Cumplir 75 años en un momento tan delicado como el actual, no tiene que ser fácil. Más aún cuando te identifica con escorpión y tu historia está tan ligada a los motores de combustión y a las carreras. Sin embargo, eso no parece importar en Abarth, que han dado a conocer una edición especial aniversario, mientras se preparan para poner en circulación su segundo modelo totalmente eléctrico.

Esa edición especial es el Abarth 695 75º Anniversario, un coche que estará limitado a 1.368 unidades, que coinciden precisamente con el desplazamiento del motor que da vida a la variante: el 1.4 T-Jet, cuyo cubicaje exacto es de 1.368 centímetros cúbicos. ¿Por qué un homenaje tan peculiar? Pues muy sencillo: se trata de una de las últimas versiones con motor de combustión que llevará el sello de Abarth.

La industria del automóvil tiene su futuro en una reducción drástica de las emisiones y por lo general, los fabricantes apuestan por la electricidad. ¿Acierto o un error monumental? Solo el tiempo lo dirá, aunque muchas son las voces que dicen que la electrificación no es el camino, al menos en estos momentos.

Sea o no el momento, los coches eléctricos están para quedarse y en Abarth dará el paso próximamente, y dado que su historia ha estado ligada al motor de combustión más que en otros casos –antes de fabricar coches, se dedicaban a la potenciación de motores FIAT mediante toda clase de componentes, aunque destacaban las líneas de escape–, lo mejor es rendir un buen homenaje.

Desde su regreso como fabricantes, Abarth ha basado su gama en el propulsor 1.4 T-Jet, el cual, ha dado mucho juego en diferentes versiones y modelos, como el Grande Punto o el Abarth 124 Spider. Ese motor, obviamente, es el que da vida al 695 75º Anniversario, en su versión de 180 CV y 250 Nm de par, aunque en este caso monta un turbo Garrett GT 1446. Y por supuesto, no faltará el escape Record Monza, que tan buen sonido emite. Un detalle, por cierto, que pronto perderemos.

¿Qué tiene de especial esta versión 75 Anniversario? Pues a simple vista, menos cosas que aquella que se lanzó por el 70 aniversario de la marca. Estéticamente podríamos, incluso, catalogarlo como soso, mientras que la marca destaca que en esta versión, por primera vez en el modelo, un enorme escorpión domina el techo, que además resalta mucho porque está pintado en una tonalidad dorada al tiempo que la carrocería es completamente negra.

Ese tono dorado también aparece en las llantas –de 17 pulgadas–, en la leyenda con el nombre de la marca que se encuentra en la parte baja de las puertas y en los diferentes logotipos de la marca repartidos por la carrocería.

Para el habitáculo, se recurren a los detalles típicos de estas versiones especiales, que vienen a ser materiales exclusivos y decoraciones específicas. Por ejemplo, los asientos Sabelt, característicos del modelo, son nuevos y fabricados con fibra de carbono. Se acompañan de inserciones en Alcantara y de un equipo multimedia con todos los sistemas conocidos actualmente.

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