En los últimos años la gestión de SEAT por parte de Volkswagen ha ido de perlas: la facturación ha aumentado un tercio en el último lustro. Es una marca rentable, 294 millones de euros después de impuestos en 2018, un 4,6 % más que en 2017. Ahora que el futuro de SEAT ya no es una duda para los gestores germanos, se anuncian interesantes planes de futuro tras presentar los resultados del 2018. Han sido los mejores en “todos los registros”.

Para empezar, SEAT lanzará de aquí a 2021 seis modelos electrificados. Dos serán totalmente eléctricos, SEAT Mii y el-Born, este último presentado en Ginebra como prototipo. Esta vez ya no hablamos de prototipos ni de experimentos por lo bajinis, se los podrá comprar quien quiera -y pueda-. Además, habrá versiones híbridas enchufables de SEAT León, Tarraco, Cupra León y Cupra Formentor. Este último también lo hemos conocido como prototipo en Ginebra y se fabricará en Martorell.

SEAT entregó 517.600 coches a nivel mundial, el mejor resultado desde que la compañía empezase a fabricar Fiat bajo licencia en la España del franquismo

La fábrica española ya está produciendo a tope, con el 95 % de su capacidad comprometida, pero el Formentor no será precisamente un coche de elevado volumen. Ahora Martorell fabrica los SEAT Ibiza, Arona y León, además del Audi A1, unas 2.300 unidades al día. El resto de modelos de la marca se fabrican en Portugal (Alhambra), República Checa (Ateca, Toledo), Eslovaquia (Mii) y Alemania (Tarraco).

La gama SUV es la directamente responsable de que SEAT haya superado las cifras de los mejores tiempos, a principios de los 2000. La paga extra de 1.068 euros para los empleados no es tan jugosa como la de Porsche, pero es un 49,2 % más alta que la del año pasado. Dará para tapar algunos agujeros y alguna alegría.

SEAT Altea XL Electric Ecomotive Concept (2011)

SEAT León TwinDrive Ecomotive Prototype (2011)

Curiosamente, en 2021 habrán pasado 10 años desde que SEAT presentase a la prensa sus prototipos de motorización eléctrica. Por un lado estaba el Altea XL eléctrico, con una potencia de 115 CV (85 kW), 270 Nm de par máximo, 135 km/h de velocidad punta y una autonomía de 135 km (NEDC). Además, el León híbrido enchufable podía recorrer 52 km sin emisiones y alcanzar 120 km/h. Para lo demás, un motor TSI le ayudaba, pudiendo llegar a 170 km/h.

Hay otro precedente aún más antiguo, el Toledo Eléctrico que siguió a la antorcha olímpica para Barcelona ’92

Una pequeña flota de estos prototipos fue empleada para labores de evaluación en sitios tan dispares como la propia SEAT, el Ayuntamiento de Barcelona, Puerto de Barcelona o Endesa. En este sentido SEAT ha hecho lo mismo que marcas como Volkswagen, Renault, MINI, BMW o Toyota, que antes de plantearse la comercialización de eléctricos los ha estado probando para ver su viabilidad y recogiendo opiniones de los conductores invitados.

Pero esta vez no hay dudas de la viabilidad de SEAT, ni de que vaya a haber demanda de vehículos eléctricos, ni de que la tecnología esté lista para dar al cliente lo que quiere. Volkswagen lo está dando todo para hacer coches eléctricos de gran tamaño (Audi y Porsche), medianos (Volkswagen) y SEAT se encargará de los económicos. Unos 300 ingenieros “altamente cualificados” trabajarán desde España para dar al Grupo una plataforma de coches de unos 4 metros -Ibiza, Polo, Fabia- que ponga los precios por debajo de 20.000 euros. Así lo comenta el “jefazo”, Luca de Meo:

Pero antes de reventar a aplaudir, entremos en matices. El CEO de Volkswagen, Herbert Diess, dijo lo siguiente: “SEAT hará realidad el primer coche eléctrico especialmente diseñado para trayectos urbanos”. Ahí dejan caer que no será un coche de autonomías de más de 300 kilómetros. En un coche de vocación urbana y económica eso es absurdo, por el espacio y peso que implican las baterías, y por el coste. Por lo tanto, apuesto a que serán modelos con capacidades similares a un coche como el Renault ZOE (baterías de 41 kWh, unos 300 km WLTP) o inferiores.

El año pasado SEAT invirtió 1.223 millones de euros para investigación y desarrollo (+27,1 %)

España va a seguir siendo para Volkswagen un sitio para fabricación de vehículos de gama media y económica, ya que muy seguramente los sucesores del Polo y el Ibiza, ya con su versión eléctrica, se sigan haciendo aquí. El Fabia, salvo sorpresa mayor, seguirá en manos checas. Los modelos de mayor margen comercial seguirán, probablemente, cerca de Alemania. Eso sí, la marca Cupra ayudará a subir la facturación gracias al inflado de precios que implica su posicionamiento comercial tirando a Premium y deportivo.

SEAT también seguirá trabajando en otras áreas como negocios digitales y servicios añadidos, tendrá a ingenieros de software picando teclas en el Metropolis:Lab de Barcelona y colaborando con empresas independientes como XMOBA. También habrá apuestas por vehículos eléctricos de movilidad personal, recordemos el prototipo de cuadricilo eléctrico Minimó (rival del Renault Twizy) o el patinete eléctrico eXS. No me miréis raro, el futuro del automóvil va en esa dirección, no la de inflarse a vender Leones FR TDI’s.

SEAT El-Born

Sin duda son muy buenas noticias para SEAT, y que haya una apuesta tan decidida por la marca viene a significar que desde Alemania tienen menos miedo de que la situación política en Cataluña, donde está Martorell, empeore más. Si no nos falla la memoria, recordaremos que la presentación del ¡nombre! del Tarraco se dilató varios meses por el “procés” y el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017. Faltó un pelo para que la sede social de SEAT se trasladase a Madrid, pero llegó la intervención del Estado con el archifamoso artículo 155 y las aguas se tranquilizaron un poco.

No en vano, SEAT es el mayor exportador industrial de España (el 3 % del total)

Contrastemos esta situación con la del Reino Unido, que con la movida autodestructiva del “Brexit” ya ha conseguido espantar a Honda, que cerrará su primera fábrica desde la Segunda Guerra Mundial, inversiones congeladas por doquier y la industria del automóvil británica en su peor situación desde que la BMC se fuese a hacer puñetas del todo y todos los grandes fabricantes se los quedasen los americanos, alemanes, chinos o japoneses.

El dinero, sobre todo en grandes cantidades, huye de los follones. Si Volkswagen AG hubiese pensado que la situación en España sería muy mala en un futuro inmediato, igual la fábrica de Argelia se llevaría más carga de trabajo, o se montaría otro megacentro en un país “del Este” cercano a Alemania donde los políticos no dan dolores de cabeza. El comunicado de prensa de SEAT está lleno de lecturas entre líneas para aquellos que sepan verlas.

Por último, y no por ello menos importante, novedades para Latinoamérica. En el segundo semestre de 2019 SEAT llegará a Chile y reforzará su presencia en Colombia. En cuanto a China, la joint-venture con JAC aún no está comercialmente activa, pero lo estará pronto, y cuando eso suceda, SEAT machacará estos resultados con otros aún mejores.