El Volkswagen Passat ha cumplido 50 años, cinco décadas durante las cuales, o al menos durante una gran parte de las mismas, ha sido uno de los modelos referencia en el mercado incluso para modelos de mayor categoría. El Passat ha sido uno de los coches más importantes de Volkswagen, especialmente durante la vida comercial de las generaciones B5 y B6. Sin embargo, como muchos otros sedanes, el Passat se enfrenta a un futuro complicado, tanto, que la novena generación del modelo solo llegará el mercado con carrocería familiar. No es un dato nuevo, no estamos descubriendo América, pero es algo que ilustra a la perfección como está el panorama para los sedanes.

Si, parte de culpa la tienen los SUV, o mejor dicho, parte de culpa la tienen los usuarios, que parecen haber perdido la capacidad de razonar o de ver más allá de las tendencias de mercado. Pero bueno, eso es un tema que da para escribir un libro y puede que hasta dos, así que no vamos a entrar en debatir si nos hemos vuelto tarumba o como ocurre con muchas cosas, si millones de personas apuestan por algo, quizá tengan razón… ¿no? El caso es que la popularidad de los SUV ha terminado por eliminar algunos segmentos de mercado superinteresantes, mientras que el desarrollo de los coches eléctricos hace lo propio con otras parcelas de mercado, como los utilitarios.

Lo curioso de todo esto es que la llegada de los coches eléctricos abre la puerta a esos segmentos que se han visto afectados por modas, como los sedanes, pues, al menos en el caso de Volkswagen, el Passat se ha transformado en el ID.7, un sedán eléctrico que presume de ofrecer una muy baja resistencia aerodinámica, un factor clave cuando hablamos de vehículos cuya fuente de energía es la electricidad. Pero tal y como están las cosas con los coches eléctricos –precios, infraestructura, desconocimiento de la tencología, cultura y uso del vehículo… –, apostarlo todo por esta tecnología quizá no sea lo más conveniente. Sobre todo, cuando tus coches se dirigen al gran público.

Por ello, el nuevo Volkswagen Passat Variante mantendrá los motores de combustión, mientras que el Volkswagen ID.7 se centra en la oferta eléctrica, para no dejar los motores de combustión, tecnología que acapara la mayoría de las matriculaciones, totalmente de lado. De todas formas, ninguno de los motores que montará el Passat Variant no serán nuevos y por si fuera poco, mantendrá las opciones TDI.

Versátil y con mucho espacio

Llevamos tiempo pendientes de la evolución del nuevo Passat, Volkswagen ha informado cada cierto tiempo para, como siempre, mantener la expectación y la repercusión. Actualmente, los medios de comunicación publican todo lo que les llega, sin filtro, para mantener siempre un elevado nivel de publicaciones –algo que le gusta a Google– y para tener contentas a las marcas, por eso, actualmente podemos ver cada cierto tiempo nuevos detalles de un modelo concreto, pues los fabricantes facilitan información con cuentagotas con la intención de ser siempre noticia. No olvidemos que todo esto, además, también sirve de publicidad…

Durante todo este tiempo, los alemanes nos han desgranado detalles poco a poco, incluso con fotos de unidades de desarrollo camufladas –es una tendencia que han adoptado las marcas, así evitan las “fotos espía”– e incluso declaraciones de los directivos y responsables del desarrollo, como KAi Grünitz, miembro del comité ejecutivo de Volkwagen y responsable de desarrollo técnico, quien dijo hace unos meses: “Con el nuevo Passat, hemos dado gran importancia al elevado confort de marcha y de viaje. Esto se consigue, entre otras cosas, gracias a la mayor distancia entre ejes y al nuevo control de chasis adaptativo con amortiguadores de dos válvulas. Al mismo tiempo, nuestro nuevo concepto de visualización y funcionamiento es distinto. Los asientos de masaje climatizados demuestran nuevos alto nivel de confort interior”.

