Skoda ha confirmado que su próximo SUV, el primer modelo de la marca diseñado como un vehículo eléctrico desde cero, se llamará Enyaq. Derivado del nombre irlandés “Enya”, que significa “fuente de vida”, la denominación continúa con la temática de la terminación en “Q” de los SUV de combustión existentes en la gama: el Kamiq, el Karoq y el Kodiaq. No empieza por “K”, dado que la “E” es la referencia a la electromovilidad.

Aparte de la imagen de portada, la firma de Mladá Boleslav no ha proporcionado detalle gráfico alguno. Pero a grandes rasgos, el Skoda Enyaq será la versión de producción del Vision iV, el prototipo que presentó la compañía el año pasado. También sabemos que se pondrá a la venta en 2021, y que habrá al menos 10 modelos electrificados bajo la submarca “iV” a finales de 2022. Así que sí, Skoda se estrena en el mundo de las cero emisiones con un SUV de aspecto “coupé”.

Basado en la plataforma modular de propulsión eléctrica (MEB) del Grupo Volkswagen, medirá 4,46 metros, 20 centímetros más que su compañero estructural, el ID.3. Aunque no sabemos las cifras con las que nos encontraremos finalmente, en forma conceptual emplea un tren motriz eléctrico que entrega 302 CV a las cuatro ruedas. También ofrecerá una autonomía de 500 kilómetros y la capacidad de cargar la batería desde 0 hasta un 80 % en apenas media hora.

Skoda Vision iV

“Enya” proviene, a su vez, de la palabra gaélica irlandesa “Eithne”, que significa “esencia”, “espíritu” o “principio”

Para 2025, Skoda espera que sus vehículos y modelos 100 % eléctricos con unidades híbridas enchufables representen el 25 % de las ventas. Cuando llegue en 2021, se unirá a las versiones más eco de la firma que llegarán este año, como el Citigo^e iV, el Octavia iV y Superb iV. Dentro de la oferta SUV, se situará por debajo del Kodiaq, y tendrá su equivalente de Volkswagen en el ID.4, y en SEAT seguramente podamos ver algo en una línea similar.