El Audi quattro es un automóvil mítico, un icono de los rallies que cuenta con una legión de seguidores sencillamente brutal, aunque el más deseado de todos es el Audi Sport quattro, con su batalla acortada y su particular imagen de perfil. Los rallies hicieron grande a este alemán y hoy, encontrar uno a precio accesible, es una odisea. Otra cosa sería encontrar un siniestro, y montarte tu propio restomod, como parece haber hecho en Estados Unidos, aunque en este caso el coche no procede de un siniestro, o al menos eso dice un informe de Carfax que se ofrece con la unidad.
Nos hemos encontrado en Bring a Trailer con un brutal Audi quattro modificado hasta un nivel muy alto, como solo se puede encontrar en Estados Unidos o en algunos lugares de Europa como Alemania. Una unidad que data de 1983 y tiene un historial en Minnesota, Nevada y Washington desde 1994, que fue cuando llegó al otro lado del charco. Sin embargo, lo que ahora ofrecen desde el especialista Shop Club Autosport Group, o mejor dicho, ofrecían –se vendió por casi 22.000 dólares– poco se parece al modelo original de los 80, aunque estéticamente sigua con una imagen muy similar.
Y eso se debe, principalmente, que los cambios realizados en su exterior han sido mínimos. Se ha montado un capó de fibra de carbono estilo Sport quattro y está segurado por pasadores. El alerón trasero también es nuevo, más grande, al tiempo que los pilotos son ahumados y las luces antiniebla delanteras se han sustituido. Los paragolpes, bastante feos ambos, son los originales de la variante yankee. Las llantas, unas TSW en 17 pulgadas, van calzadas con gomas Nitto NT05 en medidas 235/40.
El habitáculo muestra unos asientos que no cuadran con el estilo del coche y visualmente no son, lo que se dice, muy atractivos, pero no cabe duda de que harán su trabajo eficazmente con esos enormes pétalos laterales. Sin asientos Corbeau LG1 con soporte lumbar regulable, que se combinan con arneses de cuatro puntos Schroth. El salpicadero está reparado –aparecieron algunas grietas–, se eliminó la radio y el panel de bloque del diferencial. Huecos que no han sido tapados y, sinceramente, quedan horribles. Casi tanto como la combinación de un volante MOMO con un diseño que no casa con el resto de elementos del interior, aunque se ofrece el volante original junto al coche. Detrás del volante se puede encontrar una instrumentación Intellitronix.
Todo el apartado de la suspensión también ha recibido nuevos elementos, como los tirantes traseros, que se modificaron para la ocasión. La suspensión, totalmente regulable, está firmada por Koni, y se acompaña de casquillos de subchasis de aluminio y casquillos de poliuretano para la barra estabilizadora delantera. Los frenos son Brembo de origen Porsche en las ruedas delanteras, donde también se han instalado unos rotores procedentes de un Audi A8. Atrás, además de los discos, también se han cambiado los manguitos por unos con acero trenzado.
El diferencial central, un Torsen, también procede de un Audi, pero en este caso de un A6 de 2001, que tiene como compañeros a un diferencial trasero de deslizamiento limitado con un conjunto de embrague con especificaciones de Audi RS4. Del RS4 se tomaron los soportes para la transmisión.
Y bajo el capó, el cinco cilindros original deja paso a un V6 de 2,7 litros biturbo. Es un motor Audi, procedente de un A6 de 2001, que según afirma el vendedor, lo instaló el especialista Wolf Auto Repair en Las Vegas. Todas las tuberías del propulsor –incluso las del intercooler– tienen especificaciones para Audi RS4, al igual que los inyectores. Los intercoolers se han fabricado a medida y el software de gestión también ha sido desarrollo ex profeso para este especialísimo Audi quattro V6 biturbo. El cambio manual de seis relaciones es el mismo que monta el V6 en el sedán alemán y el escape es artesanal, pero tiene tres convertidores catalíticos.
No tenemos ni idea de la potencia que puede dar el motor. El motor original entrega 230 CV a 5.800 revoluciones y 310 Nm de par entre 1.700 y 4.600 revoluciones. En el caso del Audi RS4, la potencia pasa a 380 CV entre 6.100 y 7.000 revoluciones, así como 440 Nm de par entre 2.500 y 6.000 revoluciones. ¿Quizá sea un punto intermedio entre estos dos modelos?
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS