La cuarta generación del SEAT León hizo su debut a finales del mes de febrero. Poco después, conocimos a su versión más prestacional presentada por CUPRA. Y ahora, después de conocer prácticamente todos los detalles, os damos a conocer una de las versiones más equilibradas de la gama, el SEAT León TGI, movido tanto por gasolina como por gas natural comprimido (GNC).
Sustituyendo al anterior León y uniéndose a los modelos subcompactos de la casa (Arona e Ibiza), la oferta de GNC del fabricante de Martorell está motivada por sus ventas cada vez más elevadas, destinada a aquellos que buscan un coche de motor de combustión interna tradicional extremadamente eficiente sin tener que optar por una versión electrificada, por norma general más cara. Y claro está, tampoco encontramos las pegas de un coche eléctrico y sus recargas.
Bajo el capó del nuevo SEAT León TGI nos encontramos con un bloque tetracilíndrico de 1,5 litros con 130 CV y 200 Nm. No se han declarado prestaciones, pero un peso sensiblemente inferior al de su predecesor le debería de otorgar unas cifras de aceleración y de consumo sensiblemente mejores, a pesar de que comparte el mismo tren motriz. El modelo de 2019 podía cubrir el 0 a 100 km/h en 10,1 segundos y marcar un consumo medio homologado (NEDC) de 3,7 kg/100 km.
Quizá, la única desventaja que aporta la versión de GNC del SEAT León (y casi de cualquier coche) es la disminución de un sustancial espacio en el maletero. El anterior León TGI perdía 105 litros
En el interior del renovado León TGI hay un total de tres depósitos de GNC con una capacidad neta total de 17,3 kilos. De acuerdo con la marca, dispondrá de una autonomía de hasta 440 kilómetros. Cuando las reservas de gas se quedan a cero, el motor pasa automáticamente a funcionar con el depósito auxiliar de gasolina, de 9 litros de capacidad. No se menciona, pero es probable que el maletero haya pasado de 380 a 275 litros, como el del anterior modelo.
El nuevo León TGI es el primer vehículo de la gama de GNC de la marca que incluye el cuadro de mandos Digital Cockpit, en este caso con pantallas que muestran el funcionamiento del sistema híbrido de gas natural y gasolina de una forma más clara. Además, cuenta con el selector de modos de conducción (SEAT Drive Profile) que permite adaptarse a las necesidades de cada momento. En total, hay cuatro modos disponibles: Eco, Normal, Sport e Individual.
Y puesto que SEAT amplía el uso de la electrificación, el nuevo León también incluye un grupo motopropulsor híbrido enchufable (PHEV). Este combina un propulsor de gasolina TSI con uno eléctrico, una configuración que genera 204 CV de potencia conjunta (150 kW). Dispone de una batería de iones de litio de 13 kWh que le aporta una autonomía de hasta 60 km en modalidad solo eléctrica, ideal para la mayoría de los desplazamientos urbanos e interurbanos.
Y siguiendo los pasos del resto de fabricantes, el SEAT León también incluye tecnología de micro hibridación o mild-hybrid de 48 V(eTSI). El sistema, que está disponible con el motor 1.0 TSI de 110 CV y el 1.5 TSI de 150 CV, está asociado exclusivamente a una caja de cambios automática DSG “shift-by-wire”). Al fin y al cabo, bajo la piel de estas versiones tampoco podemos esperar nada distinto a lo que ya ofrecen sus también renovados hermanos de grupo: el Audi A3, el Škoda Octavia y el Volkswagen Golf.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS