El segmento de los pesos pesados de las pick-up norteamericanas se está calentando más que nunca: los tres fabricantes de automóviles de Detroit han revelado sus nuevas versiones, ya sea General Motors con su 2020 GMC Sierra Heavy Duty y su hermana Chevrolet Silverado, o el Grupo FCA con su icónica RAM. El último en unirse es Ford con su gama Super Duty renovada. Programada para llegar a los concesionarios este otoño, la nueva máquina se estrena como la camioneta más probada en la historia de la marca con más de 7 millones de millas de pruebas, es decir, más de 11 millones de kilómetros.

La gama 2020 F-Series Super Duty se encarga de mejorar lo ya existente. Los faros, tanto en el frontal con en la parte posterior, reciben un diseño más fresco y acogen ahora tecnología LED. La parrilla es más más prominente (específica en las versiones de doble rueda trasera) y, según Ford, el paragolpes delantero ha recibido pequeños ajustes que optimizan la aerodinámica y la refrigeración de la mecánica. En el interior encontramos desde madera, hasta cuero e inserciones metálicas, según el nivel de acabado.

En los últimos años, Ford ha estado convenciendo a sus clientes de que su V6 EcoBoost es suficiente para mover la F-150. Sin embargo, el V8 de gran cilindrada aún tienen cabida en los escalones superiores de la gama F-Series

Pero los grandes cambios son los que no se ven a simple vista. Para impulsar a esta gran familia de Ford, el fabricante ha introducido ha optado por ofrecer tres propulsores de ocho cilindros en V: un 6.2 de acceso a la gama y un 7.3 de nueva concepción en lado de la gasolina, y un 6.7 Power Stroke en el bando del gasóleo. Salvo el escalón de acceso, todas las versiones podrán ser equipadas con la transmisión automática TorqShift de 10 relaciones y un selector de distintos modos de conducción según las condiciones del firme y la carga: normal, remolque, eco, deslizante, arena y nieve.

El nuevo bloque de gasolina 7.3 está hecho de hierro fundido, con un cigüeñal de acero forjado, inyección indirecta, una culata con dos válvulas por cilindro y distribución variable. Sin duda, un motor que busca la máxima eficiencia… siempre y cuando el objetivo sea arrastrar ingentes cantidades de peso. Como suele ser habitual en la marca, Ford no ha ofrecido los datos técnicos de sus propulsores, pero confían en tener el V8 de gasolina más potente de su clase.

Actualmente, tras la marcha del Dodge Viper (8.382 cm³), solo el Bugatti Chiron ofrece un motor de gasolina más grande (7.993 cm³)

En cuanto a equipamiento y tecnología, las nuevas F-Series Super Duty contarán con asistente de retroceso con remolque, cámara de marcha atrás con guías o módulo 4G LTE con Wi-Fi. El asistente de ángulo muerto, de mantenimiento de carril, de precolisión o el freno de emergencia automático con detección de peatones se pueden equipar de forma opcional, salvo en el tope de gama, (XLT) que se incluye en la dotación de serie.