Hace poco más de un año se presentaba el nombre y algunos de los datos básicos del primer modelo deportivo eléctrico de la marca Lotus: el nuevo Evija. En principio se dijo que llegaría a los 1.014 CV, pero finalmente la cifra subió y se confirmaron los 2.000 CV a los que llegarían sus cuatro motores eléctricos. También especularon con su velocidad, atreviéndose a decir que llegaría a los 100 km/h en 3 s y a los 300 en 9 s.
A pesar de todo, el Lotus no podía superar de por sí al Bugatti Chiron Pur Sport si quería ir de 0 a 200 km/h en tiempo récord. Este año, concretamente uno de los directores de Lotus, Gavan Kershaw, ha adelantado a Top Gear que le posicionaría como el coche más veloz del mundo, pues sus datos demuestran que el Lotus Evija es capaz de pasar de 200 a 300 km/h en tan solo 3 segundos. Ninguna comparación a los 6,5 segundos que necesita como mínimo el anteriormente mencionado Bugatti o al mismísimo Ferrari SF90 Stradale en el mismo registro.
Competirá contra modelos como el Karma SC2 (0,96 km/h en 1,9 segundos), el Rimac C Two (1.940 CV) o el Tesla Roadster II
Este nuevo proyecto se trata de un cambio muy repentino en la filosofía de Lotus, que es la de fabricar deportivos no muy potentes, de poco peso y sin excederse en las medidas. La marca de Hethel ha querido poner especial atención a la aerodinámica del vehículo y el agarre al suelo, dos elementos que serán esenciales a la hora de afrontar el riesgo. Richard Hill, ingeniero de aerodinámica a cargo del Evija, centró sus esfuerzos en realizar cavidades y canales interiores por toda la carrocería que sirvieran para la aerodinámica o, en ocasiones, para refrigerar el propio coche.
El obejtivo es que el aire del coche entrara desde la parte delantera a un flujo muy bajo y que acabase en la trasera de forma más alta. Así, el coche gana fuerza descendente y consigue que el coche esté pegado al suelo si llega a esos 200 o 300 km/h. La refrigeración también se consigue gracias al splitter delantero: una de sus partes está dirigida a refrigerar las baterías tras los asientos, mientras que las otras dos que hay se dedican a refrigerar componentes eléctricos en la parte delantera.
No solo la carrocería tiene cavidades, también la parte de detrás de las ruedas. En ellas se produce el efecto Venturi, que ayuda a reforzar la resistencia al aire. Por su parte, el alerón trasero es móvil e inteligente, copia en diseño a los Fórmula 1 y ayuda a regular el sistema DRS (de Drag Reduction System, sistema de reducción de arrastre) que junto con el difusor trasero expulsa el aire de forma eficiente.
Preguntado sobre su aceleración inaudita, Kershaw respondía. “Tenemos un coche de una sola velocidad y ponemos el rendimiento en el límite que queríamos. Por lo tanto, no estamos desafiando las leyes de la física, yendo por debajo de dos segundos a 100 km/h y luego teniendo una velocidad máxima baja. Calibramos la entrega de potencia del motor donde queremos el mejor rendimiento”.
Los datos que proporciona la marca estipulan que el Lotus Evija pesa un total de 1.680 kg y su peso por cada CV es de 0,84 kg. De la mecánica aun no se conoce nada, solo que incorpora tracción a las cuatro ruedas (sin árboles de transmisión) y la batería de litio es de 70 kWh. Es capaz de llegar a los 400 km de autonomía (WLTP) y llegar a una potencia máxima de 350 kW con 4,59 metros de largo, 2 metros de ancho, 1,12 metros de alto y dos plazas.
El desarrollo del coche sigue ultimándose para lograr entregar las primeras unidades a sus clientes a finales de 2020, a pesar de las dificultades que ha tenido que pasar Lotus con el COVID-19, según dice el Director Ejecutivo de Ingeniería del Lotus Evija, Matt Windle: “Teníamos cuatro coches en desarrollo, y dos de ellos estaban en Alemania e Italia probándose antes del confinamiento. Logramos recuperarlos, recapitular el plan y ser flexibles, y eso permitió que el desarrollo continuara”.
Durante la crisis de coronavirus, Lotus afirma que trabajó en la pantalla del conductor y en el sistema de menús mediante videoconferencias, mientras que a mediados de mayo continuaron con el desarrollo de los amortiguadores (colaborando con la empresa de componentes y sistemas para automóviles Multimatic) que se adaptan según la configuración de los modos de conducción y la dirección electrohidráulica.
El precio base del nuevo Lotus Evija será de 1,88 millones de euros, y llevará consigo un libro editado con imágenes sobre el proceso de ensamblaje.
Enrique Delgado
Terminando la carrera de audiovisuales y empezando en el mundo del periodismo con el espíritu de aprender sobre motor. Siempre tengo un ojo para lo que ocurre en el mundo y otro en absorber todo el conocimiento que pueda sobre él para escribir literatura, mi hobby personal.COMENTARIOS