan plurianual que se lanzará en junio. Ese plan tiene el objetivo de trazar las expectativas de la compañía para el futuro.

Las motorizaciones diésel son difíciles de reemplazar en modelos grandes y/o pesados, como los SUV. Sin embargo, ahora Fiat incluso ofrece diésel en el segmento A, cuando toda la competencia ya ha dejado ese segmento únicamente con gasolina o algún eléctrico suelto. Decir adiós al diésel implica hacer grandes ahorros en peso, que los gasolina reduzcan su sed y tener más híbridos o eléctricos.

Es curioso que Marchionne dudase meses atrás sobre la rentabilidad de los eléctricos. El italiano no estaba de acuerdo con renunciar a este combustible en octubre de 2017 en pro de apostar por la hibridación. “Preferimos esperar a que llegue este escenario combinando la combustión y la electrificación de manera que el retorno económico de nuestra inversión asegure nuestra continuidad“- afirmó el mandatario.

Durante los próximos años iremos asistiendo a más empresas que se suman a esta tendencia. De hecho, hace unos días nos enterábamos de que Porsche abandonaba el diésel en pro de apostar por la hibridación y “limpiar” la imagen que pesa sobre el Grupo VAG y sus motores movidos por gasóleo. Ya hicieron anuncios en esa dirección Volvo, Jaguar, Land Rover e incluso PSA. A este paso, pocos fabricantes seguirán ofreciendo diésel en turismos al final de la próxima década.