El Peugeot 605 fue el sustituto del 604 y de las versiones de alta gama del 505, nos encontramos ante un claro ejemplo de un fabricante generalista empeñado en construir una berlina media de nivel casi premium con una muy buena amplitud interior y un maletero generoso. Las ventas de su antecesor fueron muy discretas y se consideraron un fracaso, por lo que tenían la necesidad de fabricar una berlina lujosa, sólida y fiable. Llegó en 1989.
Fue diseñado por Pininfarina y existió en una única carrocería, un sedán de cuatro puertas. Su diseño era elegante y bastante discreto si lo comparábamos con sus antecesores. Entre sus rivales encontrábamos a los Alfa Romeo 164 y Alfa Romeo 166, Opel Omega, Ford Scorpio, Lancia Thema o los Renault 25 y Renault Safrane.
En su deseo de ofrecer la mayor amplitud interior posible optó por una mecánica de disposición delantera transversal, y unas suspensiones independientes a las cuatro ruedas, aprovechando la plataforma de su primo, el Citroën XM.
Confortable, espacioso, silencioso, rápido. Son cuatro características que definían al 605
Su diseño mostraba fluidez de líneas, elegancia y equilibrio, con un tamaño y proporciones perfectas para presentar un diseño redondeado sin necesidad de aristas ni líneas angulosas; su coeficiente Cx era de 0,30, un valor muy bueno para una berlina de su tiempo.
El asiento del conductor contaba con todo tipo de regulaciones, con buena sujeción lateral, un pedalier bien centrado respecto al conductor y se adaptaba a cualquier conductor independientemente de su altura. El panel de instrumentos y mandos de la consola estaban situados a mano, y con caracteres grandes para su fácil lectura. La visibilidad desde el puesto del conductor era inmejorable en el entorno de 180o, en los ¾ traseros era suficiente y la trasera bastante buena, complementada por unos buenos retrovisores.
Los pasajeros traseros disponían de espacio de sobra, como ejemplo se podían cruzar las piernas sin mayor problema y sin rozar el respaldo de los asientos delanteros. Solo tenía una pequeña pega, el gran tamaño del túnel central, que no permitía ir con comodidad al pasajero central; mejor dos pasajeros. El maletero cubicaba 497 litros, suficientes para cuatro personas.
En el caso concreto del SV, su motor era un 3 litros (2.975 cc) con solo 12 válvulas, por lo que rendía 167 CV a 5.600 RPM, y su par motor era de 235 Nm a 4.600 RPM. Existieron unas versiones más potenciadas a partir de 1994, gracias a la adopción de las 24 válvulas (190 y 200 CV). Su caja de cambios manual de cinco marchas contaba con con unas relaciones adecuadas, sin existir puntos muertos entre ellas gracias a una buena curva de potencia del motor, con una palanca de recorridos cortos, precisa, silenciosa y fluida con lo que conseguía unas buenas prestaciones a pesar de estar lastrado por su elevado peso -superaba los 1.400kg-.
La potencia transmitida a las ruedas no ponía en aprietos a la adherencia y a la tracción, sin extrañas vibraciones que se sintiesen en la dirección –con asistencia progresiva, siendo rápida y segura-, por lo cual no era necesario el control de tracción. Aunque no disponía de ABS de serie, los cuatro discos que llevaba cumplían bien su tarea con gran resistencia a uso intensivo sin mostrar síntomas de fading, con unas distancias de frenado de poco más de 63 metros a 120 km/h.
El 0 a 100 km/h lo realizaba en algo menos de 10 segundos, cubriendo los 1.000 metros desde salida parada en casi 31 segundos, y las recuperaciones algo más discretas: de 80 a 120 km/h en 4ª necesitaba casi 12 segundos, y casi 17 segundos para los mismos registros en 5ª. Su velocidad máxima rozaba los 220 km /h, una buena cifra. No olvidemos que estábamos evaluando una berlina de lujo sin pretensiones deportivas.
Sus consumos en ciudad rondaban casi los 13 l/100 km, y en autopista a 120 km/h bajaban a 10 l/100 km. No era un consumo frugal precisamente, pero con un depósito de 80 litros se podían hacer muchos kilómetros sin repostar. Su confort acústico, como hemos comentado, era muy bueno; a 140 km/h su valor era de 68,2 dB solamente.
Su sucesor fue el Peugeot 607, allá por 1999, siendo el primero en adoptar el nº 7 en su identificación de modelo.
Ginés de los Reyes
Desde que tengo conciencia me llamó la atención cualquier cosa con ruedas. Aprendí a montar en bicicleta al mismo tiempo que a andar, y creo que la genética tiene algo que ver: mi padre adoraba los coches, les ponía nombres, mi abuelo conducía y participaba en el diseño de camiones, y le privaban los coches...El motor de 24V no fue a partir del 94, viene de antes. Hubo dos motores V6 en el fase 1, motores PRV de 12 y 24V y con designaciones SV3.0 y SV24 respectivamente. El “fase 2” mantuvo los motores PRV hasta que los últimos modelos ya montaban motor XFZ que compartían con el 406 coupé.
Con un supuesto motor v12, una docena de AIRBAGS, fue uno de los protagonistas en la película taxi, por mi zona veo muy pocos, pero los que continúan en activo están bastante bien conservados, lo recuerdo también como taxi en mi pueblo, lastima que no tuviera un final digno y el que fue su sucesor, no estaba ni mucho menos a su altura
Taxi? No era un 406?
Era un 406 V6
El 605 era el coche en el que paseaban al ministro de defensa japonés en la segunda peli hasta que lo secuestraban