Ferrari hará un regreso a la cima de las carreras en el Campeonato Mundial de Resistencia (WEC) con un nuevo Le Mans Hypercar en 2023. El nuevo contendiente LMH será el primer prototipo de Ferrari desde el prototipo-cliente 333 SP, desarrollado inicialmente para la categoría World Sports Car de la copa IMSA, y el primero que competirá bajo el paraguas de fábrica desde hace unas cuantas décadas.

La última vez que Ferrari desafió a otros fabricantes por la victoria general en las 24 Horas de Le Mans fue en 1971, con el 512M (foto de portada). Y si bien la compañía italiana no ha optado por una victoria general en la cita francesa en cinco décadas, lo cierto es que sí ha tenido un destacado éxito a lo largo de los años en las clases GT, y más recientemente ganó la categoría LM-GTE en 2019. Por lo tanto, La Sarthe no es ajena para la firma del cavallino rampante, es normal que quiera sumar la décima copa de oro a su palmarés.

“En más de 70 años corriendo en pistas de todo el mundo, llevamos a la victoria a nuestros coches mediante la exploración de soluciones tecnológicas de vanguardia: innovaciones que surgen de la pista y hacen que cada coche de carretera construido en Maranello sea extraordinario”, dijo el presidente de Ferrari, John Elkann. “Con el nuevo programa Hypercar de Le Mans, Ferrari reafirma una vez más su compromiso deportivo y su determinación de ser protagonista de los principales eventos mundiales del automovilismo”.

Enzo Ferrari detuvo el desarrollo de prototipos de resistencia y GT a finales de 1973 para centrarse en la Fórmula 1. Dos años más tarde, se llevó a casa ambos títulos con la ayuda del piloto suizo Clay Regazzoni y el legendario Niki Lauda

Por el momento, la casa no ha ofrecido detalles sobre su nueva criatura, pero Ferrari explica que ha comenzado a desarrollarse bajo la apariencia de diseño y simulaciones. El programa de pruebas en pista, el nombre del vehículo y la alineación de los conductores se revelarán más adelante, pero es probable que se base en el sucesor del LaFerrari. Sin duda, una buena forma de repartir los gastos ante la reducción presupuestaria para el programa de Fórmula 1 de cara a este año; y tras desestimar la posible vuelta a la IndyCar en EE. UU.

La clase Hypercar es una nueva creación de la FIA y el organismo rector de las 24 Horas de Le Mans, el ACO. Se supone que los coches tienen cierto parecido con los de producción y lucen una combinación de un motor de combustión interna que impulsa las ruedas traseras y un sistema híbrido de tipo KERS en el eje delantero. Estos “hipercoches” están limitados a 690 CV y son un poco más grandes y pesados ​​que sus predecesores, los LMP1. No serán igual de rápidos, seguro, pero aparentemente prometerán espectáculo.

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— Ferrari Races (@FerrariRaces) February 24, 2021

Por otro lado y junto con los monoplazas Hypercar, la edición número 90 de las 24 Horas de Le Mans también verá la clase Le Mans Daytona Hybrid (LMDh), una creación de la IMSA y el ACO. Estos coches solo serán de tracción trasera y estarán construidos sobre un chasis LMP2 de idénticas especificaciones para todos. El equilibrio de prestaciones (BoP) permitirá que LMH y LMDh compitan entre sí por la victoria general. Marcas como Porsche, Audi y Acura ya se han comprometido con el programa; otros como GM se lo están planteando.

Toyota y Scuderia Cameron Glickenhaus ejecutarán sus respectivas máquinas esta próxima temporada del WEC, mientras que Peugeot se unirá a la fiesta en 2022 junto con el equipo privado ByKolles. Las marcas del Grupo Volkswagen y la división de lujo de Honda harán lo propio en 2023; Aston Martin echó atrás su propuesta hace unos meses. Al igual que todos ellos, Ferrari también disputará toda la temporada, lo que marcará su regreso a las carreras de primer nivel mundial −más allá de la Fórmula 1− después de 50 años de ausencia.