Llevamos tiempo pendientes del desarrollo de un nuevo modelo por parte de Aston Martin, un enorme GT que se ha visto circular con camuflaje en diferentes ocasiones y que, en teoría, iba a ser el Aston Martin DB12, el reemplazo del DB11. Poco se sabía, ni siquiera la denominación era oficial, pero finalmente podemos verlo en todo su esplendor y confirmar, efectivamente, que se llamará DB12.
Estamos ante un modelo importante para la marca, un coche que abre una nueva era para Aston Martin, que define a su nuevo buque insignia como “el primer Superturismo del mundo”. Ya no es un Gran Turismo, va un paso más allá y la compañía británica se saca de la manga una nueva categoría. Sin embargo, no es un coche totalmente nuevo, se parte del Aston Martin DB11, aunque los cambios son lo suficientemente profundos como para considerarlo un coche totalmente nuevo, o casi.
El DB12 representa el primer producto de una renovación completa de nuestra gama durante los próximos 24 meses bajo la propiedad de Lawrence. Desde que llegó, hemos invertido mucho, mucho, no solo en lo que vemos frente a nosotros en términos de producto, sino en los fundamentos del negocio”, Alex Long, director de producto y estrategia de mercado de Aston Martin
La puesta de largo del Aston Martin DB12 supone un cambio notable en todos los apartados y será reconocible desde el primer momento como un Aston Martin, sin lugar a dudas. Frente al DB11, cambia casi todo a excepción de la silueta, que se mantiene intacta, y la parte trasera, no en balde, para su desarrollo se ha partido, como hemos dicho, del Aston DB11. Además, este nuevo “Superturismo” se ha diseñado de acuerdo con el principio “lo grandioso no es suficiente” aunque, sin embargo, ¡prescinde del motor V12!
Adiós al V12
El Aston Martin DB11 supuso, por sí mismo, un cambio importante en la compañía, que venía del DB9 –el Aston DB10 fue una edición superlimitada de 10 unidades para todo el mundo–, el cual, todavía tenía ciertas raíces de la era Ford. Sin ir más lejos, el propulsor V12 del DB9 era un derivado del motor del Vanquish, que a su vez era una evolución del que estrenó el Aston Mastin DB7 Vantage, que se desarrolló, básicamente, mediante la unión de dos V6 Duratec de Ford. El mismo DB11 mantenía cierta relación con la era Ford, porque el propulsor era un derivado de aquel V12, aunque profundamente revisado y con dos turbos.
Para el reemplazo del DB11, contra todo pronóstico, no se hace uso del motor V12, que queda restringido al vano motor del Aston Martin DBS 770 de edición limitada. En su lugar se ha optado por el V8 4.0 biturbo de Mercedes-AMG, el cual se revisa y se modifica, para poder lograr 671 CV a 6.000 revoluciones y 800 Nm entre 2.750 y 6.000 revoluciones, lo que supone un aumento del 34% con respecto al DB11. Para llegar a estas cifras, se han cambiado árboles de levas, se ha modificado la relación de compresión, se montan turbos con mayor diámetro y una refrigeración diferente, se ha rediseñado el sistema de refrigeración y se añaden dos enfriadores auxiliares y se ha montado un radiador adicional de baja temperatura en el circuito de agua del enfriador de carga. El radiador de aceite auxiliar tiene más del doble de área frontal que su predecesor y se han aumentado las aberturas en un 56% para mejorar el flujo de aire hacia los radiadores.
Desde Aston Martin afirman que todavía hay futuro para su motor V12, el cual llegará “en una aplicación completamente nueva”, así que entre esos ocho nuevos coches que prometió Lawrence Stroll, el CEO de la marca, contará con un motor de doce cilindros. No olvidemos que hace tiempo se prometió desde Aston que siempre tendrían un V12; siempre,e claro está, que las normativas se lo permitan y en esta ocasión, nadie nos dice que no llegue con el tiempo una versión de este nuevo DB12 con motor de doce cilindros, tal como hicieron el DB11 y el DB11 V8, pero en sentido contrario. Por el momento, desde la compañía británica aseguran que el nuevo DB12 soporta 100 kilos sobre el eje delantero y que apenas se pierden prestaciones con respecto al Aston Martin DBS.
La transmisión corre a cargo de un cambio ZF de ocho relaciones, que resulta ser la misma que usa el BD11, aunque la relación final se ha reducido y se ha recablibrado la gestión electrónica del cambio. No obstante, en el nuevo Aston Martin DB12 desaparece el diferencial de deslizamiento limitado y en su lugar se ha optado por una unidad electrónica que, según afirman desde la marca, pasa de totalmente abierta a 100% bloqueada en cuestión de milisegundos.
Misma plataforma, pero completamente revisada
El jefe de ingeniería de Aston Martin, Simon Newton, ha hecho unas declaraciones que ofrecen una imagen muy aclaratoria sobre la posición del nuevo Aston Martin DB12: “todavía disfrutamos de este niche entre Continental y Roma. Pero el segmento ha avanzado desde el 11… “. Evidentemente, Newton se refiere al Bentley Continental GT y al Ferrari Roma, dos modelos contra los que se tendrá que enfrentar el nuevo Superturismo inglés que representan dos formas muy específicas de entender un coche de este tipo, una especialmente lujosa y otra más deportiva y dinámica. Así, por tanto, el nuevo DB12 se coloca entre medias, y representa el término medio, o eso al menos pretenden desde la marca.
