El Dodge Caliber SRT4 es un turismo con cinco puertas y cinco plazas, el vehículo más potente de tracción delantera en su momento, que entrega la nada despreciable cifra de 303 CV. Su caja de cambios es una manual de seis velocidades marca Getrag. El Caliber sustituyó al modelo Neon, debido a sus bajas ventas no solo en el mercado americano, sino en el europeo. Su plataforma, la denominada GS, se creó en conjunto con Mitsubishi. La versión SRT4 es la más hipervitaminada y equipada de la gama e hizo aparición en 2008.

Resulta bastante más llamativo que sus hermanos de gama menos potentes. Se caracteriza por una generosa toma de aire en su capó, una parrilla de gran tamaño y unos extractores con una orientación específica, todo ello pensado para una mejor ventilación y refrigeración del motor. En los laterales observamos unas estriberas o taloneras, con un difusor trasero de color negro que aloja una salida de escape circular, de 100 mm de diámetro. Las mejoras estéticas se rematan con un gran alerón sobre el portón trasero.

También se ve a simple vista una menor altura de la carrocería, al llevar unos muelles diferentes y una amortiguación más dura con amortiguadores ZF Sachs, concretamente 28 mm en el eje delantero y 22 mm en el trasero. Esta rebaja de altura tiene como objetivo conseguir un centro de gravedad más bajo. Junto con una barra estabilizadora trasera de 18 mm se obtiene un mejor paso por curva y una mayor estabilidad.

Además, cuenta con unas bonitas llantas de 19 pulgadas con un diseño de cinco brazos, abrazadas por unas gomas de medidas 225/45 R19. Entre los radios se vislumbran unos grandes discos ventilados con 340 mm de diámetro delante y 302 mm detrás, proporcionándole una gran capacidad de frenada, y rematado por unas pinzas de dos pistones de aluminio pintadas en color rojo, consiguiendo un bonito efecto visual.

El interior también presenta características específicas, con una tapicería de piel en color gris oscuro y pespuntes en rojo, con un diseño diferente que mejora su agarre lateral. El volante también hace juego, igualmente forrado en piel gris oscura y sus correspondientes costuras en hilo de color rojo, además de una pequeña inserción en su parte superior imitando al carbono. Para darle un toque algo más racing se distinguen algunas inserciones imitando aluminio en la consola central, pedales de aluminio, techo solar eléctrico, que alegran un interior bastante soso, con una calidad y ajustes de materiales bastante mejorables.

Dodge se interesó también por agradar a los oídos de sus ocupantes, instalando un equipo de sonido con 12 altavoces, cargador de CD con seis discos, lector de CD-MP3, un subwoofer y un amplificador

En su instrumentación nos encontramos con un útil manómetro de presión del turbo, y otro gadgets de utilidad dudosa, como una pantalla que ofrece información del tiempo y distancia empleados en alcanzar los 100 km/h desde parado, los mismos parámetros para el proceso inverso, es decir, para detener el coche de 100 a 0 km/h, o las aceleraciones lateral y longitudinal. También lleva equipamiento de seguridad, como ESC, ABS con distribución electrónica de la fuerza de frenada, sistema de control de presión de los neumáticos y seis airbags, incluyendo los de cortina y de rodillas.

Su motor es un bloque 2.4 de cuatro cilindros en línea, que entrega 303 CV a 6.000 RPM y un par motor máximo de 352 Nm entre 2.000 y 5.600 RPM. Es un motor compartido y desarrollado por Chrysler, Mitsubishi y Hyundai. Alcanza una velocidad máxima de 245 km/h y realiza el 0 a 100 km/h en 6,7 segundos, unas prestaciones algo discretas para la potencia de su motor. Su aerodinámica y su peso de 1.505 kg influyen en las mismas, pero no así su consumo medio, homologado en 8,9 l/100 km, bajo para su potencia.

Su principal particularidad es su compresor de origen Mitsubishi (TD04), junto con un intercooler de diez vías y unos conductos de admisión de mayor diámetro y caudal

La toma de aire es un 40 % superior al de las versiones básicas y cuenta con sistema de admisión variable en todas las válvulas. Este motor está fabricado por Global Engine Manufacturing Alliance (GEMA), en la fábrica situada en el estado de Michigan, EEUU. Pertenece a la familia de los World Engine, unos motores de gasolina de pequeño tamaño construidos íntegramente en aluminio con el teórico objetivo de conseguir unos consumos y emisiones reducidos.

No resulta fácil al tren delantero digerir tanta potencia y par, llegando a sentir un leve movimiento en el volante cuando hacemos arrancadas pisando el acelerador sin miedo. No dispone de sofisticados diferenciales autoblocantes ni de Launch Control. Su comportamiento es netamente subvirador, aspecto que se hace notorio en curvas rápidas, a pesar de su afinado chasis y sus suspensiones rebajadas, pero sin peligro para los ocupantes gracias al control de estabilidad (ESC).

Por firmes deslizantes o mojados igualmente hay que pisar el pedal derecho con cuidado, pues resulta fácil tener pérdidas de tracción, tornándose algo peligroso en estas situaciones. No le hubiese venido mal un sistema de tracción integral, que le ayudaría a mejorar su paso por curva y las aceleraciones, dos puntos flacos del SRT-4.

De manera resumida se puede definir como un compacto deportivo con una estética rompedora y una relación precio-potencia inigualable, sensiblemente más barato que la competencia, pues los plus de seguridad cuestan dinero y subirían mucho el precio, saliéndose de la idea original de Dodge cuando diseñaron el modelo.