La marca de vehículos eléctricos de origen sueco, controlada por Geely, ha anunciado la apertura de pedidos para su tercer modelo y primer SUV, el Polestar 3. Tras desembarcar en el mercado español en tiempos recientes con su Polestar 2, el próximo modelo de la marca escandinava ofrecerá a sus compradores la típica receta Polestar: diseño nórdico y minimalista, numerosos avances tecnológicos, especialmente en materia de seguridad, y propulsión puramente eléctrica, todo ello en un SUV de casi cinco metros de longitud –4,9 m, para ser precisos– y cinco plazas que no pierde de vista el rendimiento, aunque también ofrezca abundante confort para sus ocupantes.

Clásico diseño nórdico con alguna actualización

Adquiere detalles en cuanto a su diseño que derivan directamente del Polestar Precept, según la propia marca. Sus dimensiones dejan fuera de toda duda la apariencia SUV del modelo, si bien incorpora una serie de elementos aerodinámicos que tratan de paliar las desventajas propias de este tipo de vehículos en este sentido. De este modo, se incluye un alerón integrado en el capó delantero, así como un spoiler trasero, junto con unos aditamentos a la altura del pilar C para tratar de reducir aún más la resistencia del aire al avance. Con todo, su coeficiente aerodinámico se queda en 0,29, claramente por encima de modelos rivales como por ejemplo el Tesla Model X, con un Cx de 0,24.

En el interior, además de emplear materiales sostenibles y cuero procedente de explotaciones con “animales felices” –que no impiden que el habitáculo muestre un aspecto de estética trabajada y con superficies de tacto lujoso–, destaca la pantalla central, de 14,5 pulgadas, que permite gestionar un sistema de infoentretenimiento movido por Android Automotive OS, el sistema operativo que Google ha desarrollado para su integración nativa en los automóviles. Es una evolución del que se implementó en el Polestar 2, que de hecho fue el primer modelo en que se instaló. Las actualizaciones remotas, cómo no, serán la manera en que los usuarios de un Polestar 3 podrán mantener al día el software de sus vehículos sin necesidad de desplazarse a un taller de la marca.

Es un SUV eléctrico muy potente que apela a los sentidos con un diseño escandinavo distintivo y dinámicas de conducción excelentes“, Thomas Ingenlath, director ejecutivo de Polestar

Puesta a punto que combina confort y capacidades dinámicas

El Polestar 3, que es el primer modelo construido sobre la nueva plataforma para vehículos eléctricos desarrollada por Volvo, se ofrecerá de serie en versión de dos motores –uno acoplado a cada eje, ambos síncronos y de imanes permantentes–, la cual entrega 360 kW –489 CV– y 840 Nm de potencia y par máximos, respectivamente. Se trata, por tanto, de un vehículo con tracción total, aunque la entrega de potencia está sesgada en favor del motor sobre el eje trasero. Se podrá adquirir el paquete Performance, que incrementa estas cifras hasta los 380 kW –517 CV– y los 910 Nm con un coste de algo más de 6.000 euros. Con él se añaden también unas llantas forjadas que crecen una pulgada en su diámetro, hasta las 22”, y la suspensión neumática recibe un reglaje más ambicioso en cuanto a priorizar la optimización del comportamiento dinámico del vehículo. En ambos casos, la velocidad máxima es de 209 km/h, mientras que la aceleración de 0 a 100 km/h es de 4,7 segundos en la versión más potente, 5 segundos en el caso de no contar con el paquete Performance.

Permite la conducción con un pedal e incluye vectorización de par en el eje posterior, gracias a la instalación de un sistema de doble embrague, que posibilita también el desacoplamiento de la transmisión en este eje posterior en determinadas circunstancias. Esto da pie a realizar una conducción más eficiente, puesto que en este caso el Polestar 3 se desplazará gracias a la potencia entregada por el motor en el eje delantero, que de este modo no deberá arrastrar al trasero engranado, por así decir.

En cuanto a la suspensión, el Polestar 3 equipa de serie un sistema neumático con doble cámara que permite adaptarse tanto a situaciones en las que prima el confort de los ocupantes del vehículo, como a otras en las que se prefiere que este ofrezca un comportamiento que favorezca una mejor respuesta dinámica del coche. La marca ha querido destacar que esta suspensión es capaz de adaptar la velocidad de los movimientos de sus amortiguadores electrónicamente cada dos milisegundos.