Ese confort interior, por ejemplo, estará asegurado por nuevos asientos egoActive para las plazas delanteras, asientos que como su denominación deja entender, se han diseñado para ser totalmente ergonómicos y por lo tanto, supuestamente muy cómodos y respetuosos con la salud de la espalda de quien conduce. Aquella persona que quiera estos asientos tendrá que pagarlos a parte, y según versión y equipamiento, contarán con masaje, climatización –con función automática, que detecta temperatura y humedad para regular las funciones de climatización– y 14 posiciones de ajuste. Una ergonomía que se va al carajo, como en muchos de los coches que se lanzan al mercado, por una ausencia casi total de mandos físicos para cosas como la climatización. El volante abandona los mandos táctiles de otros modelos, como bien anunció la marca, pero en la consola central no hay ni uno solo y os recordamos que, en España, tocar la pantalla de la consola central, aunque sea para poner el aire acondicionado, conlleva multa. Es decir, si tienes calor o tienes frío, o usas el control por voz o te paras. ¿La normativa es errónea o los fabricantes han perdido el norte con tanta pantalla? Nosotros apostamos por lo segundo, más aún cuando el nuevo Passat Variant presume de tener una pantalla para el equipo multimedia de 15 pulgadas y una pantalla para la instrumentación con 12,9 pulgadas.

Llama la atención que el selector del cambio ha pasado a la columna de dirección, como en los Mercedes –aunque con un funcionamiento diferente, pues hay que girar hacia delante para seleccionar la D y girar el selector hacia detrás para seleccionar la R–. Volkswagen dejará de usar cambios manuales y por tanto, la consola entre los asientos se ha diseñado para ofrecer una mayor versatilidad, al contar con más huecos de almacenaje. También se ofrece mayor sensación de amplitud y mayor confort.

Además, el maletero crece hasta los 640 litros con todas las plazas, y hasta nada menos que 1.900 litros con los respaldos traseros plegados. Es casi una furgoneta, pero con unas plazas traseras que tienen un espacio máximo de 947 milímetros. Estos datos se deben al aumento en todas las cotas. El nuevo Volkswagen Passat Variant alcanza los 4.917 milímetros de largo, 1.852 milímetros de ancho y 1.506 milímetros de alto, al tiempo que la batalla se alarga hasta los 2.841 milímetros. Es un coche muy grande, tanto, que se queda a poco menos de 50 milímetros del BMW Serie 5, del Mercdes Clase E y del Audi A6, por poner unos ejemplos.

Insulso estéticamente hablando, pero aerodinámicamente eficiente

Otro de los detalles del nuevo Passat que llaman mucho la atención, es que se ha desarrollo junto al Škoda Superb. El Superb es uno de los modelos estrella del Škoda, o al menos lo era antes de la llegada de los SUV, y en esta ocasión, es la base para el nuevo Passat. Es un dato interesante, porque antes era al revés, el Passat era la base del Superb, pero los alemanes no han confiado en Škoda para sacar adelante el proyecto, de hecho, también serán los checos quienes se encarguen de fabricarlo en las instalaciones de Bratislava, junto al Superb. Tampoco debemos olvidar que Škoda también es la responsable de evolucionar los motores de combustión EA211 de VAG.

Sin embargo, donde el Passat no cambia es en cuestiones de diseño, al menos en lo que respecta a concepto de diseño. Nada más ver las imágenes oficiales, lo primero que hace quien esto escribe, la sensación fue de aburrimiento máximo, de fala de originalidad y de falta absoluta de carisma. Desde la generación B5, el Volkswagen Passat ha perdido personalidad y carisma con cada nueva iteración, hasta que hemos llegado a esta última, la novena, el Passat más insulso de cuantos se han lanzado al mercado y hasta nos atreveríamos a catalogarlo como feo en sus versiones normales. El Passat R-Line –la unidad de color blanco que aparece en las imágenes– cuenta con una serie de detalles, como los paragolpes, que le otorgan algo más de chispa estética. Las llantas, con 18 pulgadas, tienen cinco radios muy gruesos, tanto, que resultan incluso bastos y poco agraciados, muy pesados a la vista.

