El pequeño Hyundai i10 ha comenzado a salir de la línea de producción. Se pondrá a la venta en breve en toda Europa, con una imagen más fresca y juvenil, que ya pudimos conocer a finales de 2019.
La fabricación del más pequeño de la gama Hyundai se lleva a cabo en la planta que la firma tiene en Turquía. Se trata de una fábrica más antigua de la marca fuera de Corea y lleva activa desde 1997. Actualmente cuenta con cerca de 2.500 empleados y tiene una capacidad anual de 230.000 vehículos.
Ha sido diseñado y desarrollado en Europa y para Europa, donde cuenta con un buen nivel de ventas. Es algo más ancho que el anterior, concretamente 20 milímetros, pero también es más corto (otros 20 milímetros). Disfruta de un maletero de 252 litros y mucho equipamiento tecnológico, principalmente en lo referente a la conectividad.
El Hyundai i10 llega al mercado, mientras algunos rivales se despiden del mismo, como ya hizo el Opel Karl y como ocurrirá con los Citroën C1, Peugeot 108 y Toyota AYGO. Sobre todo ahora tras la fusión de PSA con FCA, quienes también han anunciado que abandonarán el segmento de los urbanos por ser poco rentable.
Con esta nueva generación del Hyundai i10, la compañía surcoreana busca atraer a los conductores más jóvenes. Por ello luce un diseño más desenfadado, incluso se podría tildar de dinámico y con cierta garra. Algo similar ocurre con el interior, donde las líneas resultan más modernas y la combinación de colores y texturas también busca potenciar esa idea de coche juvenil. La gama de personalización sigue el mismo camino, con 22 combinaciones de colores y llantas de aleación de 16 pulgadas.
La pantalla del sistema multimedia es, según la marca, la más grande del segmento al tener ocho pulgadas y entre otras cosas, incorpora Android Auto y Apple CarPlay, junto al sistema Bluelink.
No habrá motores diésel entre las opciones, al menos por el momento. Serán dos los motores disponibles, ambos gasolina y sin turbo. El de acceso será un 1.0 de 66 CV, mientras que el más potente será un 1.2 de 83 CV. Se podrá optar por un cambio automático del tipo pilotado para los dos propulsores.
Se trata de un modelo puramente urbano, con prestaciones suficientes para el día a día sin mayores aspiraciones. El primer motor, por ejemplo, se conforma con una velocidad punta de 156 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h en 14,6 segundos. El más potente completa el sprint en 12,6 segundos y encuentra su tope en los 170 km/h.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS