Ya está. Ya pasó. Su participación en el Salón de Múnich es historia. Aunque también un punto de partida hacia inevitables especulaciones, porque ha sido hasta el momento la evolución del prototipo más cercana al modelo de producción. Si hasta el nombre fue confirmado por la marca, si hasta unos primeros datos técnicos ya fueron revelados. Pero, para seguir conociendo en profundidad al Volkswagen ID.Polo 2027, serán justamente los datos que vayan confirmándose hasta llegado el lanzamiento en 2026 los que convertirán las especulaciones en certezas.
De momento, pienso en una vinculada al interior, sobre el cual hasta ahora el fabricante alemán mantiene el misterio. Si todos los conceptos llegaran tal como se presentan al vehículo final de serie, pues ya sabríamos con qué nos vamos a encontrar. Al futuro compacto eléctrico, de tracción delantera, con cuatro acabados a comercializar incluido el GTI, con una longitud de 4,05 metros y con la incorporación de la última generación del conjunto Travel Assist, le veremos su rostro definitivo cuando Volkswagen abra sus puertas.
Claro que el ID.2all presentado unos dos años y medio atrás nos permite un pantallazo y preguntarnos si el Volkswagen ID.Polo, finalmente, llegará a las concesionarias con el anclaje al pasado que en su momento prometió aquel concepto. Una vez que se tenga acceso a la cabina, la tarea inmediata será ir a las pantallas, tanto a la multimedia como a la de instrumentos, y empezar a jugar, si es que la marca los confirma como una realidad para el cliente, con los diferentes tipos de personalización.

Además de la configuración estándar, aquel primer eslabón anticipaba que los usuarios tendrían dos maneras de volver a íconos de tiempos que ya no corren. Si un cliente que alguna vez tuvo un escarabajo o un Golf de primera o segunda generación llegara a adquirir un ID.Polo, sería para él todo un honor, el honor de haber experimentado los diseños y equipamientos analógicos originales y pronto de conducir utilizando los indicadores digitalmente reinterpretados de los clásicos.
Si Volkswagen cumple, los usuarios podrán seleccionar en el Volkswagen ID.Polo 2027 la visualización del tablero de un Golf Mk1/Mk2 o de un Sedán. Si se optara por la del compacto de los años setenta, allí estaría, frente a nuestros ojos, la versión digitalizada del cuadro de instrumentos con velocímetro y kilometraje de un lado, un reloj central y a la derecha un medidor de carga de la batería eléctrica en el lugar que en el viejo Golf ocupaba el tacómetro. Las agujas llevadas a una pantalla de 10,9 pulgadas.
Lo mismo ocurriría si seleccionáramos la del Beetle. No solo se reinterpretaría el velocímetro, sino también las ranuras que el coche del pueblo llevaba en esa zona del panel. Las radios y las caseteras conocerían también el mundo digital, pero, lógico, a través de sus proyecciones en la pantalla central de 12,9 pulgadas. ¿Cumplirán con lo prometido los de Wolfsburgo?
Mauro Blanco
Veo arte en los coches y en sus diseños una potencia que va más allá de las cifras. Ex conductor de Renault 12 rojo modelo 1995 de épicos e imprevisibles episodios, al que recuerdo por la hostilidad de su volante, pero, sobre todo, por nunca haberme dejado en el camino.COMENTARIOS