Desde la aparición de su primera generación, en 1989, y hasta nuestros días, en los que permanece a la venta su cuarta iteración, el Mazda MX-5 se ha mantenido como el objeto de deseo principal de cualquiera que quisiera obtener sensaciones puristas de conducción. Ahora, sabemos que Mazda ya tiene en marcha el proceso de desarrollo de la próxima y quinta generación del modelo, gracias a unas fotografías que nuestros compañeros de CarScoops han publicado recientemente, en las que se puede observar una mula de pruebas que ya circula por carreteras alemanas, ataviada, eso sí, con cierta cantidad de camuflaje.
El vehículo que podemos ver en las fotografías esconde la nueva mecánica que animará al pequeño roadster japonés. Mucho se ha hablado en los últimos tiempos acerca de cuál sería el próximo movimiento del fabricante de Hiroshima en este sentido, en la medida en que las normativas anticontaminación actuales suponen una amenaza real a su motorización de aspiración natural. Incluso se han llegado a leer supuestas filtraciones que convertían al futuro Mazda MX-5 en un vehículo híbrido completo, ya para esta próxima generación.
Sin embargo, todo hace indicar que, en la búsqueda por obtener un compromiso entre su adaptación a la realidad de la industria del automóvil de hoy en día, con un marco normativo cada vez más restrictivo en cuanto a emisiones de gases contaminantes, y el mantenimiento de su sobresaliente comportamiento dinámico, basado en la ligereza, la futura generación del Mazda MX-5 sucumbirá a la electrificación, pero en forma de hibridación ligera.
Así, se espera que incluya una instalación eléctrica de 48 voltios, que permitirá la integración de un pequeño motor eléctrico que pueda aliviar en alguna medida su cifra de emisiones, para así situarse en una mejor posición ante la inminente llegada de las futuras normativas a este respecto, como la Euro 7. Además, todo hace indicar que su motor de gasolina, que mantendrá su aspiración natural, contará con la tecnología Skyactiv-X.
La quinta entrega del modelo, con denominación interna NE, llegará a los mercados europeos probablemente en 2024, según declaraciones de Joachim Kunz, jefe de desarrollo de producto de la marca japonesa en nuestro continente
Por otro lado, la mula de pruebas que se ha podido avistar en las carreteras alemanas nos ofrece solo algunas informaciones acerca del aspecto exterior del futuro Mazda MX-5, en la medida en que no se trata, en realidad, de un verdadero prototipo del nuevo modelo. El paragolpes trasero sí que nos permite intuir que, en su quinta generación, el roadster japonés será algo más ancho, al menos en su vía posterior. El abundante camuflaje presente en el frontal nos permite también adivinar que se producirán algunos cambios en este frente.
Por lo demás, esperamos que se mantengan vigentes las constantes que han hecho de este modelo un vehículo tan apreciado, sobre todo en los entornos más petrolhead. Conservará su capota de lona, la propulsión trasera, su ligereza –hibridación ligera mediante– y su motor atmosférico, para mantenerse en su segmento no tanto como el rival a batir –pues no parece posible–, sino como el referente a imitar. La mayor renovación se espera en el interior, donde suponemos que se integrarán tecnologías de conectividad y de asistencia a la conducción a la altura del estado de la técnica actual.
En cuanto a los plazos, el hecho de que se trate de solo una mula de pruebas nos hace pensar que aún quedan algunos meses para su puesta de largo. La próxima generación del Mazda MX-5, con denominación interna NE, será presentada, según los pronósticos más tempranos, a finales del año próximo, con una llegada a los concesionarios estimada para el año 2024.
David García
No conozco sensación mejor que la de un volante en las manos. Disfruto también con ellas sobre el teclado, escribiendo ahora para vosotros algo parecido a aquello que yo buscaba en los quioscos cuando era un guaje.COMENTARIOS