Los deportivos japoneses de la década de los 90 tienen un encanto especial. Eran rápidos, tecnológicos, gozaban de buen equipamiento y, sobre todo, hacían gala de un comportamiento dinámico ejemplar para la época. Fueron tan populares dentro del universo de las modificaciones que, encontrar una unidad en estado original y bien cuidada es un auténtico rara avis. Pero siempre hay algunas excepciones, como este 1994 Mazda RX-7, modelo americano.
El Mazda RX-7 fue, probablemente, el último gran deportivo de la casa de Hiroshima, con permiso del RX-8. De la tercera generación de este coupé de dos puertas se hicieron 68.589 unidades producidas en una década, pero nos acabó dejando con muy pocas unidades sin sufrir el castigo del tuning y los innumerables cortes de inyección. El ejemplar que ilustra estas imágenes no ha sufrido modificación alguna, ha permanecido prácticamente intacto durante cinco lustros. Un auténtico seminuevo.
Pintado en Montego Blue Metallic, este Mazda RX-7 se adquirió originalmente en Virginia en 1994, hasta que su actual vendedor (Motorcars Washington) lo compró hace un año. De acuerdo con la descripción del vehículo, el coche ha permanecido inactivo durante 12 años. Y es que su odómetro tan solo marca 4.450 millas; es decir, 7.322 kilómetros. Eso son 563 kilómetros al año, despreciando los años que no ha sido usado. Irrisorio para coche diseñado para ser disfrutado.
Se ve impoluto, no cabe duda, pero los años no pasan en balde para muchos de los componentes, aunque no se hayan usado. Recientemente se le ha hecho una actualización de arriba abajo para que todo volviese a estar en orden, como el primer día. Eso se traduce en un cambio de aceite y filtros, nuevas bujías y nueva batería. El depósito de combustible también ha sido drenado y rellenado con gasolina de 2019. Aparentemente, no necesita mucho más cuidados.
Acabado en el nivel de equipamiento Touring, este Mazda RX-7 cuenta con numerosas concesiones al confort y un equipamiento de lo más completo, tales como luces antiniebla, techo solar eléctrico, limpiaparabrisas en la luneta posterior, control de crucero, aire acondicionado, ventanillas y espejos retrovisores con ajuste eléctrico o cierre centralizado, entre otros. Incluso el equipo de sonido Bose Acoustic Wave no ha reproducido un CD siquiera.
El alerón sobre el portón del maletero también es de fábrica. El conjunto exterior queda rematado por unas sencillas llantas de aleación de 16 pulgadas abrazadas por neumáticos Goodyear Eagle GS-D 225/50. Y no, no han sido cambiados nunca. Así que si el futuro dueño tiene planeado circular con el coche por la carretera, deberá de cambiarlos. Aunque un servidor duda que vaya a ser así, pues se trata de una cápsula del tiempo que incrementará aún más su valor en el futuro.
En el interior se aprecian unos asientos tapizados en cuero de color canela que apenas han sido rozados ni calentados. Las alfombrillas, del mismo tono, se mezclan con los plásticos negros en un aura muy noventera. Mecánicamente, el propulsor rotativo 13B-REW con turbocompresor es capaz de desarrollar los mismos 258 CV de potencia y 294 Nm de par motor que cuando salió de fábrica. Y lo más importante, está asociado a un cambio manual de cinco relaciones que envía la potencia al eje posterior a través de un diferencial de deslizamiento limitado.
El coche cuenta con un informe Carfax que demuestra su estado hasta septiembre de 2007. Lógicamente, no ha sufrido daño alguno. Ahora mismo se encuentra a la venta en portal web Bring A Trailer (de donde han salido otras rarezas como este Belly Tank Lakester, Honda S2000 o Toyota Supra A80) y, en el momento de escribir estas líneas, la puja está en 52.000 dólares, algo más de 46.000 euros al cambio. Están colgadas casi 100 fotos del coche, casi nada.
¿Hasta cuánto subirá?
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS