En lo personal no hay nada que me guste más, dentro de la automoción, que esa mezcla neoclásica entre lo vintage y lo moderno, algo que el exuberante IsoRivolta GTZ by Zagato representa a la perfección. Hace honor de cuáles son las raíces donde el afamado carrocero milanés se ha inspirado, para recrear esta obra de arte contemporáneo en forma de automóvil destinado a unos pocos afortunados.

Para quien no conozca la marca, esta tiene sus orígenes a finales de la década de los años 30, cuando por aquel entonces su fundador, Renzo Rivolta, se dedicaba en exclusiva a la fabricación de calentadores de agua. Luego llegó la fabricación de motocicletas tras la Segunda Guerra Mundial, y más tarde a comienzos de los 50 darían vida al que sería su primer automóvil, el icónico Isetta, que más tarde fabricaría BMW bajo licencia.

Pero la ambición de su fundador seguía creciendo, y con ella el entusiasmo por fabricar automóviles de corte deportivo dedicados tanto a la competición como a clientes exigentes que desearan hacerse con una máquina especial y diferente a lo establecido. Así que para 1957 nace Iso Rivolta, y con ella llegarían en unión a los diseñadores más punteros del momento (Bizzarrini, Bertone o Gandini) el Iso IR 300 y posteriormente el Iso Grifo.

El nuevo IsoRivolta GTZ by Zagato representa de manera impecable aquella filosofía que intentó establecer en sus automóviles el fundador de la marca a finales de los 50

Pero de entre todos aquellos automóviles, y por encima de cualquier otro, destacó el Bizzarrini Iso Grifo A3/C destinado a la competición, y que a la postre logró la victoria en las 24 horas de Le Mans de 1965 en la categoría hasta los 5.000 cc. Únicamente se construyeron un total de 22 unidades bajo el escudeto de Iso, y otros tantos tras la ruptura de la marca con Bizzarrini, que empleó aquella plataforma en sus 5300 GT.

Años después, y tras su separación de Bizzarrini, la marca terminó incluso compitiendo en el mundial de Fórmula 1, con un equipo patrocinado por Marlboro. La realidad es que tras aquella experiencia a nivel deportivo, la crisis creciente del momento e incluso un cambio de nombre de la compañía, Iso cerraba definitivamente sus puertas por problemas financieros en diciembre de 1974, tras haber construido previamente un total de 10.000 motos de nieve bajo su filial Iso.

41 años tuvieron que transcurrir hasta que atelier Zagato promoviera el recuperar a la marca de su largo letargo inicialmente en forma de prototipo, con el que darían vida a uno de los nuevos automóviles pertenecientes al videojuego “Gran Turismo” de la compañía Sony. El concept car fue presentado en el Stand de la marca de videojuegos dentro del marco del Salón de Tokio, en octubre de 2017.

Más de cuatro décadas después, y por medio del carrocero italiano Zagato, la marca vuelve por sus fueros al mundo de la automoción, inicialmente en forma de prototipo y en última instancia con el IsoRivolta GTZ by Zagato

Tal fue el revuelo de aquel acto y la recreación de aquel primer prototipo, que la propia familia Iso, aún propietaria de los derechos de la marca, decidió recrear un nuevo modelo denominado IsoRivolta GTZ by Zagato siguiendo la misma fórmula que antaño y que también emplearon otros como el propio Bizzarrini o Monteverdi.

En otras palabras, una carrocería concebida en Italia por los gurús del diseño mundial de la automoción y un propulsor de origen yankee, volviendo nuevamente a los orígenes de la marca y su manera de fabricar automóviles. Para ello recurrieron a los servicios de GM y en especial a propulsor instalado en los Chevrolet Corvette Z06.

El V8 a 90º, posicionado en el vano motor delantero de manera longitudinal, desprende una cilindrada final de 6,2 litros, con dos válvulas por cilindro, culata en aluminio forjado y alimentado por un sistema de inyección electrónica, todo ello con el apoyo de un compresor volumétrico que lleva la potencia final hasta los 650 CV a 6.400 RPM y un par máximo de 881 Nm a 3.600 RPM.

Una caja de cambios manual de siete velocidades es la encargada de mandar toda la caballería al eje posterior, logrando catapultar al GTZ hasta los 315 km/h, empleando 3,7 segundos en alcanzar los 100 km/h desde parado.

Pero si su corazón nos deleita con unas cifras astronómicas, su silueta nos deja boquiabiertos fruto de un diseño atemporal y único, que pasará a los anales de la historia de la automoción como uno de los mejores trabajos en los que Zagato ha estado involucrado.

Con unas líneas suaves, emulando aquellas formas de los 60 que sentaron las bases para automóviles tan especiales como el Lamborghini Miura, el IsoRivolta GTZ monta una carrocería fabricada por completo en fibra de carbono, buscando el ahorro de peso y la rigidez estructural, donde destacan la toma de aire tanto en capó, como aletas delanteras y traseras, así como en la parte superior del paragolpes posterior.

Un bloque 6.2 V8, heredado del Corvette Z06, es el encargado de hacer volar al IsoRivolta GTZ by Zagato, siguiendo la fórmula que antaño emplearon los deportivos de la marca, potencia americana y silueta italiana

El chasis, heredado del Corvette Stingray (C7), sigue la tecnología Space Frame, empleando el aluminio en su fabricación. Todo ello apoyado sobre un equipo de suspensiones que, como podemos imaginar, están a otro nivel en cuanto a comportamiento y sofisticación, siendo de tipo independiente y doble triángulo en ambos ejes.

Un equipo de frenado compuesto por discos perforados y ventilados, ayudados por un sistema ABS de última generación y embutidos en unas llantas de 20 pulgadas de diseño propio, cierran este apartado en el GTZ.

En su interior, el empleo de materiales como el cuero, tanto en su salpicadero como en los asientos backet o el haber elegido el salpicadero, volante y cuadro de instrumentos analógico del Corvette, con el cuentavueltas presidiendo el centro de este, nos hacen percibir como Zagato ha confiado en materiales y tecnologías que antaño formaron también parte de sus deportivos.

Otros detalles, como la “Z” de Zagato bordada en los cabezales de los asientos, terminan de dar ese aire racing y refinado al mismo tiempo que sus nuevos propietarios podrán disfrutar dentro de esta maravilla automovilística.

En junio del año pasado se estrenó definitivamente el modelo mediante el Concours Virtual 2020, una exposición en la que se podía acceder -no había otra forma- vía online, hecho que nunca había ocurrido en un evento de este tipo.

Aprovechando aquel show automovilístico, se entregó el primero de los IsoRivolta GTZ by Zagato en un espectacular tono Monza Green -se ofrece hasta en nueve tonalidades distintas-, siendo a partir de octubre del mismo año el momento en que se daría forma a las 18 unidades restantes, estando nueve de ellas ya reservadas si incluimos la entregada inicialmente, ¿te animas a hacerte con una?