Dentro de los cambios que se están produciendo en el grupo PSA, con la última adquisición de Opel, el lanzamiento de sus nuevos productos nos puede dejar pistas sobre cómo se va a orientar cada marca. De hecho, hace unos días comentábamos que Citroën había dejado de lado la deportividad. De la misma manera intuimos un salto de calidad muy notable con el Peugeot 508, ya que la marca del león se orienta hacia el segmento generalista superior, para arañar ventas a los Premium. De hecho, parece que la referencia a la hora de diseñar la nueva berlina ha sido el Audi A5 Sportback. ¿Qué le queda a Opel/Vauxhall? De momento sabemos que estarán muy enfocados en la electromovilidad.

En cualquier caso, vamos a ver qué nos ofrece la marca con su nuevo modelo.

Motor

La oferta de motores para la berlina emplea las versiones 1.6 Puretech en gasolina, ofreciendo dos variantes (180 y 225) y BlueHDi para los diésel, en este caso con 2 bloques 1.5 y 2.0, pero ofreciendo 3 potencias diferentes (130,160 y 180). Las denominaciones que emplea Peugeot hacen referencia a la potencia en CV aproximada. Por ejemplo, el motor 1.6 Puretech 180 rinde 181 CV, mientras que el 1.6 Puretech  225 rinde 230 CV. Los diésel rinden 131, 163 y 177 CV. Como puede apreciarse, no hay versiones básicas, ni tricilíndrico gasolina, ni un diésel de 110 CV pensando en flotas y versiones de precio gancho.

Todos equipan de serie el cambio automático EAT8 de 8 velocidades, salvo la versión de acceso diésel, que puede montar una caja manual de seis marchas.

Ya en 2019 Peugeot prevé introducir en el 508 una versión híbrida enchufable, versión que sin duda necesita la marca. Sin dicha versión, resultará difícil decirle algún día au revoire a los motores diésel.

Plataforma EMP2

Chasis

El nuevo Peugeot 508 emplea la plataforma EMP2, estrenada en 2013 en el Peugeot 308 de segunda generación, que ahorra 70 kg respecto a la versión anterior, y que permite adaptar la batalla a diferentes segmentos. Esta misma plataforma convenientemente adaptada también se empleará en la versión híbrida para poder alojar mejor las baterías sin hacer grandes sacrificios en habitabilidad o maletero.

Los mayores cambios provienen de la fabricación, donde se han empleado nuevas técnicas de soldadura, en combinación con adhesivo estructural, para dar mayor rigidez al conjunto; estampación en caliente o el empleo de termoplástico para la fabricación del portón. También se emplea el aluminio, tanto en capó como en aletas delanteras.

“Desde los inicios del proyecto, hemos elegido trabajar con los mejores proveedores, aquellos que dominan de verdad la tecnología. Por ejemplo, Saargummi en las juntas o Inteva en los elevalunas, que tienen una larga experiencia junto a marcas premium alemanas. Además, gracias a la estructura de carrocería reforzada, garantizamos una mayor rigidez y, por lo tanto, menos carga sobre las puertas y las ventanillas. Por último, hemos aumentado en 1 mm el grosor de los cristales, respecto al estándar. Todos estos puntos, sin excepción, están presentes, por ejemplo, en un Audi A5 Sportback.” – Pascal Delabarre, Director del Proyecto 508.

En cuanto a chasis, es el ya conocido, con McPherson delante y multibrazo detrás, aunque incorpora de serie (salvo el 2.0 diésel) la amortiguación variable controlada electrónicamente, lo que Peugeot llama Active Suspension Control, pudiendo seleccionar entre ECO, Sport, Confort o Normal. Esta selección también actúa sobre la respuesta del acelerador o el tacto de la dirección.

Carrocerías y equipamiento

Como hemos visto hasta aquí, nada nuevo bajo el sol: motor delantero transversal, McPherson delante y multibrazo detrás, con la plataforma de la casa, salvo la excepción de los nuevos métodos de fabricación. Los mayores cambios provienen del diseño y del interior.

