En Festival de la Velocidad de Goodwood, Lamborghini Squadra Corse, división de carreras del fabricante y que cumple ahora diez años, ha presentado el primer híbrido de carreras de resistencia de la compañía. Se denomina Lamborghini SC63 y está destinado a participar, a partir de la próxima temporada, en las citas tanto del Campeonato del Mundo de Resistencia, en categoría Hypercar, como en la clase GTP de la IMSA.

Ha sido desarrollado dentro de la normativa LMDh, que exige que una buena parte de sus componentes sean comunes a todos los prototipos. Así sucede con la caja de cambios y con la parte eléctrica del sistema híbrido, tanto la batería como la unidad motor-generador (MGU). También el reglamento obliga a los participantes en la categoría Hypercar mediante homologación LMDh a adquirir su chasis monocasco a alguno de los cuatro fabricantes habilitados por la normativa. En este caso, la marca de Sant’Ataga Bolognese ha recurrido a Ligier, un constructor que todavía no había realizado ningún chasis de esta reglamentación. Los franceses han seguido las directrices del equipo técnico de Lamborghini, que ha optado por una suspensión delantera de tipo push-rod.

Los fabricantes sí que pueden desarrollar sus propios propulsores, aunque estos ven su rendimiento limitado, en cuanto a la potencia combinada en conjunto con la parte eléctrica, a los 500 kW —680 CV—. Lamborghini se ha decantado por un motor de ocho cilindros en uve, sobrealimentado mediante dos turbocompresores y con 3,8 litros de cubicaje. Según ha desvelado la marca, este se ha diseñado con una configuración de uve fría —cold V—, por lo que los turbocompresores están ubicados en el exterior de cada bancada de cilindros. De este modo, pretenden obtener beneficios en términos de refrigeración y facilitar algunas labores de mantenimiento. Por otro lado, el centro de gravedad del conjunto se sitúa más abajo.

La oportunidad de competir en algunas de las carreras de resistencia más importantes del mundo con un prototipo híbrido encaja con nuestra visión del futuro de la movilidad de altas prestaciones, como se ha demostrado en el caso de los coches de calle con el lanzamiento del Revuelto. El SC63 LMDh es un paso hacia los peldaños más altos y el futuro del automovilismo para nuestra Squadra Corse”, ha declarado Stephan Winkelmann, presidente de Lamborghini

Tal y como sucede con los equipos de las otras marcas presentes en estas categorías, la gestión de los prototipos en competición correrá a cargo de una estructura privada. En este caso, se trata de Iron Lynx, con experiencia en las carreras de resistencia, quien se hará cargo de las dos unidades, cada una para uno de los dos campeonatos, aunque se juntarán en las 24 horas de Le Mans. Exhibirán una decoración similar a la que habitualmente lucen los Lamborghini Huracán GT3. Estarán pintados en color Verde Mantis, con una franja Nero Noctis sobre el habitáculo, el capó delantero, el difusor de carbono, la aleta trasera y el alerón. También incluirán detalles evocadores de la bandera nacional italiana. Por otro lado, serán reconocibles a primera vista como un miembro más del establo de Lamborghini gracias a su firma luminosa en forma de Y.

En cuanto a los pilotos, se ha confirmado que la alineación incluirá a dos antiguos participantes en Fórmula 1, como son Daniil Kvyat y Romain Grosjean. Estarán complementados por Mirko Bortolotti y Andrea Caldarelli, pilotos oficiales de la marca desde hace algunas temporadas, mientras que el resto de los componentes del equipo serán revelados en los próximos meses.

Llevábamos tiempo a la espera de que Lamborghini presentara su candidato para el Campeonato del Mundo de Resistencia y su carrera más emblemática, las 24 horas de Le Mans. Un reto que, en las seis décadas de historia de la marca, jamás había afrontado hasta la fecha en forma de esfuerzo oficial. El año próximo, con la entrada de la homologación GT3 en este campeonato, es posible que la marca de Sant’Agata Bolognese sea firme candidata a hacerse con la victoria en dos categorías. El desafío será harto complicado, puesto que, como se ha comprobado esta temporada, la clase Hypercar está muy competida, y Porsche, Ferrari, Peugeot, Toyota y Cadillac serán difíciles de batir, como equipos también respaldados por fabricantes y que ya cuentan con experiencia. Hasta BMW contará con cierta ventaja, puesto que ya está participando dentro del IMSA GTP, así que Lamborghini deberá darse prisa con su programa de desarrollo, que empieza la próxima semana, si quiere poder plantarles cara con garantías.