El Renault Clio 2019 -de quinta generación- es una de las novedades del año. Estrena una plataforma completamente nueva -CMF-B- y tiene como leit motiv ser el Clio más tecnológico, más habitable y de mayor calidad percibida. Pretende ser un pequeño gran coche, es decir, que no por ser un utilitario tiene que envidiar a modelos como Mégane. De hecho, es muy fácil confundirlos, especialmente de frente.
Apreciamos unas líneas maduras, muy continuistas y con más elementos de diseño, como una placa plateada que se adivina en la parte inferior de las puertas traseras, alerón trasero, un rombo delantero omnipresente, etc. pese al evidente parecido con el Clio IV, no comparten ninguna pieza. Será reconocible a simple vista y, como el modelo que se despide, solo existirá como un cinco puertas en su versión hatchback. Recientemente publicamos una prueba del Clio saliente con motor diésel y cambio automático EDC.
Mide 4.048 mm de largo (-14 mm), 1.789 mm de ancho (+67 mm) y 1.440 mm de alto (-8 mm), con una batalla de 2.583 mm (-6 mm). La versión de menor peso solo arroja sobre la báscula 1.087 kg, notándose la optimización de la plataforma CMF-B, con un 85 % de componentes nuevos. Ya conocemos los detalles de sus motorizaciones, que serán las siguientes: gasolina SCe 65/75 y TCe 100/130, y diésel Blue dCi 85/115. Próximamente podrá optar a una versión TCe 100 de GLP y a una híbrida e-tech de 128 CV.
Renault Clio 2019, un vistazo al exterior
El frontal exhibe el lenguaje de diseño típico de la nueva Renault, con unos grupos ópticos en forma de C que le dan una identidad lumínica propia con las luces diurnas. Toda la iluminación es a base de ledes. El área que rodea al rombo ha crecido en tamaño y los grupos ópticos quedan enrasados con el capó. Los antinieblas son más pequeños y van inscritos en las tomas de aire simuladas.
Las versiones RS Line van un poco más “makeadas” a nivel de adornos. Reemplazan a las actuales GT Line y se suman a la tendencia de heredar imagen deportiva de los modelos que sí lo son, pero con motores normales (y un precio más ajustado). Se diferencian por la rejilla de ventilación con un motivo de panal de abejas, unas llantas de 17″ específicas y el falso difusor. En el interior, asientos con sujección lateral reforzada, inserciones en símil de carbono, volante con cuero perforado, pedales de aluminio y un ambiente negro con pespuntes de contraste en rojo.
Por su parte, los Initiales Paris son los Clio más equipados y más “lujosos”. Se distinguen por un logo específico, los contornos cromados de las ventanillas, parrilla frontal, protección inferior en las puertas y las llantas específicas de 17″. Por dentro hay dos ambientes, o negro o gris arena, también con asientos específicos -y calefactados-, volante diferenciado y tapicerías y contrastes.
Renault propondrá 11 colores de carrocería y tres paquetes de personalización exterior (rojo, naranja y negro). Las imágenes de los RS Line corresponden al color Azul Celadón, que es nuevo, y también es novedad el Marrón Visón.
La vista lateral es tremendamente continuista, es muy fácil confundirse con el modelo precio. Se aprecia más peso de los cromados en la parte inferior de las puertas y en el contorno de las ventanas y superficie acristalada. Debajo del retrovisor tiene una cavidad nueva bajo la línea que empalma visualmente las ópticas delantera y trasera. Las llantas podrán ser de hasta 17 pulgadas con los habituales bitonos.
La parte trasera queda muy limpia, con absoluto predominio del color de carrocería y sin estridencias ni luces fuera de los grupos ópticos. La cámara trasera está disimulada en el centro del rombo y no tiene una hendidura para abrir el portón. También es un diseño muy conservador, pero parece más ancho y más moderno.
La capacidad del maletero es de 391 litros de “volumen total” (no es norma VDA) incluyendo el doble fondo del maletero -que enrasa con los asientos plegados- y el equipo de música BOSE de alta gama integrado a la izquierda. Es, por tanto, un maletero más digno de un compacto que de un subcompacto.
Podéis consultar los detalles en la galería.
El interior del nuevo Renault Clio
Sabemos que por lo menos habrá tres niveles de acabado: Intens, RS Line e Initiale Paris, todos representados en las primeras imágenes reveladas. El puesto de conducción es envolvente para dar una mayor sensación de amplitud y está orientado al conductor y su comodidad. Tiene más pantallas y de mayor tamaño que nunca, y digo varias porque el tablero de instrumentos pasa a ser totalmente digital. Gana protagonismo visual la iluminación, incluyendo el contorno de la zona del cambio y la parte interior del asidero de las puertas.
Se podrán elegir ocho combinaciones de colores para el interior, siendo por tanto mucho más personalizable
Por encima del volante el conductor tiene una pantalla TFT de 7 a 10″, dependiendo de la versión, siendo la más grande la que incluye la funcionalidad de navegación. Como suele ocurrir en este tipo de diseños, los elementos cambian de tamaño y posición dependiendo del modo de conducción o cómo se personalice. La pantalla central del salpicadero tiene 7 o 9,3″, se ha curvado levemente y es táctil.
Esta pantalla tendrá un sistema de infoentretenimiento denominado Easy Link, que incluye el sistema multimedia y la navegación, así como el sistema de personalización Multi-Sense habitual en modelos más caros de Renault. La climatización se maneja aparte con mandos de uso intuitivo y muy a mano. Solo hay una zona de regulación de temperatura.
Los diseñadores han buscado ahorrar espacio para tener más capacidad para objetos (26 litros en el interior) y mejorar la ergonomía. Las versiones manuales tienen un pomo más elevado de lo normal y con un bastón más corto, ídem las automáticas. Por delante del selector puede tener un cargador inalámbrico para teléfonos móviles que soporten esa tecnología. El freno de mano convencional desaparece y es reemplazado por uno electrónico, algo poco habitual en el segmento B.
Los asientos delanteros son más largos en su banqueta, más envolventes y más delgados en su armazón. De esta forma se beneficia la comodidad de los pasajeros delanteros y quedan unos centímetros libres para las piernas de los traseros. Renault destaca que a pesar de haber encogido 14 mm, es más habitable que antes. Se percibirá más calidad en los materiales blandos al tacto, con mayor presencia respecto al modelo saliente.
También se percibirá mejor el volante, con un airbag más pequeño que condiciona menos el diseño. Incluye una zona para reposar los pulgares (mitad superior del aro), botones para el control de velocidad a la izquierda, teléfono y menús a la derecha, y el audio se sigue controlando con un mando satélite por detrás del aro. El grosor del mismo, ya que lo mencionamos, es superior.
En cuanto a tecnologías, sabemos que el Clio tendrá una serie de “ayudas a la conducción autónoma”, aunque esa denominación puede ser confusa: si hay ayuda, no es autónoma, así que hablamos en todo caso de semiautónoma. En el estado actual de la técnica de la Alianza Renault Nissan Mitsubishi puntualmente se pueden apartar las manos del volante, pero no la vista, así que lo dejaremos en asistencias a la conducción (ADAS) más avanzadas.
Sabemos que contará con alerta de cambio de carril involuntario, asistente de mantenimiento de carril y control de crucero activo. Otras tecnologías que no son desdeñables son asientos calefactados, asistente de aparcamiento y cámaras de visión exterior. Con llantas tan reshulonas es mejor no acercarse en demasía a los bordillos.
Galería de fotos
Agradecimientos a Rubén (@rubensanj) por su ayuda en la elaboración de esta información.
Javier Costas
Me gustan los coches desde que tengo uso de razón (o antes). Tras haber conducido más de 400 coches aquí sigo, divulgando y aprendiendo a partes iguales sobre las cuatro ruedas. Vosotros habéis hecho que se convierta en mi pasión.Pues yo creo que con estas innovaciones lo van a redondear, nueva plataforma, nuevos motores y nueva tecnología para la seguridad. Sobre todo espero que no tarden mucho en sacar el híbrido, Toyota se infla a vender Yaris híbridos, al posible cliente le interesa y los grandes fabricantes apenas lo ofertan. En diseño exterior no hay grandes cambios pero en el interior lo han mejorado mucho, parecía un coche de inferior categoría, sobre todo ese volante tipo Dacia.
Actualmente tiene un precio competitivo, pero lo avances tienen su coste, …
Vale, siempre me gusto esta generación, el diseño, si triunfa, para que tocarlo, es mas, si han corregido los fallos de su anterior generación, pues mucho mejor, pero hay una cosa, que no me gusto, en su anterior generación, montaba discos traseros si equipaba ESP, en esta tambores ¿Los sigue montando en esta nueva versión o por fin monta los discos traseros?
Al menos en las imágenes, que no sabemos a qué motores corresponden, se aprecian discos traseros.
Bajo mi punto de vista, han preferido estancarse en matices muy de Clio y declinar las propuestas del Megane. Tremendamente continuista llegando al límite del aburrimiento, sírvase de error una copia generacional en este buen momento de melé.
El interior, con o sin pantalla, tampoco rompe moldes. Soso y anodino. Ahora solo espero incorpore airbags de cortina el muy parco. En fin, y yo pensando en la revolución francesa…¡quién me mandará pensar!
Ten en cuenta que la generación anterior ha crecido en ventas año tras año desde 2012, luego en Renault interpretan que no hay que hacer grandes cambios en el diseño. De ahí que hayan sido tan pragmáticos como los alemanes: si un diseño funciona, mejóralo un poco, pero no saques algo completamente distinto.
Hola, Javier; hablamos de ocho añazos cumpliendo con creces su cometido. Meritorio. Pero no porque a los alemanes les vaya bien ser conservadores, al potencial demandante de producto francés le interese lo mismo. Tampoco sabemos si con otro lenguaje de diseño le iría mejor aún al Clio, de hecho al Mègane, Talisman, Koleos o Espace, mal no les va, sino todo lo contrario y ya, ya puedo intuir una réplica ante lo antedicho: – Cuasi no existía un sedán Talisman anterior. – Koleos fue un fiasco. – El Mégane quizás iba sufriendo una paulatina recesión inaceptable. – Espace se diluyó.… Leer más »
He pensado lo mismo… Continuista y muy aburrido, y eso que Renault no suele serlo al menos en diseño.
Hola, Fran;
conciso y certero comentario. En sintonía con tu impresión.
Saludos!