Coche del día: Lancia Zeta

Coche del día: Lancia Zeta

Fue una de las cuatro variantes surgidas de la base común de la Eurovan creada por PSA y FIAT


Tiempo de lectura: 4 min.

Decir que el Lancia Zeta es un modelo que se parece a otros monovolúmenes del momento no deja de ser una obviedad. Al fin y al cabo, ésta fue una de las dos apuestas del Grupo FIAT dentro de la “ joint venture “ Eurovan junto a PSA. La otra fue el FIAT Ulysse, complementada con el Peugeot 806 y el Citroën Evasion. Así las cosas, se repetía la fórmula de éxito ya probada en el mundo de las furgonetas, ofertando sobre un diseño base diversas opciones adaptadas según matices y detalles propios de cada marca. Algo que fue especialmente notorio en el caso de Lancia, ya que sin duda es, de entre las cuatro, la que cuenta con un pasado más plagado de referentes exclusivos aún habiendo sido absorbida por la generalista FIAT en 1969.

Una operación que fue su salvación ya que, al fin y al cabo a mediados de los años sesenta sus cuentas estaban tan poco saneadas que casi cayó en manos de la Ford. Empresa que, por aquellos años, iba a la búsqueda de marcas italianas prestigiosas con las que decorar su panoplia mercantil. De hecho, tanto la absorción de Lancia como la de la mismísima Ferrari por parte de FIAT sólo se entiende por el mandato que el gobierno italiano le dio a la empresa de los Agnelli, apresurándola a proteger estos dos emblemas bajo su manto financiero antes de que cayeran en manos americanas.

Una pugna comercial de la que Ford sólo consiguió llevarse para sí la propiedad del histórico carrocero Ghia. No obstante, historias empresariales aparte, lo cierto es que desde los tiempos previos a la Segunda Guerra Mundial Lancia se caracterizó por un estilo exquisito y refinado en muchos de sus modelos turismo. Incluso en los más pequeños, como el Aprilia. Un compacto de los años treinta que, no por ser de gama relativamente popular, dejó de contar con los avances en ingeniería y acabados que tan bien han caracterizado a Lancia durante décadas. Por ello, aunque el Lancia Zeta comparte base con el Ulysse, el 806 y el Evasion cuenta con ciertos detalles capaces de presentarlo como el monovolumen más atractivo de aquella “ joint venture “.

lancia zeta (2)

Las ” joint venture ” se hicieron frecuentes en el mundo del motor especialmente gracias a empresas francesas, las cuales colaboraban entre sí pero también con iniciativas de otros países

Lancia Zeta, fruto de la unión de empresas

Lejos de ponerse todo tipo de trabas entre ellas, las grandes empresas automovilísticas muchas veces han actuado de forma conjunta para cubrir determinados nichos de mercado. Así las cosas, en 1968 incluso Renault y Citroën colaboraron en la creación de un prototipo de berlina con el afán de hacerle frente a las creaciones de BMW y Mercedes. Algo que no prosperó, cierto, aunque al tiempo fue asentando, al menos en Francia, un cierto clima de colaboración entre empresas con el objetivo de crear modelos de forma conjunta.

De hecho, tanto arraigo tuvo aquello en Francia que a esta práctica comercial se la conoce como “ joint venture “ . Coordinando esfuerzos y repartiendo dividendos con el objetivo final de ofrecer un mismo modelo bajo diferentes denominaciones comerciales. Justo la definición de lo que quiso hacer – e hizo – en el mundo de los monovolúmenes Sevel Nord. La estrategia de FIAT y PSA para la fabricación de vehículos industriales de tamaño medio y monovolúmenes en la factoría de Valenciennes, al norte de Francia.

Legados a este punto, la primera serie de las Eurovan – base de los cuatro modelos antes citados – se presentó en 1994, dando batalla al Renault Espace y su tradicional dominio pionero en su segmento cuando hablamos de Europa. Como opciones gasolina en aquel 1994 – la oferta se amplió posteriormente – nos encontramos con bloques de cuatro cilindros en línea y ocho válvulas con dos litros. Uno de 121 CV y otro de 147 CV gracias a la acción en este segundo de un turbocompresor. En lo referido a las mecánicas diésel, se ofertó con una al año de estrenarse las de gasolina. Su potencia era de unos más escuetos 90 CV.

lancia zeta (1)

Tan sólo unos toques le daba personalidad propia, pero en ellos se condensaba muy bien parte de la tradición de marca establecida por Lancia

Ahora, ¿en qué se diferenciaban cada una de las opciones desarrolladas con la Eurovan como base? Pues en terminaciones y apartado estético, donde la Lancia Zeta fue la más llamativa o, al menos, la más elegante gracias a ciertos detalles cromados combinados con algunos elementos capaces de marcar la diferencia en la medida de lo posible. Si nos vamos a una comparación con su pariente en la gama FIAT, la Lancia Zeta se podría considerar una especie de versión premium. Ni más ni menos que lo que ya se había hecho con el Lancia Y, sin duda el más elegante de los escuetos urbanos del segmento A. Una manera de hacer las cosas que, parece ser, va a tener continuación en el próximo resurgir eléctrico de la marca. Veremos qué ocurre.

COMPARTE
Sobre mí

Miguel Sánchez

Todo vehículo tiene al menos dos vidas. Así, normalmente pensamos en aquella donde disfrutamos de sus cualidades. Aquella en la que nos hace felices o nos sirve fielmente para un simple propósito práctico. Sin embargo, antes ha habido toda una fase de diseño en la que la ingeniería y la planificación financiera se han conjugado para hacerlo posible. Como redactor, es ésta la fase que analizo. Porque sólo podemos disfrutar completamente de algo comprendiendo de dónde proviene.

COMENTARIOS

avatar
2000
 
smilegrinwinkmrgreenneutraltwistedarrowshockunamusedcooleviloopsrazzrollcryeeklolmadsadexclamationquestionideahmmbegwhewchucklesillyenvyshutmouth
Foto
 
 
 
  Suscribir  
Notificar de


NUESTRO EQUIPO

Pablo Mayo

Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches desde que era un chaval. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Ahora embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.

Javi Martín

Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".

Ángel Arias

La historia del automóvil está llena de grandes emprendedores, de ideas arriesgadas, curiosas casualidades, irreconciliables enemistades y muchos fracasos. Es un mundo intenso y fascinante del que muchos hemos quedado cautivados. Cualquier vehículo con un motor me parece interesante, ya sean motocicletas, automóviles, camiones, aviones o barcos; es estupendo sentir la brisa del viento en la cara sobre uno de ellos. Si estáis aquí es porque compartimos afición.

Alejandro Delgado

Jesus Alonso

Javier Gutierrez

Mauro Blanco