Extrovertido, extravagante y extraordinario para conducir, el Aston Martin Vanquish Zagato Shooting Brake podría ser el “familiar” definitivo. Basado en el coupé británico vendido de 2012 a 2018, el famoso carrocero italiano quiso despedir al modelo con una edición especial limitada a 99 unidades que, a buen seguro, podría cumplir con los deseos de muchos de los que estamos aquí. El ejemplar que ves en pantalla es el número 73.

Si bien uno de sus rivales podría ser el Ferrari GTC4 Lusso, no tiene el mismo grado de rareza o misticidad del modelo inglés, además de que el italiano se produjo en serie. Y aunque es un Vanquish por su nombre, el Zagato Shooting Brake en realidad está construido sobre una estructura híbrida que se basa en gran medida en la versatilidad de la ahora desaparecida arquitectura “VH” que sustentaba todos los modelos construidos en Gaydon antes de que se introdujesen el Vantage, DB11 y DBS Superleggera turboalimentados.

El uso de la estructura posterior del Rapide brinda una bienvenida extensión en la distancia entre ejes y aprovecha la posición del depósito de combustible de este (el Vanquish normal lo monta sobre el eje trasero) para crear un área de carga plana. La carrocería está hecha de fibra de carbono, lo que ahorra algo de peso y hace que la pequeña producción sea viable. Todo el coche se ve sensacional, pero un aspecto destacado del diseño es el panel central de techo de vidrio que se estrecha y se extiende a lo largo del vehículo.

La larga colaboración entre Aston Martin y Zagato ha dado pie a coches muy emocionantes, pero pocos son tan intrigantes y atractivos como el Vanquish Zagato Shooting Brake

Al frente, lo importante está bajo el capó. Como la gran mayoría de los modelos de Aston Martin de la época, el Vanquish Zagato Shooting Brake acogía en su vano un corazón V12 de 5,9 litros atmosférico. Este rendía una potencia de 604 CV a 7.000 RPM y un par motor de 630 Nm a 5.500 RPM que iban a parar a las ruedas traseras a través de una caja de cambios de convertidor de par de ocho relaciones (Touchtronic III) y un diferencial de deslizamiento limitado. Aceleraba de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos hasta los 324 km/h.

Genial, muy codiciado y coleccionable, el mayor éxito del Vanquish Zagato Shooting Brake es que es tan especial para conducir como para mirar. Y con un precio en 2019 de 650.000 libras esterlinas antes de impuestos, podemos decir sin miedo a equivocarnos que podrías disfrutarlo por unos cuantos años, y venderlo de nuevo sin perder un solo euro. Eso es algo que vemos reflejado en el precio de esta unidad: 699.900 dólares (650.000 euros, aprox.) y un kilometraje de 1.935 millas, o 3.114 kilómetros a este lado del charco.

En lo que respecta a las características de este ejemplar en particular, el exterior luce un tono Tungsten Silver Metallic con un interior en Obsidian Black. Su habitáculo cuenta con una gran mezcla de materiales, incluyendo cuero y gamuza y unos reposacabezas que tienen bordados los logotipos de Zagato. Este Aston Martin Vanquish Zagato Shooting Brake está a la venta por Miller Motorcars en Greenwich (Connecticut, EE. UU.). Como curiosidad, de las 99 unidades construidas, solo 13 de ellas fueron a parar a Estados Unidos.

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