A finales de año llegará al mercado español otro SUV, esta vez con el escudo SEAT, y con grandes similitudes genéticas con el Skoda Kodiaq (de hecho, compartirán cadena de montaje). Cuatro nombres eran finalistas para bautizarlo: SEAT Tarraco, Ávila, Aranda y Alborán. Al calor de los eventos desencadenados el 1-O a consecuencia del prusés, la compañía prefirió dejar correr el aire y demorar la elección del nombre.

Ahora, que la cosa parece un poco más calmada en Cataluña, SEAT desvela por fin que Tarraco fue el nombre más votado por los 146.124 participantes que tomaron parte en la última ronda. El nombre latino de Tarragona se llevó el 35,52% de los votos, seguidos por la capital abulense (28,74%), Aranda (26,91%) y Alborán (8,83%). SEAT continúa la tradición de usar topónimos españoles, costumbre que se saltó con el Exeo y el Mii.

Tarraco se ha impuesto a los 10.130 topónimos que fueron propuestos, entre los cuales caben los más de 8.000 municipios que tejen la geografía española. Curiosamente, en la primera ronda participó menos gente, 133.332 personas, pero repartidas en 106 países. Sí que hay españoles por el mundo, sí.

En lo puramente automovilístico, este SUV de hasta siete plazas medirá en torno a los 4,7 metros de largo, con motorizaciones de 125 a 190 CV, posibilidad de transmisión automática DSG y tracción total mediante multiembragues Haldex. No está en el segmento más jugoso del mercado, pero seguramente se venderá mucho mejor que el Exeo, en su momento el coche más prestigioso que salió con el escudo de la “S”.

SEAT anuncia que el Tarraco “culmina la ofensiva SUV”, por lo que en principio no habrá más modelos de este tipo a menos que los jefes de Alemania decidan que hay algún segmento por cubrir. Por debajo quedan el Ateca y el Arona.