Según informaciones recogidas por Top Gear, la división deportiva de BMW ha tomado una decisión definitiva acerca de las transmisiones que instalarán a partir de ahora en sus modelos. Durante estos últimos años de supervivencia de los motores de combustión interna, los modelos de BMW M ya no equiparán cajas de cambios de doble embrague. Dentro de poco, además, también habrá que decir adiós a las transmisiones manuales y serán todos ellos automáticos, sin excepción.

Ha sido el jefe de desarrollo de la división deportiva del fabricante bávaro, Dirk Hacker, quien ha confirmado esta política. No habrá más DCT en los BMW M que se produzcan a partir de ahora y el BMW M2 actual será el último vehículo que cuente con pedal de embrague. Una de las razones esgrimidas desde el seno de BMW M como motivación para esta decisión consiste en que cada vez existen menos proveedores de cajas de cambios manuales. Se considera que dentro de seis o siete años no habrá posibilidades de adquirir este tipo de transmisiones para instalarlas en sus vehículos, puesto que la proliferación de las cajas de cambios automáticas es un movimiento común en el general de la industria del automóvil hoy en día.

Los últimos lanzamientos de modelos de BMW M ya hacían presagiar que la caja de cambios de doble embrague pasaría pronto a mejor vida. Cuando el año pasado el BMW M4 CSL fue presentado con la misma transmisión automática de ocho relaciones que incorporan el resto de componentes de las gamas de los BMW M3 y BMW M4, todo hacía apuntar que los DCT dejarían de estar presentes en sus modelos.

La caja de cambios de doble embrague, desde la perspectiva de BMW M, ha llegado a su final. A partir de ahora, serán manuales o automáticos, hasta que lleguen los eléctricos automáticos”, ha afirmado Dirk Hacker, jefe de desarrollo de BMW M, según recoge Top Gear

También con el BMW M5, la división deportiva de los bávaros mostró sus intenciones. Este modelo cuenta con una transmisión automática, cuya elección se debió, según el propio Dirk Hacker ha comentado, a motivos de comodidad de uso, más que a una reducción de costes. Además, también ha afirmado que el rendimiento ofrecido por esta caja de cambios automática de ocho relaciones es superior al que puede obtenerse con el DCT habitual anteriormente en sus modelos. De hecho, pone como ejemplo su BMW M4 GTR de competición, en el cual se instala esta transmisión automática.

El jefe de desarrollo de BMW M también se ha pronunciado acerca de la posibilidad de que sus futuros modelos eléctricos cuenten con algún tipo de sistema que emule el funcionamiento de una caja de cambios manual. Según sus propias palabras, aunque cree que sería posible adoptar una solución de este tipo, este no será el camino que seguirá BMW M.

Así pues, el BMW M2 será el último representante de los BMW M con caja de cambios manual, salvo que la marca bávara, y más concretamente su división deportiva, nos sorprenda con algún lanzamiento tan inesperado como demandado por sus aficionados, como podría ser un BMW Z4 M40i con tres pedales.