No obstante, te puede parecer falto de toda gracia, como a nosotros, o te puede parecer el más bonito del mercado, pero el caso es que, según anuncia la marca, la forma sigue a la función. Es decir, se ha diseñado para que sea funcional y eficiente en diferentes apartados. Por ejemplo, toda la sección delantera está pensada para minimizar las turbulencias mediante las ya conocidas “cortinas de aire” y mediante una serie de elementos que redirigen el aire alrededor de las ruedas delanteras y directo a los frenos. Los bajos están carenados, los retrovisores laterales tienen unas formas que reducen la resistencia al aire y la parte trasera, gracias a unos deflectores en los pilares D y al spoiler del techo, reducen también las turbulencias del aire. Los faros y los pilotos también se han diseñado con la eficiencia aerodinámica en mente.

La aerodinámica es un apartado que gana importancia con cada día que pasa. Es cierto que se lleva muchos años de estudios y de aplicación de la aerodinámica, pero las nuevas normativas de emisiones, la llegada de los coches eléctricos y, en coches como el nuevo Passant Variant, de la búsqueda del máximo confort de marcha, los túneles de viento y los sistemas de diseño CFD funcionan a marchas forzadas. Es la única forma de que, como ocurre con el Volkswagen Passat Variant eHybrid, anuncie cerca de 1.000 kilómetros de autonomía con batería cargada al máximo y con el depósito de combustible –45 litros– lleno casi hasta el borde.

Motores gasolina, híbridos… ¡y diésel!

No habrá Volkswagen Passat sedán, su hueco en el mercado, teóricamente, lo ocupa el Volkswagen ID.7, que solo se ofrecerá con motores eléctricos. Eso deja fuera de la ecuación al nuevo Passat, que al no ser un modelo de la familia ID, no contará con opciones eléctricas, aunque sí tendrá posibilidad de montar, como se ha mencionado antes, híbridos. Sin embargo, llama muchísimo la atención que se mantengan en catálogo los motores TDI, mientras que todos los rivales retiran estas opciones de sus diferentes modelos. Los motores TDI siempre fueron la punta de lanza de VAG, la referencia en el mercado durante muchos años y el objeto de deseo de muchos usuarios, cuesta darles la espalda, aunque hayan sido la fuente del desastre que golpeó la compañía con mucha fuerza –la bajada general de calidades viene por el vital ahorro de costes–.

Así pues, la gama de motores abarca dos TSI, un eTSI, dos eHybrid y tres TDI. Todos los motores se ofrecerán, únicamente, con cambio automático DSG. Los TSI se basan en los EA888 evo4 y rinde 150 kW –204 CV– y 195 kW –265 CV–. El eTSI se compone del 1.5 TSI EVO2 con 110 kW –150 CV– y un pequeño motor eléctrico a 48 voltios. Los dos motores eHybrid emplean la misma base, que ahora pasa a ser el 1.5. TSI evo2 –antes era el bloque 1.4 TSI– con una batería de 19,7 kWh, que ofrecerá una autonomía aproximada de 100 kilómetros. Las potencias serán las mismas que en los TSI: 150 kW –204 CV– y 200 kW –272 CV–. Con respecto a los TDI, todos se basan en el 2.0 TDI y se escalan en 90 kW –110 CV–, 110 kW –150 CV– y 142 kW –193 CV–. El TSI y el TDI más potentes contará con tracción total 4MOTION.

Todo esto se articula sobre la última evolución de la plataforma modular transversal, más conocida como MQB, que recibe nuevas suspensiones controladas electrónicamente –sistema DCC, con el DCC Pro como opción–, sistema XDS, asistente de aparcamiento, faros Matriz LED “IQ.LIGHT”…

El Volkswagen Passat, como hemos comentado al inicio, lleva 50 años en el mercado y desde entonces, se han vendido más de 30 millones de unidades. Con la novena generación, solo disponible con carrocería familiar, solo podemos esperar que aguante bien en el mercado y que tenga presente un final digno para la saga. Llegará al mercado durante el primer trimestre de 2024.

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Volkswagen Passat Variant

Volkswagen Passat Variant R-Line