De hecho, en realidad no hay nada nuevo en este apartado, pues el buque insignia de la compañía británica siempre ha estado en una posición de mercado como la comentada por la marca, es decir, ha sido un coche de altísimo lujo y de prestaciones muy elevadas, al tiempo que era un coche muy apto para rodar enormes distancias a velocidades de órdago. Sin embargo, es lógico entender que dado las cifras ofrecidas por el motor, se ha tenido que revisar el chasis por completo. Y se revisa, básicamente, porque la base es la misma del DB11, base, que ahora es un 7% más rígida gracias a unos refuerzos mediante travesaños –cruceta sobre el motor y travesaño delantero– , unas bandejas inferiores y el mamparo trasero, que según la firma, mejoran el refinamiento al tiempo que mejoran la sensación de dirección descentrada.
Alex Long, director de producto y estrategia de mercado de Aston Martin, afirma que “es un verdadero coche para conductores. Está destinado a ser mucho más manejable, mucho más ágil, pero también inspirador de confianza sin perder aquello que lo convierte en un Aston Martin: la calidad de conducción y la capacidad para recorrer largas distancias”. No obstante, es más llamativo lo que comenta Newton, pues al parecer, las experiencias en el desarrollo del DBX y del DBX707 influyeron en el programa DB12: “Tuvimos en las primeras fases, 707 vs DBX y ese era tipo de brecha que queríamos replicar, o exceder, cuando se trataba del DB11 frente al DB12”.
Las ruedas presionan contra el asfalto gracias a una suspensión con amortiguadores adaptativos inteligentes de nueva generación, junto a unas barras estabilizadoras más rígidas. Los amortiguadores tienen un aumento del 500% en el ancho de banda de distribución de la fuerza, lo que a su vez, han permitido ampliar el rango de carácter del DB12. Además, se han calibrado para lograr un mayor control de la carrocería con una personalidad específica en cada modo de conducción –GT, Sport y Sport–. Por otro lado, desde la marca insisten en que han buscado ofrecer un tacto de conducción muy deportivo y por ello, se ha instalado una columna de dirección no aislada, que garantiza una buena retroalimentación, al tiempo que se ha puesto a unto el sistema EPAS –sistema electrónico de dirección– para que ofrezca unas reacciones rápidas, pero no exageradas o demasiado agresivas. La relación de dirección es de 13,09:1, con 2,4 vueltas entre topes.
Para detener al nuevo DB12, los ingenieros han desarrollado un sistema de frenos con rotores de 400 milímetros delante y 360 milímetros detrás, fabricados con hierro fundido con caras acanaladas y perforadas, cuyo servofreno, también procedente del DB11, se ha recalibrado para mejorar la retroalimentación del pedal. Se pueden solicitar frenos cerámicos, capaces de soportar hasta 800 grados de temperatura y pesan 27 kilos menos.
Enorme salto evolutivo
El nuevo Aston Martin DB12, como se puede apreciar, es un automóvil de primer nivel, uno de esos coches que a todos nos gustaría conducir al menos una vez en la vida, pero en el fondo, eso también ocurría con el DB11 y en realidad, con todos los Aston Martin hasta la fecha. Cada uno en su momento, ofrecían lo mejor de la marca y una personalidad muy particular. Sin embargo, siempre han pecado un poco de tener un habitáculo elegante, pero un pequeño paso por detrás de los rivales directos, una situación que en esta ocasión se ha buscado eliminar. De hecho, el interior del nuevo GT inglés, o mejor dicho, del Superturismo inglés, es lo que más cambia con respecto al DB11.
Todo en el habitáculo del Aston DB12 es completamente nuevo, todo. Salpicadero, paneles de puertas, asientos –espectaculares, fabricados con fibra de carbono–, volante, instrumentación… con el DB12 se ha dado un enorme salto evolutivo frente al DB11 abismal, tanto en diseño como a nivel tecnológico, aunque, quizá, allá perdido esa esencia entre clasicismo y modernismo de todo Aston. Pero no solo hay cambios en el diseño, también se ha cambiado el software, que resulta una de las novedades más importantes del coche. Ahora es un trabajo 100% Aston Martin en lugar del sistema “prestado” por Mercedes. La revista Autocar ha preguntado a los responsables cual ha sido el motivo para realizar una inversión tal elevada, Long comentó: “dos razones: una es que hay un nivel de funcionalidad que necesitamos en el que no se enfocan y también tienen mucha funcionalidad no esencia, porque muchos de sus coches operan en segmentos diferentes al nuestro, por lo que hay redundancia en la tecnología. Y lo segundo es que la interfaz que define a la marca es cada vez más importante en la era digital. Para operar realmente la altura del lujo, debe tener su propia interfaz, su propio “apretón de manos” con el automóvil”.
Sin embargo, que la firma haya dado el salto a una digitalización mucho más profunda, no se ha prescindido de mandos físicos, mucho más intuitivos de usar que la dichosa pantalla que lo aglutina todo. Además, como se contó desde DS Automobiles, una vez apagada la pantalla, verlo todo llano de huellas no es precisamente premium.
Entre las funciones del sistema multimedia del DB12, según Aston, destacan cosas como la posibilidad de leer reseñas de restaurantes en la interfaz de navegación y se contará con una aplicación para teléfonos móviles, que permite preprogramar la ruta antes de subirse al coche. Por supuesto, Apple CarPlay y Android Auto están disponibles.
Las primeras entregas están programadas para comenzar durante el tercer trimestre de 2023, pero los precios no se han especificado todavía.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS