Desde que se presentó el Corvette C8 con su motor central, o casi desde el mismo día que lo conocimos, se ha especulado con todo tipo de versiones, sobre todo con la equipada con el grupo motor híbrido y por supuesto, con el más radical y potente de todos, con el Corvette ZR1. No podemos pasar por alto que el ZR1 es el Corvette más bestia de todos y las últimas iteraciones han sido realmente salvajes.

La última vez que vimos un Corvette ZR1 fue en 2018, cuando todavía era una berlinetta de motor delantero. Motor, por cierto, con ocho cilindros, 6.162 centímetros cúbicos, compresor volumétrico y una potencia de nada menos que 563 kW, o dicho de otro modo, 765 CV. Y si eso te parece poco, el par llegaba a unos espectaculares 969 Nm a 3.600 revoluciones. Un auténtico torturador y desintegrador de neumáticos y a todas luces, un coche que no todo el mundo puede conducir; ni siquiera por el centro de cualquier ciudad.

Fuente de las imágenes: Autoevolution

Así, pues, ¿Qué esperar de la próxima generación del Corvette ZR1? Pues al igual que en anteriores ocasiones, lo que podemos esperar es salvajismo al más puro estilo yankee, es decir, motor “gordo” y par, muy par, aunque en esta ocasión será un salvajismo controlado, pues el Corvette ZR1, o el que podría ser el Corvette ZR1, se ha dejado ver en varias ocasiones en Nürburgring totalmente camuflado. Y se espera que sea el ZR1, porque su aspecto, a pesar del camuflaje, es muy racing, con elementos aerodinámicos no vistos en las actuales versiones disponibles y un enorme alerón trasero. De hecho, se han visto dos versiones de alerón trasero, una más pequeña y que sigue las formas de la parte trasera –muy similar al alerón del paquete Z07– y otro de tamaño considerable, al más puro estilo GT3.

Lo mejor de las últimas imágenes captadas, es que ya no tienen las pesadas cubiertas negras, sino el típico camuflaje –de origen militar– que, a pesar de ocultar muchos detalles de forma que parece magia, permite apreciar algunas cosas.

Fuente de las imágenes: CarsCoops

Medios como Carscoops o Autoevolution han publicado imágenes del coche en el asfalto de Nürburgring donde se aprecia a la perfección el alerón más grande, así como entradas de aire justo tras las puertas de un tamaño igualmente notable. No parecer ser más ancho, pero el frontal sí es específico, con un labio inferior que parece seguir la tónica mostrada por el alerón, es decir, tener un tamaño respetable, al igual que las entradas de aire frontales. Básicamente, el paragolpes delantero es una entrada de aire con elementos aerodinámicos. El capó delantero también parece específico, con salidas de aire caliente de gran tamaño.

En al parte trasera nos encontramos, en una de las unidades, con unos muy llamativos escapes, cuatro tubos agrupados en el centro del paragolpes, los laterales más estrechos que los centrales, cuya salidas apuntan directamente hacia el suelo. Además, vistos de lateral, sobresalen mucho del paragolpes, así que dudamos que podamos ver algo así en producción y seguramente, Chevrolet esté probando alguna solución de la que ahora mismo no sabemos nada. Lo que sí podemos comentar, gracias a los vídeos de Youtube, es que su sonido es mucho más contenido de lo que es habitual en un motor V8 de origen norteamericano. Es más, suena a motor “normal”, si podemos decir algo así de un V8 que, según se dice, rondara los 850 CV.

El render publicado por gmauthority.com, nos muestra una imagen muy aproximada de como podría ser el Corvette ZR1 de producción

La lunetra trasera, con salidas de aire para ventilar el vano del calor generado por el enorme V8, parece estar cubierta por camuflaje, así que esconderá algunas novedades, aunque poco podemos apreciar con las imágenes y los vídeos disponibles.

Se espera que el Corvette ZR1 tenga su puesta de largo en 2024, para comenzar con sus ventas en 2025.