El Donkervoort F22 alcanza 2,3 g de aceleración lateral, nuevo récord

El Donkervoort F22 alcanza 2,3 g de aceleración lateral, nuevo récord

La cifra supone una nueva referencia para los superdeportivos de calle


Tiempo de lectura: 3 min.

Los automóviles de Donkervoort presentan un planteamiento radical, basado en la reducción al mínimo de su masa para ofrecer un comportamiento propio de superdeportivo sin necesidad de contar con más de un puñado de cilindros en su propulsor. El Donkervoort F22 es la última manifestación del enfoque de esta compañía neerlandesa, y acaba de sorprender a todos —incluidos ellos mismos— con el dato de aceleración lateral que es capaz de soportar este modelo: 2,3 g.

Denis Donkervoort, el hijo del fundador de la compañía, ha sido quien ha revelado que esta cifra supera las expectativas que tenían en el seno de la marca: “en las especificaciones del modelo, situamos su aceleración lateral máxima en 2,15 g”. Aunque en la práctica se ha mejorado el rendimiento previsto, la cifra esperada ya era muy respetable, y superior a la que suponía hasta ahora el récord para los modelos del fabricante neerlandés —2,1 g—, establecido el predecesor de este nuevo modelo, el Donkervoort D8 GTO-JD70.

El carácter sorpresivo de este hito no solo tiene que ver con la obtención de un dato mejor que el esperado, sino también con que la única finalidad de las vueltas dadas a Zandvoort aquel día era la de grabar una serie de imágenes con motivo del primer aniversario de la presentación del Donkervoort F22. Tal y como podéis ver a continuación, fue el propio Denis Donkervoort quien se puso al volante de este automóvil radical durante la mencionada sesión.

Estábamos grabando un vídeo de celebración por el primer aniversario del F22, como agradecimiento a los participantes en su desarrollo, los clientes que agotaron tan rápidamente la tirada inicial y los aficionados que lo han bienvenido. Así, el récord ha sido una feliz sorpresa para nosotros. Ya sabíamos que podría llegar a 2,15 g, pero 2,3 g es toda una nueva referencia para los superdeportivos, toda una demostración de lo que el equipo ha logrado hasta ahora, y un impulso para nuestros desafíos futuros”, comentó Denis Donkervoort, director ejecutivo del fabricante, al respecto de este hito para el fabricante neerlandés

El nivel de aceleración lateral que soportaron los neumáticos Nankang con los que estaba equipada la unidad utilizada en el vídeo es casi cuatro veces la media de cualquier coche de calle. Al mismo tiempo, dobla prácticamente los datos ofrecidos por modelos cuyo carácter deportivo nadie pone en duda, como el McLaren Senna. No obstante, no alcanza los datos declarados por el McMurtry Spéirling, el famoso automóvil eléctrico provisto de un enorme ventilador para pegarlo al suelo, que puede generar hasta 3 g de aceleración lateral.

Una de las características de este Donkervoort F22 que le han permitido alcanzar estos 2,3 g de aceleración lateral es su reducidísimo peso, situado en solo 750 kg, gracias al empleo de fibra de carbono para la mayor parte de su estructura, tanto chasis como carrocería. Una muy buena distribución de pesos, posibilitada por la colocación de su propulsor en una posición casi central, aunque delante del habitáculo, también beneficia su comportamiento.

El motor que se encarga de mover este vehículo procede del Audi RS3, y se trata de un cinco cilindros de 2,5 litros de cubicaje, capaz de entregar hasta 500 CV. Datos como los de su aceleración hasta 100 km/h desde parado —2,5 segundos—, o hasta 200 km/h —cinco segundos más—, ponen de manifiesto que este Donkervoort F22 no tiene nada que envidiar a otros modelos con logos más rimbombantes. Ahora bien, el carácter más desconocido de este fabricante no es óbice para que el precio de cada uno de los 100 ejemplares que existirán se codee con los de aquellos: 280.000 euros. Su producción, que comenzó hace unos pocos meses, se prolongará hasta bien entrado el año 2025.

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Sobre mí

David García

No conozco sensación mejor que la de un volante en las manos. Disfruto también con ellas sobre el teclado, escribiendo ahora para vosotros algo parecido a aquello que yo buscaba en los quioscos cuando era un guaje.

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