Tanto anticipamos el desembarco de los productos de Chery en España, que hemos terminado retrasándonos más que nadie a la hora de confirmar la llegada del Omoda 5, uno de estos vehículos, a nuestro mercado. Se trata de un SUV de cinco plazas, que acaba de iniciar su comercialización en nuestro país, apostando aún por los motores de combustión interna.

Aunque en España la marca comercial bajo la que se vende este modelo es Omoda, el responsable de su fabricación, y de los que lo acompañarán en el futuro en su gama, es Chery. Esta empresa de nacionalidad china goza de relativo éxito en otros mercados, como el latinoamericano o el de Oriente Medio. De propiedad estatal, en sus 26 años de vida ha conseguido establecerse como el fabricante de automóviles que más vehículos exporta de toda China.

El que traen a España es un crossover o SUV compacto, con 4,40 metros de longitud total y espacio en su interior para acoger a cinco adultos. A decir verdad, y a la espera de poder contar con una unidad del modelo que podamos ver desde más cerca —y tocar—, su imagen parece más trabajada, en el buen sentido, que la de los productos que estamos acostumbrados a recibir desde China. Sin ser un automóvil que despierte pasiones por su aspecto, sus elementos de diseño guardan relación entre sí, aunque también podamos identificar algunos detalles que recuerdan a otras marcas —como Nissan o Land Rover—.

La marca Omoda, propiedad de Chery International, entra en Europa por la puerta española, con un SUV compacto de aspecto aseado y con un motor de gasolina de prestaciones más que aceptables

En cualquier caso, se trata de un vehículo construido sobre la plataforma T1X de la marca china, que en realidad ha sido desarrollada con la colaboración de Land Rover —ambas empresas firmaron un acuerdo de cooperación hace ya una década, para construir los automóviles británicos en China. También se sirven de lo que aprendieron con su marca Qoros, nombre comercial de una empresa conjunta que formó en su día Chery con Kenon Holdings, que no es más que un instrumento de inversión asentado en Singapur para gestionar los intereses inversionistas en algunas compañías de Israel Corporation, un conglomerado empresarial de este país que nació también con titularidad estatal.

A diferencia de otros fabricantes con el mismo origen, su desembarco en España no está ligado a una apuesta por la electrificación. El Omoda 5 equipa un propulsor de gasolina de cuatro cilindros, con 1,6 litros de capacidad y sobrealimentado por turbocompresor. Su potencia máxima es de unos nada despreciables 186 CV, con 290 Nm de par. Este motor está asociado a una caja de cambios automática de doble embrague y siete relaciones. Además, se ofrecen dos acabados, Confort y Premium, en función de si los compradores desean primar la comodidad a bordo o un aspecto más lujoso de su habitáculo. En este lugar está presente una pantalla de 10,25 pulgadas, para controlar el sistema multimedia, y cuenta con conectividad con Apple CarPlay y Android Auto. Para la pintura exterior se podrá solicitar un acabado bitono.

España es el primer mercado europeo en el que están disponibles los modelos de Omoda. ¿Acaso en homenaje al país de procedencia del primer vehículo que fabricaron, en 1999, que no fue otro que un SEAT Toledo 1L remarcado con su logo y denominado Chery Fengyun? Por ahora, depende de la ayuda de importadores para distribuir sus productos en nuestro territorio —Grupo Invicta, en este caso—, pero sus intenciones pasan por establecer su propia red comercial en los próximos tiempos. Los precios de este Omoda 5 arrancan desde los 35.494 euros.

Galería de fotos