Hablar de Mercedes-Benz es sinónimo por lo general de confort, acabados Premium y prestaciones solventes. Si además lo hacemos de unos de sus buques insignia, el Mercedes-Benz CL 600 (C216), podemos decir sin miedo a equivocarnos que estaremos hablando de uno de los mejores GT que se han fabricado a lo largo de la historia de la automoción, y que por desgracia ya no volveremos a ver en una cadena de montaje, al menos con un bloque V12 latiendo bajo su capó.

Hoy os acercamos la que fue la tercera generación del gran coupe germano y nos centraremos en el mencionado propulsor, sinónimo de lujo y refinamiento mecánico, donde un portentoso bloque de nada menos que 12 cilindros haría las delicias de sus propietarios en las Autobahnen alemanas (en España seguir soñando con el bueno de Pere), gracias a una conjunción de potencia y suavidad prácticamente inigualable en ningún otro modelo de mercado por aquellas fechas… ni por estas.

La segunda generación del CL, conocida en código interno como C216, vendría para dar el relevo al C215 tras seis años de producción. Presentado en el Salón de París de 2006, la nueva carrocería del GT germano sería puesta a la venta en la temporada de 2007, manteniéndose en el mercado hasta el año 2013, cuando cogería el relevo el nuevo S Coupé, retomando de esto modo la nomenclatura que serviría para inaugurar el modelo en 1992.

Mercedes-Benz CL 600 (2006)

El Mercedes-Benz CL 600 es sin lugar a dudas un compendio de potencia, confort, suavidad y lujo por el detalle, prácticamente inigualable en cualquier otro automóvil de producción en serie

Manteniendo la arquitectura de su antecesor, el nuevo CL (C216) seguiría exento del pilar B, dejando al aire las lunas laterales. Por otro lado, el nuevo C216 estaría diseñado sobre la plataforma de la clase S del momento -conocido en código interno como W221-, pero en el diseño del nuevo CL se dejarían entrever rasgos ya vistos en el Mercedes Benz CLS (C219) presentado dos años antes. Tanto a nivel dinámico como dentro de su habitáculo, la nueva generación del GT alemán compartiría infinidad de piezas con la berlina del segmento F de la marca.

La variante que hoy nos concierne sería la impulsada por el propulsor nombrado en código interno como M275E55AL, un bloque V12 de 5.513 cm³ dotado de una culata de 36 válvulas y ayudado por el empuje de un sistema Bi-Turbo e intercooler. Las cotas internas establecerían 82 mm de diámetro por 87 mm de carrera, mientras que la compresión aplicada a los cilindros marcaría una cifra de 9:1. El resultado era abrumador, ya que este CL 600 declaraba una potencia máxima de 517 CV a 5.500 RPM, siendo el par máximo extraído de 830 Nm entre las 1.900 y las 3.500 RPM.

Todo este derroche de potencia se enviaba al eje posterior mediante un cambio automático de cinco relaciones, evidentemente gestionado por infinidad de controles electrónicos para poder encauzar semejante derroche de caballería, siendo el Mercedes-Benz CL 600 capaz de rodar a 250 km/h de velocidad punta -autolimitada- y acelerar hasta los 100 km/h en apenas 4,6 segundos, datos nada desdeñables teniendo en cuenta su peso final declarado de nada menos que 2.110 kilogramos.

Mercedes-Benz CL 600 (2006)

Un derroche de potencia era lo que ofrecía la versión 600 del mítico GT de Mercedes-Benz, toda ella llevada de una manera exquisita al eje posterior

Otros datos de interés del buque alemán eran por ejemplo sus cotas, disponiendo de una longitud máxima de 5.060 mm, con una anchura total de 1.871 mm y una altura límite situada en los 1.419 mm. La batalla, por su parte, tenía una cota de 2.955 mm y el ancho de vías superaba en cualquiera de sus extremos los 1.600 mm, dándonos habida cuenta del tipo de vehículo que teniamos delante. Por otro lado, el CL 600 (C216) dispondría de una capacidad en su maletero de 490 litros y contaría con un depósito de combustible capaz de albergar hasta 90 litros en su interior.

