El Talbot Horizon hizo su aparición a finales de los 70 como reemplazo del Simca 1200. De hecho, en Francia se vendió como Simca Horizon y en Estados Unidos como Chrysler Horizon, Plymouth Horizon y Dodge Omni. Sí, efectivamente, el Horizon fue uno de esos coches con infinidad de caras.
Visto hoy, el Talbot Horizon, que llegó a España tiempo después de que se pusiera en circulación en otros países, hoy estaría encuadrado en el segmento B, pues con 3,96 metros de largo y 1,68 metros de anchura, es incluso más pequeño que un SEAT Ibiza o un Opel Corsa. En Estados Unidos cambiaba un poco de longitud por los paragolpes que exigía la normativa, aquellos feos apósitos característicos de aquellos años, pero con 4,15 metros era un coche utilitario, aunque fue capaz de convencer a la revista Motor Trend para que le otorgara el coche del año de 1978.
El Horizon llegó a España en 1980, cuando Peugeot había tomado el control de Chrysler Europa, un momento, para el cual, ya se había empezado a retirar el logo de Chrysler para poner en su lugar el de Talbot. La gama comprendía dos opciones: el Talbot Horizon LS, con motor 1.3 de 59 CV, y el Talbot Horizon GLS, con motor 1.5 y 83 CV. Los dos con cambio de cuatro relaciones. Con el paso del tiempo se fueron añadieron versiones, como el Horizon GL o incluso un motor diésel de 1.905 centímetros cúbicos y 65 CV.
La era diésel no había llegado todavía, de hecho faltaban unos años para que Audi pusieran en circulación el Audi 100 2.5 TDI, pero estas mecánicas ya tenían su hueco en el mercado. Es cierto que eran lentas y ruidosas, pero su economía de uso era el pilar básico de su existencia. En el caso del Talbot Horizon, se ofrecieron tres versiones diésel: LD, GLD y EXD. Todos usaban el mismo motor de origen Peugeot antes mencionado, el bloque de cuatro cilindros de 1.905 centímetros cúbicos y 65 CV a 4.500 revoluciones. Las diferencias eran –entre otras cosas– que el Horizon LD tenía cambio de cuatro relaciones, el GLD cambio de cinco relaciones y el EXD era el tope de gama y añadía cosas como la dirección asistida.
El motor diésel montado en el Horizon se ganó más de un alago. La relación de compresión era de 23,5:1, el bloque se fabricaba por fundición y tenía paredes de 42 milímetros, lo que contribuía a una reducción de peso de 25 kilos. La culata se fabricaba con aluminio y daba soporte al árbol de levas y además, presumía de alcanzar la potencia específica más alta hasta el momento: 34,1 CV por cada 1.000 centímetros cúbicos.
Con la caja de cambios de cinco velocidades, el Talbot Horizon diésel –el GLD o el EXD– se ponía a 100 km/h desde parado en 18,1 segundos y podía alcanzar los 158,2 km/h. Con respecto a los consumos, pues según la revista Motor Mundial, en su número 448 de diciembre de 1982, a 90 km/h gastaba cinco litros cada 100 kilómetros, a 120 km/h subía a 7,1 litros y en circulación urbana rondaba los ocho litros cada 100 kilómetros de media.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS