El Toyota C+pod (estilizado como C+pod) es la versión de producción el Ulta-Compact BEV que la firma japonesa mostró en octubre de 2019. Por ahora y desde el pasado 25 de diciembre, solo está disponible en su mercado local, Japón, donde existe una gran demanda de estos vehículos tan pequeños. Sin embargo, podría ayudar a redefinir la noción del conductor diario perfecto en el entorno urbano en todo el mundo.
A grandes rasgo, el nuevo C+pod es un biplaza diseñado como una opción de movilidad urbana que mejora a la eficiencia energética individual. Además del permitir un uso diario –siempre que sea en cortas distancias–, el benjamín de la casa de Aichi también está dirigido a los usuarios corporativos que visitan a los clientes de forma regular (comerciales), a representantes locales del gobierno y a aquellos que residen en zonas urbanas o montañosas que necesitan opciones de transporte seguras, carentes de restricciones y a la vez respetuosas con el medio ambiente.
El C+pod tiene 2.490 milímetros de longitud, 1.290 mm de anchura y 1.550 mm de altura, con una distancia entre ejes (batalla) de 1.780 mm También tiene una distancia al suelo máxima de 145 mm, un radio de giro de 3.900 mm e inclina la balanza en 670 kilos, en el modelo de acceso (X), sumando 20 kg más en el más equipado (G). Dadas sus cotas, asientos para dos y viene con algunas comodidades, como aire acondicionado, asientos calefactados, espejos retrovisores con ajuste eléctrico, cierre centralizado y cuadro de instrumentos digital presidiendo el salpicadero.
El Toyota C+pod es un coche realmente pequeño. En perspectiva, un smart EQ fortwo es 205 mm más largo (2.695 mm), 373 mm más ancho (1.633 mm) y 5 mm más alto (1.555 mm); la batalla también es 93 mm más larga (1.873 mm)
El pequeño vehículo eléctrico de Toyota es más pequeño que un smart EQ fortwo, sí, pero es también notablemente menos potente que el modelo germano. Bajo esa carrocería construida con paneles de plástico se esconde un motor eléctrico de tan solo 12 CV y 56 Nm. Con esas cifras, no es que sea precisamente un velocista: no hay un tiempo de 0 a 100 km/h, ya que alcanza una velocidad máxima de 60 km/h. Por otro lado, la batería de 9 kWh debería ofrecer una autonomía de unos 150 kilómetros, más que suficiente para cubrir las distancias del día a día en la ciudad.
A pesar del contar con un diseño y equipamiento sencillo para mantener los costes y el precio de venta bajos, el Toyota C+pod viene con varios sistemas de asistencia a la conducción, tales como un aviso previo de colisión con detección diurna y nocturna de vehículos y peatones –y detección de ciclistas durante el día–, y una especia de sensor de aparcamiento inteligente que se apoya en el freno de estacionamiento. También viene con pilotos LED tanto delante como detrás. Sin embargo, elementos como unas llantas de aleación no parece que se puedan equipar.
La batería del Toyota C+pod está integrada en el chasis y montada en el suelo, y puede cargarse del 0 al 100 % en, aproximadamente, cinco horas con un cargador de 200 V y 16 A
Otra característica sorprendente que no esperarías encontrar en un vehículo tan minúsculo es un sistema de suministro de energía externo que puede proporcionar hasta 1.500 W de energía durante cortes de energía y desastres naturales. Toyota también ofrece una gama de divertidos acabados para el C+Pod, que incluyen colores exteriores como el naranja, el cian y el blanco, que pueden combinarse con un techo y un capó pintados en negro. El modelo básico incluso puede pedirse completamente en negro, con solo las puertas pintadas en uno de los tonos disponibles.
Si bien la firma nipona no ha revelado a dónde llegará el C+pod fuera de Japón, ha señalado que el coche no estará disponible para los clientes de a pie de inmediato. Más bien, se ofrecerá a las distintas empresas y órganos gubernamentales antes de que las ventas a particulares comiencen en 2022. Los precios comienzan en 1.650.000 yenes, lo que se traduce en unos 13.000 euros (aprox.). La producción del Toyota C+pod se llevará a cabo en la planta de Motomachi de Toyota en Japón, donde casualmente también tiene lugar la creación del maravilloso y radical GR Yaris.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS