Con una gama MINI a punto de ser renovada por completo por una línea de modelos 100 % eléctrica, es hora de ir conociendo algunos detalles de lo que la marca subsidiaria de BMW traerá en los próximos meses. Uno de los primeros en aterrizar en los concesionarios será el MINI Countryman de tercera generación, cuyo inicio de producción en la planta de Leipzig, Alemania, dará el pistoletazo de salida en noviembre de 2023.

Con cinco puertas y un interior modular, el modelo más grande de la familia MINI liderará a la firma hacia una era de electromovilidad sin emisiones. Con su tracción a las cuatro ruedas opcional, el enérgico aventurero garantizará también el placer y la diversión de conducción segura y desenfrenada más allá del asfalto al combinar una “sensación de karting eléctrico con una huella ecológica mínima”. Hay curiosidad por ver cómo se maneja el peso extra en ese “kart”, pues su primo-hermano el BMW iX1 marca 2.085 kg sobre la báscula.

Como resultado, usará un paquete de baterías de 64,7 kWh que alimentará los dos motores, uno en cada eje. Al igual que su primo alemán, el nuevo MINI Countryman disfrutará de un total de 230 kW (313 CV) y 494 Nm. En el iX1, es suficiente para hacer el 0 a 100 km/h en 5,6 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 180 km/h limitada electrónicamente. Por lo tanto, el MINI Countryman 2024 SE ALL4 (como se llamará esta nueva versión) debería de ser prácticamente igualmente rápido que su homólogo de la casa de Baviera.

Hermanado con el BMW X1, el MINI Countryman saldrá a la venta en febrero de 2024, poco después del nuevo Cooper de tres y de cinco puertas

También habrá una vertiente de acceso bautizada como MINI Countryman E, el cual tendrá una potencia de 191 CV (140 kW) y una autonomía estimada de unos 450 kilómetros. Sea la versión que sea, el inminente Countryman 2024 será más grande que la actual iteración del modelo, con una longitud que crece hasta los 4.429 milímetros (+130 mm) y una altura de 1.613 mm (+56 mm). Nos imaginamos que eso repercutirá en un espacio a bordo algo más generoso y en un maletero que, probablemente, supere los 450 litros actuales.

Además de unas dimensiones perceptiblemente mayores, visualmente, el MINI Countryman se diferenciará del modelo que pulula ahora por las calles con un sección frontal más cuadrada, unos voladizos delantero y trasero más amplios y un tratamiento exterior de aspecto más “resistente”, un eufemismo para decir “más plástico negro en los bordes de la carrocería”. Por supuesto, también podemos esperar una interpretación más angular de los nuevos faros bulbosos que siempre han llevado los MINI, como en el Cooper y Aceman.

MINI ofrecerá una versión estándar y otra más potente (S) del Countryman de gasolina y eléctrico, con versiones más enérgicas bajo el sello John Cooper Works (JCW) más adelante

En virtud de ofrecer un producto mucho más sostenible, la marca afirma que el Countryman incorporará materiales sostenibles a bordo como las superficies del salpicadero, el volante, el techo, el suelo y las alfombrillas fabricadas con poliéster reciclado obtenido a partir de botellas PET y restos de moqueta. Esta alternativa a los materiales tradicionales reduce las emisiones de CO₂ a lo largo de la cadena de valor hasta en un 85 % y recalca el enfoque de minimizar la huella ecológica de la próxima generación de modelos de MINI.

“Estamos encantados de poder entregar el primer MINI ‘Hecho en Alemania’ a nuestros clientes de una manera neutral en CO2 gracias al suministro de energía sostenible de la planta”, ha mencionado Stefanie Wurst, directora de Mini. La producción del nuevo MINI Countryman en la planta de BMW en Leipzig está programada para comenzar en noviembre de 2023; el iX1 se construye en Ratisbona.

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