Coche del día: Hyundai Coupé 1.6i FX

Coche del día: Hyundai Coupé 1.6i FX

La versión más barata del deseado coupe coreano, ni siquiera podía montar airbag


Tiempo de lectura: 3 min.

El Hyundai Coupé 1.6 FX fue un coche que, en apenas unos años, inundó las carreteras españolas. Pocos coupés han tenido un éxito tan notable como el que tuvo el modelo surcoreano, y pocos han sido olvidados tan rápido como el Hyundai Coupé. Todavía es fácil ver unidades en las calles, pero no levantan el mismo interés que cualquiera de sus coetáneos…

Allá por 1996, Hyundai rompió el mercado sin apenas proponérselo, ¿quién pensaría que un coupé, por humilde que fuera, sería un coche con unas ventas tan elevadas y con un peso tan importante en su segmento. En aquellos años, los coupés tenían bastante imagen entre los usuarios y que, de repente, hubiera uno al alcance de tanta gente, solo podía acabar de una manera: éxito.

Con el Hyundai Coupé 1.6 FX se combinaron varias cosas: diseño –obra de Pininfarina–, precio, motor –de origen Mitsubishi– y una conducción ya no deportiva, pero sí entretenida –el chasis fue desarrollado con ayuda de la división técnica de Porsche–. También es cierto que no era el único que conjugaba tales argumentos, ahí estaba el Mazda MX-3 1.6i, que tenía unas prestaciones similares, un diseño realmente atractivo y un precio muy similar. El Hyundai Coupé 1.6 FX costaba 2.445.000 pesetas –14.695 euros, sin IPC–, mientras que el mencionado Mazda MX-3 1.6i costaba 2.525.000 pesetas –15.175 euros, sin IPC–.

Sin embargo, el modelo surcoreano arrasó, y eso que no estaba tan equipado como el mencionado Mazda o como otros rivales ligeramente más caros –a igualdad de equipamiento, las diferencias eran mínimas, pero ni siquiera se podía montar airbag– y su motor no era muy potente, aunque estaba en la media del segmento. El propulsor del Hyundai Coupé 106 FX era un cuatro cilindros de 1.599 centímetros cúbicos de carrera larga –77,4 milímetros de diámetro por 85 milímetros de carrera–, culata de cuatro válvulas y dos árboles de levas e inyección electrónica, que rendía 114 CV a 6.100 revoluciones y 14,6 mkg –143 Nm– a 3.000 revoluciones.

Hyundai Coupé 1 6 FX verde

Popular como pocos coupés han sido, la versión 1.6, con sus 114 CV, estaba en la media del segmento por prestaciones, pero por detrás en equipamiento, sin ser, realmente, el más barato

El cambio era de cinco relaciones, la potencia se enviaba a las ruedas delanteras, las suspensiones era bastante comunes –aunque no por ello malas– con McPherson delante e independiente detrás, con estabilizadoras en ambos ejes y frenos que incluían tambores para las ruedas traseras. Puede resultar chocante que montará tambores atrás, pero nada fuera de lo normal, el mencionado Mazda MX-3 1.6i también los incorporaba, al igual que, por ejemplo, el Honda Civic Coupé 1.6 LS.

Mencionar esos dos modelos no es casualidad, pues la revista Automóvil los comparó en uno de sus números y nos servía para dar una imagen más clara de donde se posicionaba el Hyundai Coupé más barato. De hecho, esa misma comparativa menciona otros detalles igualmente interesantes. Como cabría esperar por las cifras de su motor, las prestaciones no son nada del otro mundo, con una velocidad máxima ligeramente superior a los 180 km/h, un 0 a 100 km/h de casi 12 segundos, así como un 70 a 120 km/h en 10,9 segundos, por poner algunos ejemplos.

Curiosamente, la puesta a punto del chasis era la misma para todas las versiones, no había diferencias en cuanto a tarado de suspensiones, configuración de la dirección y tamaño de neumáticos. Sin embargo, si había diferencia en cuanto a marca. El Coupé 2.0 montaba Michelin Pilot SX y el Coupé 1.6 FX montaba cubiertas Hankook, lo que influia, siempre según lo dicho en la prensa de la época, una sensación de flotabilidad del eje delantero en línea recta, así como mucha deriva en caso de afrontar curvas a ritmo algo rápido.

No quiere decir que fuera un coche peligroso o delicado de conducir, simplemente, no era todo lo deportivo que uno esperaba al ver su diseño.

COMPARTE
Sobre mí

Javi Martín

Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".

2
COMENTARIOS

avatar
2000
 
smilegrinwinkmrgreenneutraltwistedarrowshockunamusedcooleviloopsrazzrollcryeeklolmadsadexclamationquestionideahmmbegwhewchucklesillyenvyshutmouth
Foto
 
 
 
  Suscribir  
el más nuevo el más antiguo
Notificar de
Deivissa
Invitado
Deivissa

No estaría de mas una foto de su interior


NUESTRO EQUIPO

Pablo Mayo

Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches desde que era un chaval. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Ahora embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.

Javi Martín

Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".

Ángel Arias

La historia del automóvil está llena de grandes emprendedores, de ideas arriesgadas, curiosas casualidades, irreconciliables enemistades y muchos fracasos. Es un mundo intenso y fascinante del que muchos hemos quedado cautivados. Cualquier vehículo con un motor me parece interesante, ya sean motocicletas, automóviles, camiones, aviones o barcos; es estupendo sentir la brisa del viento en la cara sobre uno de ellos. Si estáis aquí es porque compartimos afición.

Alejandro Delgado

Jesus Alonso

Javier Gutierrez