El Volvo PV 444 (B4B) era, junto al PV 60, dos nuevos modelos de la casa sueca que se convirtieron en símbolos de una nueva era posbélica. Nos remontamos al otoño de 1944 cuando Volvo se adelantaba a la historia previendo que el fin de la contienda bélica estaba cerca. Otra empresa hermana, Saab, también se dio cuenta de ello y sacó al mercado su también famoso modelo Saab 92.
En septiembre de este mismo año aprovechó para realizar una exposición en el Royal Tennis Hall en la capital del país, Estocolmo. En ella mostró al público los modelos que había fabricado desde su nacimiento como empresa dedicada a la construcción de automóviles en 1927, fundada por Assar Gabrielsson y Gustaf Larson. Más importante fue la presentación de sus dos nuevas estrellas, los ya mencionados Volvo PV 444 y PV 60.
El primero de ellos, el PV 444 (B4B), tuvo el honor de ser el primer automóvil compacto de la historia en construirse con una carrocería monocasco, tras el arduo trabajo de un grupo de 40 diseñadores durante dos años. Se recibieron nada más y nada menos que 2.300 pedidos, lo que demostraba el futurible éxito del modelo. Sus fundadores tomaron la decisión de fabricarlo en serie y en serio.
La gran hazaña del Volvo PV 444 radicaba en el éxito sin precedentes que tuvo para la marca y ser conocida fuera de sus fronteras, en especial en Estados Unidos
Ya desde el principio el fabricante sueco se empezaba a ganar la merecida fama de construir los coches (casi) más seguros del mundo. La primera unidad del Volvo PV 444 (B4B) salió a la luz en febrero de 1947, después de aproximadamente dos años de duras y exigentes pruebas. La producción en serie se iniciaría en marzo del mismo año.
El diseño de la carrocería se definía como un fastback de dos puertas. Sus compactas dimensiones eran las siguientes: 4.350 milímetros de longitud, 1.550 milímetros de anchura y una plataforma con 2.600 milímetros con unas vías delantera y trasera de 1.300 milímetros en ambos casos. Asimismo, su peso homologado era de 875 kilogramos.
Aparte de ser el primer compacto de Volvo y el vehículo más pequeño hasta el momento, otra gran innovación que mostraba era el propulsor, con un diseño que partió de cero. El bloque llevaba cuatro cilindros en línea y un desplazamiento de 1.414 cm3 y estrenaba un nuevo diseño de válvulas, situadas en cabeza. Entregaba 40 CV. Este motor, con código interno B4B, funcionaba con gasolina y estaba alimentado por un solo carburador. Llevaba ocho válvulas en total, dos por cilindro. La potencia se transmitía al eje trasero a través de una caja manual de tres relaciones.
Este motor evolucionó aumentando su potencia hasta los 44 CV en la versión de octubre de 1950; en octubre de 1955 se alcanzaron los 51 CV. A principios de 1956 salió una versión mejorada (B14A), con unos nuevos carburadores SU, que consiguieron aumentar la potencia hasta los 70 CV aproximadamente. En 1957 se introdujo una nueva vertiente con la cilindrada incrementada a 1,6 litros con dos versiones (B16A y la B16B). Los frenos eran de tambor en ambos ejes, mientras que la suspensión llevaba muelles delante y un eje De Dion en la parte trasera.
La importancia del Volvo PV 444 (B4B) radicaba en que no solamente fue un exitoso modelo en su tierra -junto al PV 60-, sino que la marca empezó a conocerse fuera de sus fronteras, pues hasta el momento las exportaciones eran prácticamente inexistentes. La revista local Ratten comentó en un artículo que ambos modelos tenían como destino “hacer feliz a los suecos y en cierta medida a algún extranjero una vez que se restablezca la paz”.
El Volvo PV 444 fue el primer automóvil compacto del mundo en llevar una carrocería monocasco, y sometido a durísimas pruebas que convirtieron a la marca en un líder en materia de seguridad
Las ventas del modelo desbordaron hasta las previsiones más optimistas de la marca, con un objetivo de 8.000 unidades, cuando nunca habían pasado de las 2.000 en cualquiera de los modelos fabricados hasta la fecha. Entre 1947 y 1958 se fabricaron casi 200.000 unidades, y desde 1958 hasta 1965 otras 240.000 unidades del modelo actualizado, el PV 544.
Este último se fue introduciendo paulatinamente, con diferencias sutiles con el PV 444 como un parabrisas curvo de una sola pieza en vez de dos, unos pilotos traseros más grandes y un velocímetro de tipo cinta. La caja de cambios de tres velocidades se sustituyó por una más eficiente de cuatro. A nivel de habitáculo se aumentó la anchura de la banqueta trasera y el espacio para las rodillas gracias a un rebaje de la anchura del respaldo de los asientos traseros, pudiendo ser ocupado por cinco personas.
Del total de sus casi 440.000 unidades vendidas, el 36 % se destinaron al mercado exterior, sobre todo en el mercado norteamericano. El Volvo PV 444 desembarcó en la ciudad californiana de Los Ángeles en 1955. Solo tubo que esperar un año para que la marca sueca se colocase en segunda posición del ranking de las marcas de importación en el estado de California. Desde este momento Volvo empezó a labrarse un prestigio en Estados Unidos que se convirtió en histórico hasta la actualidad.
El Volvo PV 444 (B4B) marcó el destino de la marca, sin el cual su historia hubiese sido diferente. En 2024 celebrará su 80 aniversario, que coincidirá con el 50 aniversario de otro modelo de éxito: el Volvo 240 (aquí puedes verlo en la versión “Polar“).
Ginés de los Reyes
Desde que tengo conciencia me llamó la atención cualquier cosa con ruedas. Aprendí a montar en bicicleta al mismo tiempo que a andar, y creo que la genética tiene algo que ver: mi padre adoraba los coches, les ponía nombres, mi abuelo conducía y participaba en el diseño de camiones, y le privaban los coches...COMENTARIOS