Nuestro objetivo era ofrecer el rendimiento y la precisión que definen a todos los Polestar sin comprometer el confort para la conducción diaria. Para hacerlo hemos usado nuevos componentes como la suspensión neumática adaptativa, para construir la “sensación Polestar” de este tipo de coche“, Joakin Rydholm, ingeniero jefe de desarrollo de chasis de Polestar

Para proveer de energía a sus motores eléctricos, la batería del Polestar 3 tiene 111 kWh de capacidad bruta, 107 kWh netos. Es una batería de iones de litio que, integrada en una carcasa de aluminio con refuerzos de acero al boro y con refrigeración líquida, ocupa los bajos del coche entre los ejes de rueda. Polestar ha obtenido una homologación preliminar de su autonomía, bajo ciclo WLTP, de 610 km. Destaca que está equipado con carga bidireccional, esto es, puede a su vez alimentar a determinados aparatos eléctricos. La instalación eléctrica del vehículo trabaja a 400 voltios, y la potencia pico de carga de su batería es de 250 kW. De este modo, recuperar un 70 % de carga en la batería –del 10 % al 80 %– requeriría de tan solo treinta minutos.

Equipamiento abundante, sobre todo en términos de seguridad

La lista de equipamiento de serie es extensa e incluye, además de la mencionada suspensión neumática, techo solar panorámico, iluminación mediante ledes tanto exterior como interior, manetas de las puertas retráctiles con sensor de proximidad y llantas de 21 pulgadas de diámetro. Además, durante el primer año se incluirán sin coste los elementos de equipamiento propios de los paquetes Plus y Pilot, entre los cuales destacan un sistema de sonido Bowers & Wilkins con 25 altavoces, cierre automático y controlado de las puertas o la proyección de información en el parabrisas. También el elemento que le da nombre, el Pilot Assist, su sistema de control de crucero adaptativo con capacidad para intervenir sobre la dirección del coche.

Tratándose de un vehículo del universo Volvo, por así decir, no se escatima en cuanto a equipamiento en materia de seguridad, tanto activa como pasiva. El Polestar 3 incorpora las últimas innovaciones de la marca, como sensores de radar en el habitáculo que detectan movimientos de rango inferior al milímetro, con el objetivo de evitar que accidentalmente se dejen pertenencias –niños y mascotas, especifica la marca– a bordo. Está, además, vinculado con el sistema de climatización para evitar que sus ocupantes sufran hipotermia o golpes de calor. También cuenta con dos cámaras de monitorización del conductor, las cuales siguen los movimientos de sus globos oculares para anticiparse a cualquier situación que pueda poner en peligro a quienes viajan a bordo del vehículo o a quienes transitan por la misma vía. Todo ello permite al Polestar 3 contar con los más avanzados sistemas de ayuda a la conducción –ADAS–.

Lleva nuestro estilo de fabricación a un nuevo nivel, ya que la producción llega a los Estados Unidos de América. Estamos orgullosos y excitados de expandir nuestro porfolio a medida que continuamos con nuestro rápido crecimiento“, Thomas Ingenlath, director ejecutivo de Polestar

Para el segundo trimestre del año que viene se espera que ya se pueda solicitar el paquete Pilot con LiDAR, que añade más cámaras y sensores ultrasónicos al equipamiento de serie. Con este sistema se permite un mejor escaneo del entorno del vehículo, que situará al Polestar 3 en un nivel más avanzado en términos de conducción autónoma. Tanto de este avance, como de otros comentados en los párrafos anteriores, hemos hablado hace poco aquí.

Pedidos ya abiertos para la versión de lanzamiento

La producción del Polestar 3 para los mercados de lanzamiento –Asia, Europa y Norteamérica–, en los que ya es posible de hecho realizar un pedido, se llevará a cabo a partir de mediados del año que viene en la planta de producción que Volvo posee en la ciudad china de Chengdu. Las primeras entregas tendrán lugar en el último trimestre de 2023, a cambio de unos 90.000 euros cada una –exactamente serán 92.900 euros en nuestro mercado, precio de partida–. Un año más tarde comenzarán a fabricarse unidades de Polestar 3 en las instalaciones titularidad de Volvo en Ridgeville, localidad estadounidense situada en Carolina del Sur, momento en el que el modelo se convertirá en el primer Polestar que es ensamblado en más de un país.

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