Estamos malacostumbrados a ver intercambios de motor (swap) bastante locos, especialmente por unidades de mayor tamaño que ansían quemar combustible a más no poder. Sin embargo, no estamos tan acostumbrados a ver transformaciones de coches prestacionales en eléctricos, aunque poco a poco está siendo una técnica en auge dentro del mundillo de los clásicos. Pero este Audi A5 con entrañas de Tesla todavía no es un clásico.

Concretamente se trata de un S5 de primera generación. Bajo su capó contaba con un V8 de 4,2 litros con 354 CV y 440 Nm, cifras respetables lo leas cuando lo leas. Sin embargo, por algún extraño motivo, su propietario no estaba satisfecho con su tren motriz. Por lo tanto, se dispuso a buscar un trasplante de corazón. Y en vez de acudir a la sobrealimentación o a un enorme motor, la búsqueda terminó con el motor eléctrico, el inversor y la batería de un Tesla Model S.

La transformación S5 exigió mucho más trabajo extra del que uno puede presuponer. No solo porque el propietario del coche y de Polykup, Samuel Polyak, quisieran mantener el sistema de tracción integral quattro. Lógicamente, la intención es que todos los sistemas electrónicos pudiesen comunicarse con las entrañas del Tesla. Curiosamente, mientras que el Model S P85D venía con dos motores eléctricos, uno delante y otro detrás, este S5 solo presenta uno de ellos.

El Audi S5 de primera generación salía de Ingolstadt con un motor V8 de 4,2 litros de aspiración natural, pero sentado donde antes estaba ese bloque ahora está el propulsor eléctrico de un Tesla Model S P85D

Polyak comenzó el proyecto con la intención de construir algo que nadie más hubiese hecho. Pudo encontrar un Audi S5 de alto kilometraje y un Tesla Model S P85D de 2014 de desguace. Cuando comenzó, no tenía idea de cómo iba a colocar la batería la berlina californiana en el coupé germano. Pero el resultado está ahí. ¿Y cuánta energía proporciona? Depende de la carga de la batería, pero los números oficiales dictan 421 CV (310 kW) de potencia y 650 Nm de par.

Polyak también logró que Tesla y Audi hablaran entre ellos, haciendo ingeniería inversa para conocer todos los códigos del bus CAN. El S5 ahora tiene una pantalla táctil de 10 pulgadas que está completamente integrada con todos los sistemas del coche, gracias a una MCU dedicada y disponible a la venta en Polykup. Una de las adaptaciones más interesantes fue colocar la batería. En lugar de reemplazar el suelo, dividió el paquete en 16 módulos y los apiló donde anteriormente estaban los asientos traseros. También hubo que hacer arreglos para mantener la gestión térmica de las baterías.

En el maletero se puede ver el sistema de refrigeración líquida de las baterías, que emplea un radiador instalado en el frontal

En cuanto a su estética, este Audi S5 se ve de serie con la excepción de un tubo de escape que destaca por su ausencia. El puerto de carga se encuentra bajo la tapa de llenado de gasolina, lo que aumenta la apariencia de un coche de combustión interna. El vídeo trae muchos detalles interesantes sobre cómo se realizó la conversión, lo que el taller tuvo que hacer para que todo funcionara y cómo se comporta ahora. Sin embargo, un servidor aún prefiere el ronroneo del V8.