Otro superdeportivo de tirada corta, nombre intrigante y precio desorbitado verá la luz dentro de 4 años. Se llamará T.50 y el artífice de su diseño es Gordon Murray, el mismo que diseñó el McLaren F1. Tendrá un V12, su peso será reducido y tendrá aerodinámica activa con un ventilador para extraer el aire y aumentar el “efecto suelo”.

Gordon Murray Automotive es la compañía que está desarrollando el T.50, junto a Gordon Murray Design, ambas compañías propiedad de Gordon Murray, el diseñador del McLaren F1. De hecho, si nos fijamos en las líneas de los primeros bocetos de este nuevo superdeportivo, su parecido con el F1 es grande. De hecho, tendrá tres plazas, el conductor en el centro con dos acompañantes a los lados con puertas de apertura diédrica, muchas similitudes con el F1.

Su configuración mecánica también será similar a la del afamado deportivo de Woking, con un motor en posición central-trasera con lubricación por cárter seco y propulsión, muy a la vieja escuela. El corazón de este superdeportivo será un V12 de aspiración natural a 65º de 3,9 litros que revoluciona hasta 12.100 vueltas y producirá 660 CV y 450 Nm de par. Música para los oídos de cualquier aficionado como nosotros.

La suspensión será de paralelogramo deformable en ambos ejes con amortiguación push-rod, frenos carbonocerámicos y llantas de aleación ligera

La aerodinámica estará muy cuidada, pero no con alerones y llamativos aditamentos, sino con un suelo muy trabajado, que incluye un ventilador de 400 mm que extrae el aire para pegar al T.50 al suelo, muy al estilo Brabham BT46B de Fórmula 1, unido a un difusor que a su vez añadirá carga aerodinámica extra. El chasis será de fibra de carbono, pues la filosofía de diseño es mantener el peso al mínimo. De hecho se espera que consiga estar por debajo de la tonelada de peso, con 980 kg de peso en seco, con una relación peso-potencia de 1,5 kg/CV, lo que ya nos indica que tendrá aceleraciones fulgurantes.

“Diseñé el McLaren F1 como una especie de súper GT, absolutamente centrado en la carretera y sin planes para competir, por eso el automóvil estableció nuevos estándares para el empaquetado y el espacio para el equipaje. El diseño de la T.50 tiene el mismo enfoque y mejora al F1 en todas las áreas: capacidad de equipaje, utilidad, mantenimiento y puesta a punto de suspensión. Además, los mapas-motor seleccionables por el conductor aseguran un modo de conducción que se adapta a cada situación”, dijo Murray.

Únicamente se fabricarán 100 unidades, con fecha prevista de entrega a comienzos de 2022, a un precio por unidad de 2 millones de libras, unos 2,25 millones de euros más impuestos. Parece que el mercado de los superdeportivos de tirada corta está llenándose de competencia. Solo hay que ver el Brabham BT62, el Ginetta, el Apollo IE, el Pininfarina Battista o el Ares Panther, por poner algunos ejemplos.¿Habrá mercado para todos?