“El Nuevo Peugeot 508 culmina una gama con un diseño totalmente renovado. Incorpora todos los rasgos estéticos que hemos desarrollado en nuestros últimos concept-cars, como el Peugeot Exalt o el Peugeot Instinct. Así, el i-Cockpit® del Nuevo Peugeot 508 ha surgido directamente del prototipo Exalt.” – Gilles Vidal, director de diseño de Peugeot.

En cuanto al exterior, el cambio es más que notable: nuevo frontal más agresivo, con las luces de día resaltando los laterales, línea lateral con nuevas nervaduras, luces traseras con varias tiras LED enmarcadas dentro de un policarbonato oscuro que abarca todo el ancho, abultamientos en la aleta trasera para dar protagonismo al paso de rueda y, atención, portón trasero. El nuevo modelo deja la configuración cuatro puertas (sedán), para pasar a ser una berlina cinco puertas con cierto aspecto de coupé. Las dimensiones han cambiado y son muy similares a las de un Audi A5 Sportback: 4,75 m (8 cm más corto que la anterior versión), 2,79 m de batalla (2,4 cm más corta también), 1,84 m de anchura (2 cm más ancho) y 1,4 m de alto (6 cm menos), consiguiendo dar un aspecto más rotundo. Parte de esa rebaja en altura se debe a que ahora las puertas no tienen marco, dejando el cristal al aire, muy a lo A5. El Cx que consigue esta carrocería es de 0,26, un valor muy bueno.

De momento, esta será la única carrocería disponible. Ni rastro de una versión familiar de momento.

Pasando al interior, unos de los cambios que trae este nuevo 508. Preside el habitáculo su seña distintiva: el i-Cockpit, que particularmente creo es de los interiores más originales que hay ahora mismo en el mercado. Volante muy pequeño y cuadro de instrumentos digital de 12,3’’, que sobresale por encima del volante. Como dato curioso, incorpora una cámara de visión nocturna de infrarrojos con un alcance máximo de 250 metros, que se muestra en el cuadro de instrumentos, para poder percatarnos de algún peligro con la suficiente anticipación. Esto ya se incorpora en algunos modelos alemanes por lo menos desde hace 10 años.

Las asistencias a la conducción son abundantes, pudiendo contar con control de crucero adaptativo, sistema de centrado y mantenimiento en el carril (LPA), frenado de emergencia con detección de peatones, aviso de vehículos en el ángulo muerto, detección de señales y luces largas automáticas. Posee también el Visiopark 2, una cámara con visión de 360º, o el Full Park Assist, donde el sistema se encarga de dirección, acelerador y freno para que aparcar ya no sea una incomodidad.

En la consola central encontramos una pantalla táctil, para manejar el sistema de entretenimiento, de 8 o 10’’ según el acabado, y han colocado justo debajo 7 botones a modo de piano, que nos darán acceso rápido a las principales funciones como radio o climatización. El diseño del salpicadero es lineal y bastante limpio, habiendo conseguido (al menos en las fotos) dar la impresión de un salto de calidad, empleando materiales como cuero, aluminio o madera de roble gris.

Los asientos cuentan con certificación AGR (dependiendo de la versión), y cuentan con regulación eléctrica y función masaje, sin olvidarnos del tapizado en cuero con costuras en contraste. Curiosamente, el Opel Insignia también tiene asientos con esa certificación. No podemos olvidar su sistema HiFi de Focal, o la compatibilidad del sistema con MirrorLink, Android Auto y Apple Carplay, incluyendo además recarga inalámbrica para nuestro teléfono.

Precio y disponibilidad

El nuevo Peugeot 508 podremos verlo en el Salón de Ginebra y estará disponible desde septiembre de 2018, llegando la versión híbrida enchufable (plugin-hybrid) en 2019. En cuanto a precios, aún no hay nada confirmado, pero será interesante ver donde posiciona Peugeot su nueva berlina. Ahora mismo la versión más económica del 508 (modelo vigente) cuesta 25.750 euros, es un diésel de 120 CV con carrocería sedán y acabado Active. Por 600 euros más se queda a tiro el gasolina de 165 CV con el mismo equipamiento. La versión más costosa sigue siendo 508 RXH, que tiene la carrocería familiar, decoración crossover, y el comercialmente acabado sistema híbrido diésel con tracción total y 200 CV (HYbrid4), 40.230 euros.

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