El proyecto de resurrección de Alpine prometía grandes cosas, incluyendo algunos modelos que completarán la gama e hicieran más rentable su presencia en el mercado. Sin embargo, a día de hoy, tras algunos años en el mercado (se puso a la venta en 2018), la gama de Alpine sigue girando alrededor de un único modelo, el A110. Es cierto que se trata de un modelo rápido, divertido de conducir e incluso fácil de llevar rápido, pero los aficionados siempre han pedido más.

Las últimas noticias que sabemos de Alpine es que se hará cargo de la división deportiva de Renault y que su próximo automóvil, un deportivo eléctrico, se creará en colaboración con Lotus. Esperemos que esta unión de más frutos que la inicial con Caterham, pero por el momento poco sabemos al respecto. La marca está centrada en su entrada en la Fórmula 1, que en realidad es el mismo equipo Renault pero con nuevo nombre y colores, donde lo más importante es el regreso del bicampeón Fernando Alonso a la categoría.

Según Luca de Meo, Alpine se volverá más premium, más importante y más deportiva. Usando las propias palabras del ex CEO de SEAT, quieren convertir el sello francés en algo así como una “mini Ferrari”, con una gama de coches muy deportivos gracias al acuerdo con Lotus. De hecho también se incluye la participación en las 24 Horas de Le Mans con un chasis LMP1 de Signatech.

Un futuro prometedor, siempre que te gusten los coches deportivos, y así lo ven muchos aficionados, deseoso de ver como acaba todo este cambio de rumbo de la marca. Hay incluso quien se atreve a imaginar cómo podría ser la próxima criatura salida de los talleres de Alpine y, ciertamente, no nos importaría ver algo así hecho realidad, pues se trata de una creación digital de un diseñador externo a la marca. Concretamente, el responsable ha sido Arseny Kostromin, uno de los muchos diseñadores que pululan por la red de redes mostrando sus trabajos.

Internet ha abierto las puertas del mundo a muchas personas que, de otro modo, quizá nunca se dieran a conocer. Aquí estamos nosotros, por ejemplo, que gracias a Internet podemos hacer lo que más nos gusta, hablar de coches. A otros aficionados les gusta diseñar y hay infinidad de portales donde dan a conocer sus proyectos e ideas. En este caso, Kostromin no es un desconocido de las marcas, pues ha trabajado con marcas como Volkswagen, Koenigsegg (colaboró en el diseño del Gemera) o la propia Renault.

Kostromin se ha imaginado una versión de competición de un futurible Alpine A110, pero al que ha llamado Alpine GTA. Ya hubo un Alpine GTA aunque no era ni parecido a este, pues el “viejo” era más un Gran Turismo que un deportivo radical como este. Y eso sin contar la configuración “circuitera” que le ha otorgado el señor Arseny, que se acompaña de unas puertas de apertura en élitro, grandes entrada de aire, aletines aerodinámicos aquí y allá y un enorme alerón, que de ser un vehículo real trabajaría junto a un difusor trasero bastante comedido.

La verdad es que Kostromin no ha dejado nada al azar y hasta propone medidas, materiales y prestaciones, dejando claro cómo le gustaría que fuera su creación. No en balde, puede presumir de haber dejado su impronta en algunos modelos que se pueden ver por la calle o en el brutal Koenigsegg Gemera. Así, Kostromin afirma que las medidas serían 4.115 milímetros de largo, 1.826 milímetros de ancho y 1.100 milímetros de alto. Estaría articulado todo alrededor de un chasis monocasco realizado con fibra de carbono, material que también se emplearía para gran parte de la carrocería y del habitáculo, el cual está configurado para competición o casi.

El propulsor también estaría colocado en posición trasera central, siendo seis cilindros con cerca de 500 CV del que no se ha comentado nada más.