En este 2024 que ya termina, el Fiat 850 celebra su 60 aniversario, un modelo que definió una época y dejó una huella importante en la industria automovilística. Lanzado en 1964, el Fiat 850 ofreció una mezcla de diseño italiano, fiabilidad y un rendimiento sorprendente para los coches de su categoría. Este vehículo compacto y económico conquistó las calles europeas, y hoy recordamos con cariño sus versiones más deportivas, como el Fiat 850 Coupé y el Fiat 850 Spider.

Desde su lanzamiento, el Fiat 850 fue un coche diseñado para ser accesible y práctico, ideal para el entorno urbano. Con un diseño firmado por el estudio Pininfarina, el 850 fue un ejemplo de funcionalidad y estilo, ofreciendo líneas elegantes y una carrocería compacta que lo hacía perfecto para las calles estrechas de Europa. Su motor trasero y su peso ligero, de apenas 670 kg en la versión Berlina, lo hacían ágil y fácil de conducir.

Motor y rendimiento: Sencillez y eficacia

El Fiat 850 contaba con un motor de 843 cm³ de cuatro cilindros, ubicado en la parte trasera del vehículo. Este motor ofrecía 34 caballos de potencia a 6.000 rpm en su versión básica, alcanzando una velocidad máxima de 120 km/h. Con un peso tan ligero y un motor sencillo pero eficaz, el 850 era ideal para el uso urbano, donde su agilidad y bajo consumo de combustible lo convirtieron en una opción económica y fiable.

En 1968, Fiat mejoró el rendimiento del 850 con el lanzamiento del Fiat 850 Super, que aumentaba la potencia a 37 caballos de potencia, lo que mejoraba su respuesta en carretera y su velocidad punta. Pero el verdadero salto en rendimiento llegó con la versión de 903 cm³, que producía 52 caballos de potencia, permitiendo al 850 alcanzar los 135 km/h. Esta versión más potente ofrecía a los conductores una mayor capacidad de aceleración y una experiencia de conducción más divertida.

Fiat 850 Coupé: Conducción deportiva y divertida

Los amantes de la conducción deportiva y con un presupuesto ajustado recibieron con entusiasmo el lanzamiento del Fiat 850 Coupé en 1965. Con un diseño exterior firmado por los hermanos Boano, el 850 Coupé evocaba la elegancia del Fiat Dino Coupé en las líneas de sus ventanillas laterales. A pesar de su tamaño compacto, el Coupé destacaba por su carácter deportivo y fácil manejo, lo que lo convertía en un vehículo ideal para aquellos que buscaban algo más dinámico.

Con una longitud de 3.67 metros, 33 mm más largo que la versión berlina, el Coupé ofrecía un motor de 47 caballos de potencia, lo que le permitía alcanzar una velocidad máxima de 134,6 km/h. Su diseño interior también subrayaba su carácter deportivo, con un volante exclusivo de radios metálicos y un salpicadero con dos esferas para el velocímetro y el cuentarrevoluciones. Los asientos individuales para conductor y acompañante, junto con el logo redondo con laureles en el frontal, reforzaban la sensación de ser un coche deportivo y divertido de conducir.

Carlo Abarth llevó la versión deportiva del 850 a otro nivel con una serie de modificaciones. En 1966, Abarth desarrolló una versión con un motor de 1.6 litros, que aumentaba la potencia a 125 caballos de potencia y alcanzaba los 211 km/h. En 1968, Abarth mejoró aún más el rendimiento del modelo con un motor de 2.0 litros y 185 caballos de potencia, que le permitía alcanzar una impresionante velocidad máxima de 240 km/h, una cifra impresionante para un coche tan compacto.

Fiat 850 Spider: Un biplaza para los amantes del viento

En el mismo año de 1965, Fiat presentó otra de las versiones más carismáticas del 850: el Fiat 850 Spider, un coche que rápidamente se convirtió en un clásico. Esta versión descapotable fue diseñada por Pininfarina, con el estilista Giorgetto Giugiaro al mando, y ofrecía una estética de superdeportivo en formato reducido. Con 3.782 metros de longitud y un peso de solo 725 kg, el 850 Spider mantenía la mecánica y la batalla de la versión Berlina, pero con un diseño mucho más refinado y deportivo.

La velocidad máxima del Fiat 850 Spider era de 152 km/h, lo que lo hacía adecuado para disfrutar de paseos largos con el viento en el cabello. Como opción, se ofrecía un techo rígido de 10 kg para quienes necesitaban un poco de protección adicional en días lluviosos o fríos, sin perder el encanto del coche descapotable.

A lo largo de su producción, el Fiat 850 demostró ser un coche accesible para el público en general. Con versiones como la Berlina o el Super, el 850 cubría una amplia gama de necesidades, desde los conductores urbanos hasta aquellos que buscaban un coche deportivo pero asequible. Su fiabilidad y bajo costo de mantenimiento fueron clave en su éxito, y el diseño simple y práctico lo hizo muy popular entre las familias europeas.

El FIAT 850 era un coche para todos: accesible, fiable y económico

Hoy, a 60 años de su lanzamiento, el Fiat 850 sigue siendo recordado como uno de los coches más queridos de su época. Con más de 2 millones de unidades fabricadas, se convirtió en un verdadero fenómeno de la automoción, y su legado sigue vivo en los modelos de colección y en los recuerdos de quienes lo condujeron.

Desde el Fiat 850 Coupé con su estilo deportivo y su potente motor Abarth, hasta el Fiat 850 Spider con su diseño elegante y su capacidad de ofrecer una experiencia de conducción única, este coche italiano sigue siendo un símbolo de accesibilidad, diseño y diversión al volante. ¡Feliz 60 aniversario, Fiat 850!