Que los SUV son los claros dominadores del mercado del automóvil es un hecho y si todavía no te has dado cuenta, es porque debes vivir en una cueva muy oscura y aislada del sector. Además, la electrificación ha encontrado un campo muy bien abonado donde echar raíces y asentarse definitivamente como una opción muy a tener en cuenta. Lo estamos viendo con los diferentes segmentos y sobre todo, con las últimas marcas que han llegado al mercado.
Por lo general, ser testigo del “nacimiento” de una marca de coches no es algo muy común. Durante los últimos 30 años hemos podido ver cómo resucitaban Abarth y Alpine, para después ver cómo se desgajaban CUPRA de SEAT y DS de Citroën. De hecho, estas dos marcas son un ejemplo clarísimo para mostrar el alcance que tiene el concepto SUV. CUPRA, por ejemplo, a excepción del CUPRA León, basa su gama de modelos en SUV (Ateca, Formentor y el futurible Tavascan), mientras que DS Automobiles ha reconducido su oferta hacia el segmento todocamino.
Centrándonos en DS, hemos visto como comenzó ofreciendo versiones más o menos logradas de modelos de Citroën (el más diferente y propio fue el DS 5), para después, romper con la firma de los chevrones y lanzar al mercado su primer modelo en solitario, el DS 7 Crossback. Un SUV que luce un diseño elegante y con mucha personalidad, combinado con muchísima tecnología y alguna innovación como su sistema de suspensión. Un modelo que apunta al segmento premium con detalles muy cuidados y sobre todo, con motorizaciones potentes y con hibridación enchufable.
Híbrido enchufable con 225 CV y tracción delantera
El tope de gama del DS 7 Crossback es la versión E-Tense 4×4, que con 300 CV y tracción a las cuatro ruedas, representa lo más potente que ha fabricado el grupo PSA hasta la fecha para las vías públicas. Potencia extraída del grupo propulsor híbrido enchufable y con etiqueta CERO de la DGT, que por precio y cliente objetivo no está al alcance de todo el mundo.
Se trata de un tema recurrente en los modelos de hibridación enchufable, que cuentan con buena cifra de potencia y buenas autonomías eléctricas, pero precios elevados. La ecología y la tecnología hay que pagarla, obviamente, pero eso impide que se popularice la hibridación y los modelos más económicos y enfocados a las masas, recurran más a las hibridación suave (que podría tener sus ventajas en el cubo de la basura tras el anuncio de una revisión de la etiquetas por la DGT).
DS quiere, sin dejar de apuntar al segmento premium, que más clientes conduzcan sus híbridos y lanza al mercado una versión más de su SUV “grande”, el DS 7 Crossback E-Tense 225. Como su nombre indica, rinde 225 CV empleando el mismo grupo propulsor híbrido enchufable del tope de gama, que también emplean modelos como el Opel Grandland X Hybrid 4 o el Peugeot 3008. Es decir, un grupo propulsor compuesto por un motor gasolina 1.6 PureTech con 180 CV y 300 Nm de par, asistido en este caso por un motor eléctrico que suma otros 110 CV (en la otra versión son dos motores eléctricos).
De esta forma, el Ds 7 Crossback E-Tense 225 solo cuenta con tracción delantera y no a las cuatro ruedas, aunque ofrece buenas prestaciones tanto en el apartado eléctrico como en el de combustión.
Hasta 72 kilómetros de autonomía eléctrica
Más allá de las prestaciones generales de un coche grande como el DS 7 Crossback, pero animado por 225 CV, el alcance en modo totalmente eléctrico se está convirtiendo en un fuerte argumento de venta. En el caso de nuestro protagonista dicha autonomía se encuentra entre los 55 y los 72 kilómetros según normativa WLTP y, obviamente, en función de la conducción que se realice y por donde. Además, en modo totalmente eléctrico puede alcanzar los 135 km/h. Las baterías son de iones de litio con 13,2 kWh.
Cuenta con varios modos de conducción, que permiten aprovechar al máximo las aptitudes del propulsor. Así, se puede seleccionar el modo Híbrido, el Sport y uno llamado E-Save. Modos cuyo funcionamiento ya se intuye por la denominación de cada uno de ellos, teniendo quizá que explicar un poco el último, que como otros modelos con hibridación enchufable, permite guardar la carga de batería para usar en otro momento y circular únicamente con el motor de combustión.
Los consumos homologados varían entre los 1,4 y los 1,6 litros cada 100 kilómetros en recorridos mixtos, aunque como nota interesante, PSA anuncia un consumo medio en “conducción real” de entre 6,1 y 6,5 litros cada 100 kilómetros. Cifras que se acercan más a la realidad y que siguen sin ser precisamente malas dadas las prestaciones del SUV francés. Respecto a los tiempos de carga, la marca promete un 100 % de las baterías en una hora y 45 minutos a través de un wallbox.
El equipamiento está en la línea de lo que se espera de un coche así, con la suspensión DS Active Scan Suspension, que funciona con una cámara colocada en el parabrisas, cuatro sensores y tres acelerómetros, que analizan el trazado que hay delante el coche y combinado con las condiciones de circulación (velocidad, ángulo de giro de volante, uso del pedal del freno…) regula los tarados de suspensión para adaptarse a las condiciones. Además, la combinación de asistentes de conducción le permiten anunciar un nivel 2 de conducción autónoma.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".¿Se sabe para cuando está prevista su comercialización?
Buenas Reverfons. La marca aún no ha facilitado fecha de comercialización en nuestro país, pero en cuanto la sepamos te lo comentaremos.