Lexus es una marca muy joven, aunque no lo parezca. Nació en 1989 como división de lujo de Toyota, con una denominación que son las iniciales de “Luxury Export United States”, demostrando a propios y extraños que eran capaces de conseguir coches de una calidad sorprendentemente alta con el Lexus LS 400, primer coche en pisar suelo europeo allá por 1990 -a España llegó en 1993-. Hoy día, los coches de Lexus suponen una opción muy a tener en cuenta frente a los típicos alemanes de carácter Premium, pero cuando desembarcó en Europa se les analizó con lupa en cada detalle.

El primer Lexus IS se vendía en Japón como Toyota Altezza y solo se ofrecía en nuestro mercado con un bloque 2.0 de 155 CV (IS 200). Pronto cautivó a muchos conductores gracias a un tacto de “buen coche”, a un diseño hasta cierto punto atrevido (la instrumentación inspirada en un reloj-cronómetro de pulsera fue muy aplaudida), aderezado con una buena calidad de construcción.

La decisión de introducirse en Europa con este coche fue determinante para el devenir de la marca, ya que en nuestro mercado funcionan mejor los sedanes de tamaño medio que los grandes ejecutivos y de representación (segmentos E y F). Para aumentar su competitividad, la segunda generación del IS se comercializó con motor diésel por vez primera, el IS 220d de 177 CV, posteriormente recortado a 150 CV, IS 200d. El resto de la gama fue de gasolina “pura” o híbridos.

Lexus IS 200 (XE10)

Lexus IS 220d (XE20)

Lexus fue el primer fabricante Premium en introducir en su gama versiones híbridas

Todo iba muy bien para el coche y para la marca, siendo uno de los primeros en adoptar la hibridación dando la espalda a la tecnología diésel. La tercera generación del IS (XE30) ya no tuvo motor de gasóleo y adoptó la hibridación de sus hermanos mayores en 2013. De hecho, allá por 2016 y 2017, el 90 % de las ventas del Lexus IS correspondían a la variante híbrida. Brevemente se comercializó una versión 2.0 Turbo de 240 CV (IS 200t).

Llegó a contar con una versión V8 de más 423 CV (el Lexus IS F de la segunda generación), aportó grandes ganancias a la marca, pero ha sido uno de los primeros en caer ante la aplastante popularidad de los SUV. Es más, sus “hermanos” de gama de formato todocamino han sido los que han acabado con este modelo porque, aunque se acaba de presentar el restyling de la actual generación, el Lexus IS deja de estar disponible en Europa.

Más músculo, más carácter, pero pocos cambios reales

Lexus ha ido adoptando una línea de diseño que ha terminado por ser una de las más espectaculares del mercado. Tiene fuerza, tiene carácter y resulta especialmente llamativa entre el resto del tráfico, sobre todo las versiones norteamericanas, que no tienen matrícula delantera. El nuevo Lexus IS da un paso más en ese camino y presenta un diseño que sin ofrecer un cambio rotundo, si presenta una imagen potente.

La enorme calandra se hace todavía más grande y domina no solo el frontal, sino todo lo que viene detrás al influir en las formas del paragolpes, de las aletas delanteras y del capó. Los faros son nuevos y ahora incorporan las luces diurnas LED en su estructura interna otorgando al modelo una mirada agresiva y claramente de pocos amigos.

Un frontal que se ve rematado por una zaga totalmente nueva, con unos pilotos que se fusionan en el centro de la trasera, bajo el logo de la marca y que se apuntan así a las nuevas tendencias que imperan en cuanto a diseño. La parte superior de esta zona, la correspondiente a la luneta y la tapa del maletero, se eleva claramente respecto al resto dando un volumen adicional a esta parte del coche que no tenía la edición anterior del modelo.

Visto de perfil no parece cambiar en exceso, hasta que pones una versión al lado de otra. La revisada edición que ahora nos dan a conocer, da la impresión de ser algo más larga y baja, una sensación que se refrendada por los datos oficiales, pues el restyling crece 30 milímetros en longitud hasta los 4,71 metros. Sin embargo, la altura del nuevo Lexus IS es cinco milímetros mayor, que se camufla gracias a que también crece en anchura 40 milímetros (hasta 1,84 metros). No se modifica la distancia entre ejes, que sigue siendo la misma, 2,8 metros. Los paneles de las puertas son nuevos, así como las llantas BBS de 18 pulgadas de la versión de las fotos oficiales, el Lexus IS F Sport.

La plataforma sobre la que se articula el modelo es exactamente la misma y el grupo propulsor híbrido, el único que se vendía en España, sigue siendo el mismo de 223 CV. En Estados Unidos suma más opciones a su catálogo de motores, como un interesante 2.0 Turbo de 244 CV y 349 Nm de par, más un 3.5 V6 de aspiración natural con dos niveles de potencia: 265 y 315 CV (320 y 379 Nm de par). Sí cambia la suspensión, al recibir nuevos tarados más rígidos y unos trapecios de aluminio un 18 % más ligeros que los usados hasta el momento fabricados con acero.

Mismo habitáculo pero más equipamiento y conectividad

Cuando hablamos de restyling, los cambios no suelen ser muy marcados, básicamente los justos para mantener el modelo vigente durante unos años más. En el caso del Lexus IS esto se multiplica, ya que se trata de un coche que se ha visto muy afectado por las ventas de los SUV de la propia Lexus y para que sea rentable su continuidad en el mercado, no debe ser necesaria demasiada inversión. Así, por tanto, el habitáculo apenas cambia en sus formas aunque si aumenta su equipamiento y su conectividad.

La actualización de este sedán de propulsión japonés recibe Android Auto, Apple CarPlay y Alexa de Amazon. También estrena nueva pantalla de 10 pulgadas, mientras que la de serie tiene 8 pulgadas y se encuentra 76 milímetros más cerca del conductor. Se puede montar un equipo de audio Mark Levinson con 17 altavoces y adopta de serie el sistema “Lexus Safety System +”, que aglutina una nueva cámara de vídeo con detección de peatones y ciclistas, alerta de tráfico trasero, sistema de mantenimiento de carril, reconocimiento de señales o frenada de emergencia automática.

El nuevo Lexus IS no llegará a Europa aunque representa una de las mejores y más interesantes opciones frente a la tríada alemana. Los SUV son los coches de moda y no hay hueco para un “vulgar” sedán.

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