A nivel de bastidor este vendría dotado de suspensión independiente multibrazo en ambos ejes, disponiendo de amortiguadores regulables hidráulicos regulables. La frenada  estaría encomendada a discos ventilados de 360 mm y 330 mm, delante y detrás -respectivamente-, quedando ubicados dentro de un equipo de llantas y neumáticos en medidas  255/45 R18 en el eje delantero y  275/45 R18, aunque opcionalmente la marca dispondría de modelos en medidas de hasta 20 pulgadas.

Pero si en algo destacaba el coupe germano era en su nivel de acabado y equipamiento, cargado de tecnología y nuevos sistemas de seguridad, que harían de él lo más parecido a una nave espacial circulando por la carretera. Prueba de ello son los sistemas como el Distronic Plus, capaz de detener el coche por completo y volver a la velocidad marcada en el control Cruise sin tocar el acelerador, o el Active Night Vision, con el que podríamos visualizar la carretera casi sin luz mediante un sistema de visión nocturna.

Mercedes-Benz CL 600 (2006)

A todo ello hay que unirle otros como el PRE-SAFE, que se anticiparía a situaciones de peligro y las reacciones por parte del conductor, actuando en consecuencia en comunicación con el ESP o el ABS y ejecutando determinadas acciones dentro del habitáculo, como el tensado de los cinturones de seguridad, ajuste de los reposacabezas, etc. Todo ello unido a un sistema COMAND, asistente de aparcamiento y otra infinidad de gadgets electrónicos que nos harían la vida más fácil y cómoda a los mandos de este GT.

Tecnología de última hornada combinada con un equipamiento “First Class” eran otros de los argumentos con lo que el Mercedes-Benz CL 600 conseguía adeptos para la marca y el modelo

En cuanto a los acabados, podemos hacernos una idea del nivel, teniendo en cuenta que estábamos ante un coche con una tarifa de salida de 175.000 euros. Así que en su interior materiales como la madera noble o el cuero de primera calidad estarían distribuidos por doquier en la mayoría de sus componentes.

Eso, unido a un equipamiento compuesto de asientos con regulación eléctrica y calefactables, columna de la dirección eléctrica con diferentes memorias y posiciones, sistema de navegación GPS de última generación o hasta nueve airbags repartidos por todo el habitáculo, serían parte del equipamiento estándar del Mercedes-Benz CL 600.

Mercedes-Benz CL 600 (2010)

Mercedes-Benz CL 600 (2010)

Mercedes-Benz CL 600 (2010)

Para el año 2010 la marca germana dió un pequeño restyling al modelo, en el que incluyó algunos cambios estéticos como una nueva parrilla frontal, faros bi-xenón de nueva factura, incluyendo tecnología LED, o un capó rediseñado. También en esta revisión adecuarían la gestión electrónica a la nueva Euro 5. En el interior un paquete de sistemas de seguridad y ayuda a la conducción serian parte del rejuvenecimiento al que sería sometido este GT de altos vuelos, mas equipado ahora que nunca.

El año 2013 fue el último en el que el Mercedes-Benz CL 600 y el resto de componentes de la gama, versiones AMG incluidas, finalizarían su comercialización. La marca de la estrella volvería a la denominación S Coupé en la nueva generación, aunque manteniendo la misma filosofía y aura que ha encumbrado al modelo a los largo de casi 30 años de historia.

Si por algún casual estás pensando en hacerte con una unidad de este GT, deberás preparar del orden de los 25.000 euros, tarifa desde la que arrancan los ejemplares más antiguos que podamos encontrar en venta. En cualquier caso, esta versión es un rara avis en nuestro país, por lo que en la mayoría de ocasiones es mejor recurrir a otros mercados europeos donde encontraremos más surtido, sobre todo en el alemán.

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