Tuvo para lucirse Renault Group en el reciente Salón del Automóvil de París. No todo fue el estreno del Renault 4 E-Tech y su diseño que, a decir verdad, deja bastante que desear. El concepto de shooting brake Embleme presumió de su tecnología de avanzada y una participación por demás grata y satisfactoria fue la del coupé R17 Restomod eléctrico, una de las reinterpretaciones de clásicos a la que recomiendo prestar atención.
Pero lo más convocante estuvo en Alpine, que nos enrostró a los espectadores el nuevo tope de gama del A110: el Alpine A110 R Ultimate –¿imaginan un cuatro cilindros de 330.000 euros? Pues bien, lo dicho–. En la apertura, el mismísimo Pierre Gasly a bordo del mismísimo A524… sólo que a bordo del simulador. No fue el monoplaza en su versión virtual el único V6 turbo híbrido presente en el stand de la marca francesa.
Alpine Alpenglow: De los 4 a los 6 cilindros
La gran estrella, el Alpenglow Hy6, la evolución del concepto que había comenzado presentándonos un motor de combustión de cuatro cilindros alimentado con hidrógeno dos temporadas atrás –el Hy4–, ese que meses atrás vimos tanto el circuito de Spa y su mítica Eau Rouge como en la 92° edición de Las 24 Horas de Le Mans, competencia para la cual, según recientes declaraciones de Philippe Krief a Top Gear, los 740 caballos del Hy6 no tienen la puerta cerrada.
Ni para la Sarthe ni para la carretera, ya que en su testimonio reconoció la intención de ponerlo a punto hacia el deporte de motor, así también como de su desarrollo para su homologación de superdeportivo de calle, aunque bien sabe el CEO que tal paso depende en buena medida del asentamiento de la red europea de hidrógeno para hacer llevar a la producción un coche de su magnitud con este tipo de propulsión.
Es notoria dicha evolución, que parte de los cambios aerodinámicos, de ventilación y ligereza propios de la reconfiguración mecánica hacia el ahora V6 3.5 litros que lleva en posición central. Un agregado necesario para este motor superior ha sido el conjunto de seis ranuras de refrigeración repartidas a ambos lados de la toma de aire de fibra de carbono del techo, justo antes del comienzo de la aleta de tiburón –ahora aumentada en tamaño– hacia la zaga.
Una zaga que le ha dicho adiós al puente transversal que en el Hy4 unía los pasos de rueda. ¿Qué sentido tendría exhibir un cuatro cilindros en línea? Con la sustitución a cargo del V6, el sector trasero ha adoptado una cubierta de cristal sutilmente laminada en azul. Con ella y la ausencia del puente, el sector trasero se ha limpiado para hacer del motor de combustión una obra en sí misma a la vista.
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Ante las escasez de fotos del interior del Hy6, material del habitáculo del Hy4 que no deja de aportar
Desde la revelación del prototipo inicial, una de las especificaciones más peculiares, y que se conserva con la evolucionada versión, es el acceso al habitáculo. No son puertas de apertura de tipo tijera convencionales, pues, si observan con atención en el video de Instagram de Minoldesign –a cargo de las sesiones fotográficas exteriores de Alpine, cuyo vídeo está más abajo–, se elevan desde la altura propia de las ventanillas, aunque en disposición orientada para que le resulte incómodo al piloto. ¡Un ingreso que invita a acelerarlo a fondo!
De allí en adelante, las fotos del interior no abundan, sino todo lo contrario. Al menos, de momento, son las imágenes de la cabina del Hy6 las que escasean –un plano de su volante publicado por Alpine y no mucho más–, pero, dado que puertas adentro no ha habido un rotundo cambio general, lo que he encontrado del Hy4 sirve para acompañar y graficar los datos técnicos del más reciente Alpenglow.
“Algunas fotos chulas de Minoldesign y otras de mi triste cámara del móvil”, publicaba sobre el Hy4 Marc Poulain, jefe de Diseño Avanzado de Alpine desde el 2022. En aquel posteo de agosto, Poulain, quien llegó a la marca tras una temporada en SEAT y, posteriormente, 11 años en Ferrari –allí trabajó, por ejemplo, en el SF90 Stradale, difundió tomas de diferentes secciones del interior: las dos butacas, el volante de carrera y el triángulo luminoso en forma de ballesta que se forma desde la franja longitudinal que ingresa desde el capó y que tanto identifica a este proyecto. En el marco de la última edición de Le Mans celebrada en junio, ya nos había compartido una breve toma panorámica concentrada en el salpicadero.
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¿Qué hay de los datos duros? Pues, el Alpenglow no se priva de una tradicional y moderna combinación de materiales como la de la Alcántara complementándose con la fibra de carbono y el aluminio. Una de las novedades radica en los soportes agregados para montar cámaras que capten tanto el sonido del alto rendimiento como las imágenes de cabina al momento de su desempeño en circuito.
La iluminación lo es todo en el Alpenglow Hy6, un lenguaje en sí mismo que se acentúa con diferentes funciones tanto en los asientos como en el mencionado triángulo. Mientras el tapizado de las butacas reacciona a la luz reflectando majestuosas tonalidades azules metalizadas, la “ballesta” indica, a través del cambio de colores, diferentes situaciones de conducción como la intensidad de las fuerzas G laterales, las revoluciones del motor y la velocidad a la que se corre.
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Redaccion
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